ANIMALES EXTINTOS
Enviado por cecyrojas • 22 de Abril de 2013 • 2.219 Palabras (9 Páginas) • 705 Visitas
ANIMALES EXTINTOS
Los animales se extinguen de cien a mil veces más rápido de lo normal. Para que te des una idea de la gravedad del problema: el 23% de las especies de mamíferos está bajo amenaza y en apenas 20 años se han extinguido 27 especies.
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• Veintisiete especies se han declarado oficialmente extinguidas en los últimos veinte años. Esto es un ritmo de pérdida de biodiversidad de cien a mil veces mayor que el que ocasionaría el proceso natural de extinción de animales y plantas. Hace poco te mostrábamos el TOP TEN de animales extintos hace millones de años, todos por causas “naturales”. La lista de hoy está compuesta mayormente por especies que, directa o indirectamente, se han extinguido como resultado de la actividad humana.
Delfin de Rio Chino (Lipotes vexillifer)
Una de las especies extintas más recientemente. Esta variedad de delfines emigró desde el Océano Pacifico al río Yangtze hace unos 20 millones de años. En épocas de la dinastía Han "Erya" había unos 5000 especímenes en el rio.
En 1979 China lo declaró en peligro, y en 1983 se decreto que su caza era ilegal. Para 1986 la población total se estimaba es unos 300 individuos, y en 1990 unos 200. Su número siguió decreciendo rápidamente, sobre todo con la construcción de la Represa de las tres Gargantas, que alteró de manera irrecuperable el hábitat de este delfín. En 1998 solo se pudieron encontrar 7 ejemplares, y los científicos especularon con poder salvarlos moviéndolos a un lago cercano para luego llevarlos nuevamente al río cuando sus chances de sobrevivencia fuesen mayores. Pero una expedición que recorrió el rio de extremo a extremo en 2006 no pudo hallar ni uno de estos delfines, por lo que se los considera oficialmente extintos.
La Fundación de Conservación de Wuhan “Delfín Baiji”, fundada en diciembre de 1996 gastó alrededor de u$s 100.000 para la preservación de células in vitro, por lo que quizás algún día lo podamos ver nuevamente.
• Una de las especies extintas más recientemente.
• La Represa de las tres Gargantas alteró el hábitat del delfín.
Tigre de Tasmania (Thylacinus cynocephalus)
Este mámifero, también conocido como lobo de Tasmania, talacino, lobo marsupial o Tigre de Tasmania era un carnívoro marsupial nativo de Australia. El último ejemplar que se capturó vivo fue vendido al Hobart Zoo de Tasmania en 1933 murió en 1936. Recién entonces el Gobierno de Tasmania lo declaró “especie protegida”, pero ya era demasiado tarde.
El tilacino tenía un gran parecido con los cánidos de otros continentes, a pesar de no estar emparentado con ellos. Al igual que los canidos, era un carnívoro adaptado a la captura de presas de tamaño pequeño o mediano. Tenía un cuerpo estilizado, patas finas y cola delgada. Su pelaje era corto con rayas negras o marrones en la parte trasera, de ahí el nombre de "tigre". Las mandíbulas podían abrirse hasta extremos asombrosos, casi como las de un reptil, y estaba dotada de 46 dientes.
Antes de la llegada de los colonos ingleses y los dingos, el tilacino no tenía competencia, pero no pudo hacer frente al nuevo competidor. Los ataques a los rebaños de ovejas hizo que los pastores y el propio gobierno colonial los considerarlos alimañas necesarias de exterminio. Y lo lograron antes de la primera mitad del siglo XX.
• Su boca podía abrirse hasta extremos asombrosos.
• Los colonos ingleses lo consideraron "alimaña necesaria de exterminio"
Quagga (Equus quagga quagga)
Esta especie de cebra se extinguió completamente en Sudáfrica aproximadamente en 1870. Tenía un pelaje pardo rojizo (sin rayas) en el lomo y cuartos traseros, y de rayas negras en cara, cuello, costados y crines, como tienen las demás cebras. El vientre y las patas eran enteramente blancos. Semejante pelaje hizo que en 1788 se lo clasificara como una raza aparte.
Los quaggas vivían en manadas en el sureste de Sudáfrica. Su nombre procede de la lengua de los Khoi y es una básicamente una adaptación del ruido característico emitido por el animal.
Los quaggas fueron cazados por los primeros colonos holandeses, para aprovechar su carne y piel. A mediados del siglo XIX se mataron miles de ejemplares como parte de un plan de exterminio de animales salvajes. Esta política tenía como objetivo aprovechar las tierras donde pastaban los quaggas para alimentar ganado doméstico. La población de estos animales descendió rápidamente, y el 12 de agosto de 1883 murió el último quagga que vivía en cautividad en el zoo de Ámsterdam, extinguiéndose definitivamente la subespecie.
Su ADN, estudiado en el Smithsonian probó que quagga era una subespecie de la cebra de planicie, que se definió como raza entre 120 y 290 mil años atrás. Hoy solo queda una fotografía de este animal, tomada en 1870 en el zoo de Londres.
Fueron cazados para aprovechar su carne y piel.
Oso del Atlas (Ursus arctos crowtheri)
El oso del fue una subespecie de oso pardo. Habitaba en la cordillera del Atlas, desde Túnez a Marruecos. Se trata del único oso que habito África en épocas recientes, adonde llegó desde Oriente en el Pleistoceno.
Tenía un tamaño mucho menor que otros osos pardos y un morro más chato. Su pelaje era oscuro, prácticamente negro, en el dorso y rojizo en las patas y los costados. Algunos textos romanos lo mencionan como “abundantes” en la cordillera del Atlas, una región que en esa época estaba cubierta por bosques de pinos. Incluso puede verse representado en mosaicos romanos de esa época, y posiblemente haya sido usado en los espectáculos del circo romano.
La caza y la destrucción de su hábitat natural prácticamente lo habían exterminado para cuando se estudió científicamente por primera vez. Hacia 1830, el rey de Marruecos tenía un ejemplar en cautividad, y el último informe de un avisaje de uno de estos osos fue en 1867, cerca de Edough, en la frontera entre Marruecos y Argelia.
León del Cabo (Panthera leo melanochaitus)
Este león de 250 kilos de peso era la más grande de las que en territorio sudafricano. Vivía en la zona de las llanuras herbáceas del Karoo, al suroeste de Sudáfrica. A menudo se culpa de su extinción a los colonizadores holandeses (los “bóers”), pero se sabe que los verdaderos responsables de su exterminio fueron los ingleses. A principios del siglo XIX comenzaron a cazarlo indiscriminadamente, en parte por deporte y en parte como represalia a sus ataques al ganado. Después de muchos esfuerzos y bala, lograron exterminarlo
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