Arqueoacústica maya

Arqueoacústica Maya. La necesidad del estudio sistemático de efectos acústicos en sitios arqueológicos

Al hablar de la acústica presentada en los diversos sitios arqueológicos lo primordial sería saber si los mayas estaban plenamente conscientes de lo que se trataba o si simplemente fue un accidente o casualidad que hayan descubierto este fenómeno.

        Sin embargo y con base a que la arqueoacústica no es una disciplina nueva podemos decir que es meramente importante manejar algunos aspectos cuantitativos, de medición y caracterización de espacios, materiales constructivos e instrumentos musicales y retomando los planos de dicho fenómeno como lo son los físicos estrictamente: el sonido como un fenómeno natural, fisiológicos y cognitivos, de significado, como parte de manifestaciones culturales, religiosas y artísticas.

        De acuerdo a lo manejado con referencia al punto (a), el sonido como fenómeno natural, es necesario considerar un protocolo de medición acústica. Por otro lado es importante destacar cuáles fueron son los materiales involucrados en la construcción, los cuales favorecen las propiedades acústicas involucrándolas al mismo como parte de un todo, es por eso que se puede considerar desde el punto de vista matemático el estudio acústico de un sistema para plantear y resolver una ecuación específica, la llamada ecuación de onda.

Es de suponer claramente pues que si un recinto estaba totalmente cubierto de cierto estuco se generaban determinadas propiedades acústicas y haciendo referencia al punto (b), el cual es correspondiente a los aspectos fisiológicos y cognitivos, hay que recordar que en el fenómeno auditivo va siempre implícito el receptor, así como un procesamiento y una decodificación de la señal sonora. También es de suma importancia mencionar que uno de los puntos más delicados son las extrapolaciones directas de la forma en las que los seres humanos percibimos el sonido en la actualidad con la forma en la que era percibido por un oído “maya” en otras palabras, no se pueden tonar estas cualidades como “fuertes” o “débiles” ya que deben ser consideradas en un contexto relativo y para finalizar en el punto (c) se plantea que el significado de los sonidos puede variar considerablemente, esto depende del contexto cultural específico y es aquí en este último punto en donde nos resulta más difícil llegar a ciertas conclusiones definitivas.

Cabe destacar que Velázquez descubrió que las ranas de barro que se encuentran es la zona arqueológica en templos de la Pequeña Acrópolis de Yaxchilán las cuales pueden sonar como autentico canto de las mismas con las gotas de lluvia, se presume que posiblemente su elaboración fue para rendir algún tipo de tributo a su dios de la lluvia en ciertas ceremonias. Flores y Flores incluyeron un análisis de tono-volumen interno utilizando las notaciones musicales de un piano, sin embargo en los Templos I y III el sonido acústico se comporta como una concha ya que aumentan la mayoría de las frecuencias, lo cual hace que se escuchen más fuerte, en cuanto a los materiales de los templos se observa que en los templos I y II se encontraron varias figurillas y tres silbatos, así pues lo mismo sucede frente al Templo III, donde se ubicaron varios metates de ofrenda y algunos silbatos, de acuerdo con esta información nos encontramos con que los mayas construyeron distintos cuartos con diferentes dimensiones y materiales, en las que utilizaban su conocimiento sobre el sonido, permitiendo así la transmisión de diversos mensajes y música al público, involucrando una mayor cantidad de población en una actividad realizada en el interior de los mismos.

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