Jose Clemente Orozco

José Clemente Orozco (Zapotlán (hoy Ciudad Guzmán), Jalisco, 23 de noviembre de 1883 - Ciudad de México, 7 de septiembre de 1949) fui un muralista y litógrafo mexicano. Graduado en la Escuela Nacional de Agricultura, estudie más tarde matemáticas y dibujo arquitectónico.

Aun siendo un niño, conocí a José Guadalupe Posada, cuyos grabados me llevaron a interesarme por la pintura. Estuve casado con Margarita Valladares con quien tuve 3 hijos. Mis primeros trabajos consistieron en litografías de la vida indígena; interesado en la pintura mural, logre posteriormente un perfecto dominio de su técnica.

Hice mi primera exposición individual en la librería Biblos de Ciudad de México en 1916. Al año siguiente viaje por los Estados Unidos y viví en San Francisco y en Nueva York pintando carteles; pinte también murales para el Colegio Pomona de California, para el Dartmouth College y la New School for Social Research de Nueva York; en la decoración de esta última, realice un verdadero fresco, pues pinte sobre yeso húmedo; fue la primera de este tipo que se hizo en Nueva York.

En el año 1922 me uní a Diego Rivera y a David Alfaro Siqueiros en el sindicato de pintores y escultores, intentando recuperar el arte de la pintura mural bajo el patrocinio del gobierno. En 1926 por encargo de la Secretaria de Educación, pinte en la ciudad de Orizaba, el mural Reconstrucción en el edificio que actualmente ocupa el Palacio Municipal.

Mi segunda etapa mural se inicia a partir de mi estancia en los Estados Unidos, en 1927. Allí realice tres obras murales importantes. En Nueva York, ciudad que visitaba por segunda vez, me dedique a trabajar y exhibir mis obras. Realice dibujos sobre escenas de la Revolución y una serie de óleos.

Mi obra se enmarca en el grupo de pintores y muralistas mexicanos, junto a Diego Rivera y David Alfaro Siqueiros. Estos muralistas expresionistas mexicanos anticiparon las tendencias neo representativas o neo icónicas que se dieron hacia 1960.

A diferencia de Rivera y Siqueiros, yo retrato la condición humana de forma apolítica; se interesa por valores universales y no insiste tanto en valores nacionales, de ahí que mis imágenes más características comuniquen la capacidad del hombre de controlar su destino y su libertad ante los efectos determinantes de la historia, la religión y la tecnología.

El afán de lograr en mis cuadros recios efectos emotivos di a mis obras simplicidad de línea y color y prestóles audacia en la interpretación de motivos contemporáneos y valores sociales.

Mi estilo está fundado en un realismo de carácter expresionista, conscientemente ligado a las viejas tradiciones artísticas mexicanas, de violento dinamismo y amplísima factura.

“Orozco fue un pintor comprometido con las causas sociales, en las que plasmó un realismo ferozmente impresionante. Él plasmó también la penosa situación del africano.

...