Vik Muniz, Transformando materialidades en cuadros conceptuales

Vik Muniz, Transformando materialidades en cuadros conceptuales

por Cecilia Molina

Un artista visual que juega con la luz, los materiales  y los mecanismos de la percepción,  engañando a los ojos, para luego revelar los trucos al espectador.

Nacido en São Paulo, Brasil, en 1961, Hijo único de una familia de clase media trabajadora, Vik Muniz comenzó a dibujar desde muy pequeño. A los catorce años ganó un concurso en un certamen artístico para escuelas públicas y consiguió una beca para estudiar dibujo y escultura.  A los dieciocho años, impulsado por una fascinación intensa por la percepción y la óptica, ideó un proyecto de diseño dentro de la empresa para la que trabajaba  que le permitió obtener un premio por este proyecto, convirtiéndose en una especie de niño prodigio de la publicidad.  Saliendo de recibir el mencionado galardón, presenció una pelea callejera, al intentar separar a dos hombres, recibió un disparo en la pierna. Con el dinero de la indemnización recibida, viajó a Nueva York  y ese viaje cambio su vida y su carrera, conforme  lo manifestado por el artista  en conferencias y entrevistas.

En 1983 se encontraba en Nueva York, trabajando como enmarcador y haciendo prácticas en empresas de publicidad, a la vez que comenzaba a dar sus primeros pasos como artista plástico,  haciendo esculturas que luego fotografiaba.  La fotografía fue ganando presencia sobre el objeto poco a poco, combinando distintos aspectos de la ilustración, el diseño y la escultura.  Lo que más le interesaba y le interesa es la percepción visual, por parte del espectador. Dos teóricos ejercieron gran influencia sobre el artista, el primero fue James Jerome Gibson, uno de los más importantes teóricos de la percepción visual, con estudios basados en la aproximación del espacio y el medio ambiente. La otra importante influencia fue Marshall McLuhan, el filósofo canadiense de la teoría de la comunicación cuyos estudios han tenido aplicaciones prácticas en la publicidad y la televisión. Durante los primeros años en Nueva York  estudio en la Parsons School of Design, donde  en los  noventa fue profesor dando clases de dibujo, historia del arte y teoría visual.

Realiza desde 1988, una  serie de obras en las que investiga principalmente temas relacionados con la memoria, la percepción y la representación de las imágenes del mundo de las artes y los medios de comunicación. Hace uso de diversas técnicas y utiliza en las obras, materiales a menudo inusuales, tales como azúcar, hilo,  chocolate líquido, algodón, dulce de leche, salsa de tomate, gel para el cabello, alambre, la basura y el polvo, entre otros materiales.  Ese mismo año  realiza la serie de dibujos  “Lo mejor de la vida”, en el que reproduce una parte de las imágenes de los medios masivos de la memoria, las vuelve a imprimir utilizando la matriz de punto y luego las vuelve a fotografiar.  Con esta operación inaugura su enfoque de las cuestiones relacionadas con la circulación y la retención de imágenes. Vik Muniz realiza un nuevo tipo de arte, la pintura fotografiada, que consiste  en crear una obra de arte con diferentes materiales, normalmente óleo mezclado con distintos elementos, que después se captura en una fotografía perfecta de la obra finalizada, que da un carácter permanente a la obra original que no puede mantenerse estable en el tiempo.

La siguiente serie, que recibe el nombre del material que utiliza en la producción de la obra,  se titula “Imágenes de alambre”, luego le seguirán  “Imágenes de la Tierra”, “Imágenes de chocolate”, entre otras. Pasa a utilizar los elementos para recrear figuras referentes tanto del mundo de la historia del arte, el espectáculo, la historia  y de la vida cotidiana. Las series de fotografías en ediciones limitadas son el producto final de su trabajo, el mismo  se extiende también a otras experiencias artísticas como Land art y las cuestiones relacionadas con el registro de estas creaciones. El artista brasileño también se apropia a menudo de imágenes de obras de otros artistas, como su obra “Doble Mona Lisa, después de Warhol”, de 1999, utilizado mermelada y mantequilla de maní en su creación  sobre la base de una impresión de 1963 del artista pop Andy Warhol y que, a su vez, era una derivación de la Mona Lisa de Leonardo da Vinci.  En consonancia con algunos conceptos del teórico y crítico de arte contemporáneo Nicolás Bourriaud,  el artista realiza  relecturas de obras de arte, partiendo del precepto de que el artista imagina vínculos, relaciones entre sitios dispares y, así establece conexiones, consume lo que otros produjeron y produce lo que otros van a consumir.

...