Analisis de noticia: “Desfalcan a México alumnos reprobados”

Analisis de noticia: “Desfalcan a México alumnos reprobados”

Antes de comenzar el análisis de los resultados que arrojan las estadísticas de la UNESCO quiero evidenciar el título de nuestra noticia publicada por Exelsior. Que, a mi juicio, es un tanto pretenciosa. A simple vista podemos reparar que los niños reprobados son los causantes y la razón por la que México se ve desfalcado. Resultaría desatinado seguir con la propuesta, tal vez un tanto sarcástica del título, y comprar la idea de que alumnos reprobados están dejando sin dinero a México, como si por su baja capacidad fuese que se está desperdiciando el dinero destinado a la educación de estos.
Las lamentables estadísticas de los resultados de las pruebas aplicadas a los alumnos de educación primaria son el síntoma de un incipiente sistema educativo en México. Podemos hablar de una evidente crisis de aprendizaje que se ve manifestada en el hecho de que el 50% de los alumnos no están adquiriendo los componentes básicos. A su vez, revelando que en las regiones pobres del país fueron los lugares donde se encontraron peores resultados. Cualquiera se haría la pregunta: ¿Qué está pasando? La educación pública parte de un principio en cualquier país, y este es de que es un sistema. Todo sistema tiene componentes que al realizar su trabajo correctamente hacen que este funcione de manera esperada. Pero si pasa lo contrario, el sistema disfuncionará, como pasa en la educación México. Ahora ¿Cómo podremos identificar que componentes son los que están provocando un mal mecanismo? Pues la responsabilidad se reparte en distintas direcciones. Lo que las estadísticas anuncian es apenas la punta del iceberg; el alumno es quien debe encargarse de sus estudios, de investigar y de cumplir con ciertas tareas. Sería lo ideal. Situación que se esperaría que los padres ayuden a mantener. Pero el alumno está inmerso  bajo un régimen cultural, económico y social que también señala una dependencia significativa en la educación de los infantes. Quienes, también, están bajo un modo en particular de enseñanza de los profesores, que siguen un plan de estudios realizados por la dirección de la escuela. Esta, a su vez, tendrá el objetivo de alcanzar las competencias establecidas por la supervisión de la zona que depende directamente de ciertos parámetros que establece la SEP. Es difícil encontrar, en concreto, un responsable.
Toda crisis científica evoluciona cuando el paradigma se rompe y surge uno que proponga una visión distinta y funcional ante las demandas actuales. Es lo que se esperaría para superar esta crisis de aprendizaje a la que está sometido México. Un cambio significativo, en cuanto al sentido que toma la inversión de los recursos para la educación y la forma de enseñanza tradicional.

Para el 2014, se mencionan diversos planes que, aunque, sin  pretender ser pesimista, todos los comienzos de año se escuchan. Y si se llevaran a cabo estoy seguro que comenzaría un cambio de estructura en el sistema educativo y los resultados de cualquier estadística revelarían algo distinto, y no, mas allá de una crisis de aprendizaje, una crisis en diversos sentidos que hace ver un México multiproblemático.

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