ISIS en el marco internacional geopolítico y financiero

ISIS en el marco internacional geopolítico y financioero

Después de los atentados del 13 de Noviembre de 2015 en París, Francia, las alarmas en todo el mundo han vuelto a saltar; siendo presa de la amenaza, Europa, al igual que los Estados Unidos , han sido cabeza de turco de numerosos ataques terroristas a través de la era contemporánea. Anteriormente, Al Qaeda, grupo terrorista que fue liderado por Osama Bin Laden, se presentó como la espada de Damocles en la lucha contra las potencias occidentales, el terror encarnado bajo el yugo islamista, y como una fuerza retrógrada de malicia destructiva. Hoy en día, su nombre ha sido sustituido en el marco de la esfera global del terror por un grupo que, en tan poco tiempo, logró escalar como el referente de muchos grupos terroristas islámicos, y éste es el Estado Islámico.

El Estado Islámico o ISIS, como mundialmente se le reconoce por sus siglas en Inglés (Islamic State of Syria and Irak) es un grupo insurgente terrorista, con ideología yihadista islámica, que promulga la fundamentalización del Islam desde una perspectiva radical mediante el uso excesivo de la fuerza, cometiendo así, actos brutales contra a los que ellos llaman infieles. Con Abur Bakr Al Baghdadi autoproclamado califa de todos los musulmanes y líder del Estado Islámico, sus intereses son diversos, teniendo en cuenta sus objetivos tanto históricos, culturales, políticos y económicos. El EI quiere expandir sus tentáculos en donde una vez se proclamó un estado islámico erigido por la misma Sharia (Ley Islámica) en tiempos medievales, desde el Levante Mediterráneo hasta Andalucía, en España, sin embargo, el EI ha declarado sus verdaderas intenciones, las cuales dictaminan el dominio total del mundo bajo la bandera negra a gritos de un Allahu Akbar resonante en todos los rincones del planeta, en donde la justicia del Islam sea el sustento espiritual y social de todos los habitantes.

Nacidos del propio Al Qaeda, el EI operaba como una fuerza insurgente ante la invasión de Estados Unidos en Iraq en el 2003. Insignificantemente, sus esfuerzos no fueron reconocidos a nivel mundial, hasta que estalló la Guerra Civil Siria, en donde hicieron progresos mediante tácticas militares innovadoras, así conquistando gran parte de Iraq y Siria, y así proclamando un estado no reconocido que se extiende desde ciudades como Aleppo (Ciudad siria), Mossul (Segunda ciudad impontante en Irak), y Raqqa (ciudad siria y capital del Estado Islámico). Su presencia ha acrecentando la crueldad en la guerra, disponiendo así de un aparato del terror que asesina personas inocentes de forma despiadada (como el caso de la decapitación del periodista estadounidense James Foley), y que posee una estructura organizada, otorgándole el poder del autofinanciamiento por petróleo, extorsión, tráfico de órganos y venta de antigüedades.

Pero ¿Qué quiere ISIS? Desde su creación, su líder Abu Bakr Al Baghdadi sentó las bases y objetivos del Estado Islámico, pues este grupo intenta crear un estado islámico, y hecho esto, han sido los primeros en lograrlo. Han creado un califato en donde las leyes islámicas funcionan como aparato motriz de la vida cotidiana de más de 10 millones de personas. Como muchos grupos terroristas, el EI quiere destruir a lo que ellos consideran como el “Gran Satán”, Estados Unidos de América. EUA ha llevado lejos su lucha contra grupos yihadistas, tendiendo en cuenta que este país financió grupos islamistas (muyahidines, o conocidos como Soldados de Dios que pelearon contra la URSS en la Invasión a Afganistán), y estos se han puesto en su contra paulatinamente. La idea de una destrucción masiva de Estados Unidos y sus aliados por parte de grupos yihadistas se considera un paso más para ganar terreno ante la supuesta amenaza del socavamiento del Islam, ya que muchos musulmanes radicales piensan que las costumbres occidentales son decadentes y envenenan a una sociedad recta y ortodoxa a sus tradiciones religiosas y culturales. Sin embargo, lo que quiere ISIS es el mundo, y es un grupo que debe tomarse cmulticulturalidad., pues sus intenciones han sido claras mediante el uso de su propaganda. Es por eso que, siendo una maquina de guerra, también son una maquina mediática que ha captado sustancialmente a aquellos que piensan que ISIS tiene objetivos claros y verdaderos, y esto puede verse en el reclutamiento de legiones extranjeras que engrosan más sus filas y que le da cierto aire de multiculturalidad. Esto y ante todo lo demás, ISIS quiere mostrarse ante el mundo como un desafío al que simplemente hay que temer.

Ante el temor, Estados Unidos ha formado una coalición internacional con el objetivo de bombardear al Estado Islámico. Esto es sin medida alguna, la única forma de “mediar” con los terroristas, pues Estados Unidos no tiene intereses en negociar con asesinos, ni menos la misma comunidad internacional. Si hay alguien que ha querido negociar la salida del conflicto, este ha sido Bashar Al Asad (Presidente de Siria), ya que su permanencia en el poder sólo agrava la situación, y de ser sustituido, Siria tendría elecciones libres para acordar un alto al fuego con su contraparte opositora, el Ejército Libre Sirio. Aun lejos de llegar a un acuerdo paralelo, la discordia entre los dos bandos puede paliarse si el Estado Islámico es destruido de raiz, es decir ¿Quien negocia con terroristas? Rusia ha intensificado sus acciones militares contra el Estado Islámico desde que terroristas colocaron una bomba casera en un avión comercial, matando a casi 200 personas y siniestrando en la árida península de Sinai. Turquía ha abierto otra brecha en la lucha contra el EI después de los atentados en Ankara, al igual que Francia, después de los atentados en París en donde murieron unas 129 personas ante el clamor del partido de fútbol Francia vs. Alemania y el estruendo de las guitarras de Eagles of Death Metal. Mirando así, la desaprobación universal de tratar con terroristas no es una traba para acabar con la guerra, pues las potencias occidentales saben que la única forma de detenerlos es mediante el uso de la fuerza.

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