Historia del colegio motolinia de comalcalco.

HISTORIA DEL COLEGIO MOTOLINIA DE COMALCALCO, TAB.

En el año 1948 el Padre Benedicto Plascencia Misionero del Espíritu Santo había llegado para hacerse cargo de la parroquia de San Isidro Labrador en Comalcalco, Tabasco.

“Apegado al trabajo pastoral del Señor Obispo de Tabasco, Monseñor José del Valle, vio la necesidad de crear en el estado los semilleros que darían los frutos de la fe católica. Observaba los estragos de la política Garridita había provocado en la fe cristiana, que se refleja la falta de fortaleza interior que una formación moral proporciona.”  

Un día en casa de Don Salvino Somellera Hernández, hombre de prestigio y respetado en la región. Le pidió al “Padre Benedicto recomiéndome algún Colegio en México, propio para señoritas… deseo internar a mi hija Cali”.

A partir de ese momento se convocó a los socios del Centro social donde todos apoyaron y aportaron recursos financieros para pagar el viaje al Padre Benedicto.

Iluminado por el Espíritu Santo concibió la idea de que la solución sería un Colegio en donde además de la formación académica se inculcara la fe cristiana y sus valores morales.

Su primer paso fue viajar a la ciudad de Villahermosa para buscar el apoyo del Señor Obispo, quien lo acompañó a la ciudad de México en su gran misión, ¡Convencer a la madre superiora Lolita Echeverría, Fundadora de los Colegios Motolinía, proyectara un Colegio para niñas en Comalcalco!

Se entrevistaron con ella y el Padre Edmundo Iturbide a quienes convencieron de la necesidad de la fundación del colegio en tierras tabasqueñas. El primer gran problema que les presentaron fue que se requería de un total de 100 alumnas mínimo, y de conseguir casa para las religiosas, así como del inmueble para albergar el Colegio en sí.

A principios de Enero de 1950, un grupo de entusiastas y alegres religiosas, arribó a ciudad de Villahermosa y para ser trasladadas al municipio de Comalcalco, Tab., con domicilio calle lerdo cuya propietaria era la señora Esther Díaz de Lutzow, que con tanta emoción arreglo y amueblo la casa.

Llegó la Madre Conchita Ipiña como Madre Superiora, la Madre Carmen Morales para primero y segundo grado, la Madre Lupita Denetro para tercero y cuarto año, la Madre Susana Olvera para impartir “Comercio”, la Madre Teresita Meza para kínder junto con la Madre Lupita Pantoja.[pic 1]

Todas ellas con una sólida preparación académica y con una amplia experiencia pedagógica, así como educación en la fe.

El primer uniforme era blanco y un mandil de fondo celeste con círculos blancos. Los sábados había clases mañana y tarde, tanto de cuestiones académicas como deportes. Los jueves Sacerdotales eran denominados así, por el día elegido para celebrar la Sagrada Eucaristía.[pic 2]

La Madre Tere instruía a las alumnas para que éstas dieran catecismo. Con anticipación visitaban las casas grandes de los rancho, para invitar a los niños de los trabajadores al catecismo de los domingos. De igual forma se integró un grupo que daba catecismo a los presos.

Para fomentar el amor a la naturaleza y estar más en contacto con ella, el Colegio organizaba días de campo en la Hacienda la Luz.

La Madre Lupita Denetro estuvo por poco tiempo, por lo que a los pocos meses siguieron llegando otras religiosas, entre ellas la Madre Paz Bouscieguez y la Madre María de Cruz Rojas Meza.

En el año de 1951 cambiaron a la Madre Conchita y la Madre Carmen Morales quedó como Madre Superiora. Al haber aumento de alumno las Madres se pasaron a vivir a la casa Silveria Pulido de Peralta

Ya instalado el Colegio, el Internado y ahora, la casa de las religiosas. Los salones de clase por la mañana eran aulas y por las noches eran dormitorios, las papeleras servían de camas. Los aseos del colegio se hacían muy de madrugada, con la luz de una lámpara de gas, y apoyados con una bomba para obtener agua.

El colegio tomaba forma, la capilla donde se llevaban a cabo la Eucaristía y los servicios religiosos era muy pequeña, pero ya se contaba con ella.

En ese año también se realizó una misión, que consistió en visitar los hogares tabasqueños para censarlos. Las Madres encargadas de ello fueron: Carmen Morales, Susana Olvera y la Madre María de la Cruz Rojas. En muchos hogares no eran bien recibidas pero gracias a su entusiasmo la misión pudo llevarse a cabo, obteniendo respuesta de niños, jóvenes y adultos, quienes acudían al Colegio para recibir el sacramento del bautismo, la comunión y matrimonio.

En el año de 1951 nace el colegio Morelos que después, se anexa al colegio y se incrementa el alumnado.

En noviembre de 1951 se tuvo que quedar sola la Madre Paz, para fines de diciembre llegó la Madre Ana María Guerrero, la Madre Guadalupe Flores, las Madres Soledad Ríos, María Elena Villareal, Bertha Guerrero y Emma Camargo, quedando la madre Lupita Flores como nueva directora para iniciar el ciclo escolar 1952. En Septiembre de ese mismo año, se les unió además la Madre María del Rosario de Jesús Crucificado Cervantes. En ese año se pasó el Colegio a la 5 de Mayo.[pic 3]

Para agosto de 1953 arribó a tierras tabasqueñas la madre Amalia Lona Díaz. También Anita Guerrero vino a Comalcalco como directora del Colegio para el ciclo 1952-1953.

En 1957, procedente de México, D.F., llegó por primera vez la madre Josefina Gómez Soltero, acompañada por las madres Trini Torres, Victoria Salcedo y Aurora Jaime. La madre José tuvo la dicha de colaborar con el Motolinía en otras muchas ocasiones.

En 1959 se comenzó a rellenar el terreno de la calle Sáenz que sería después la primaria

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