Para empezar, Nelson Mandela fue un activista, abogado y político sudafricano del siglo XX y XXI conocido principalmente por: Un largo camino hacia la libertad

Nelson Mandela: Un largo camino hacia la libertad

Para empezar, Nelson Mandela fue un activista, abogado y político sudafricano del siglo XX y XXI conocido principalmente por:

• Luchar pacíficamente contra la segregación racial en Sudáfrica.
• Instaurar un modelo político democrático en Sudáfrica.
• Ser el presidente de la República de Sudáfrica entre 1994 y 1999.

El libro empiezo con el explicando de donde viene, originario del pueblo xhosa y parte de la casa real Tembu. Nació el 18 de julio de 1918 en el pueblo de Mvezo, ubicado a 53 km al suroeste de Umtata, en ese tiempo parte de la Provincia del Cabo. Creció de una forma sencilla, según sus propias palabras “por las costumbres, el ritual y el tabú”.  Fue bautizado con el nombre de Rolihlahla, palabra de origen xhosa que significa “halar la rama de un árbol” que podría ser interpretado como alborotador. Él era hijo único de su madre, la madre de Nelson era Nosekeni Fanny. Aunque analfabetos, sus padres eran devotos cristianos y por eso su madre le envió a una escuela metodista cuando tenía siete años de edad. Nadie en su familia había ido a la escuela, el sí. Su nombre era  Rolihlahla pero le dicen Nelson porque el primer día de clases su maestra le dio ese nombre, ya que era una costumbre entre los africanos en aquellos dias y era porque la educación era de influencia británica. Él no tenía idea de porque escogió ese nombre, ya que ese día su maestra solo le dijo que su nuevo nombre era Nelson. A los 16 años Nelson viajó a Tyhalarha para someterse al ritual de la circuncisión que marcaba la transición de niño a hombre.  Su objetivo al estar estudiando al principio era convertirse en consejero privado de la casa real Tembu.

Ya más adelante empieza a contar sobre su educación, estudió derecho en la Universidad de Fort Hare. Allí, por primera vez, el usaría cepillo y pasta de dientes, en lugar de ceniza para blanquearse los dientes y palillos para limpiarlos. Fue expulsado de Fort Hare por liderar un boicot, y llegaría a ser parte de un comité estudiantil, gran logro porque era la primera vez que un alumno de primer año era parte del comité. Nunca más volvió a Fort Hare.

 Se enteró de que le habían arreglado un matrimonio, pero él había tenido varios líos amorosos, y como era un romántico, él no iba a dejar que nadie eligiera a su esposa. Entonces al darse cuenta del matrimonio arreglado, el huyo a Johannesburgo. Allá cuando tenía 23 años consiguió trabajo en un estudio jurídico. Poco después se unió al Congreso Nacional Africano (CNA), una organización que hacía campañas pacíficas contra la discriminación y excesiva explotación que sufrían los negros sudafricanos.

Fue involucrándose con la causa política del CNA y llegó a liderar la corriente renovadora, que buscaba crear una Liga de la Juventud para darle un nuevo impulso al movimiento. Durante el primer día, más de 250 voluntarios en distintas partes del país se hicieron encarcelar por violar leyes injustas, como las que prohibían que los negros entraran a la estación de trenes por una puerta reservada para los blancos o que estuvieran presentes en determinadas áreas. A lo largo de los cinco meses siguientes, participaron ocho mil quinientas personas.

Con estos impulsos como motivación, decidió abrir su propio bufete y, rápidamente, se asoció con su amigo Oliver Tambo para crear el único bufete de abogados africanos de todo el país. Desde un principio se vieron inundados de clientes. Los africanos necesitaban desesperadamente ayuda legal, porque casi todo lo que hacían o dejaban de hacer podía constituir un delito ante las leyes del Estado. Para miles de personas,  podían acudir a ese bufete en busca de una actitud comprensiva y un aliado competente: un lugar donde no serían engañados y donde podrían sentirse seguros al ser representados por gente de su mismo color.

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