Administración De La Capacidad A Largo Plazo

Administración de la Capacidad a largo plazo

La capacidad puede ser definida de varias formas, según Collier y Evans (2009) la capacidad es la suficiencia de un recurso de manufactura o de un servicio, como una instalación, un proceso, una estación de trabajo o una pieza de equipo, para lograr su propósito durante un periodo determinado y puede ser considerada como el índice máximo de producción por unidad de tiempo o como unidades de la disponibilidad del recurso. Para Muñoz (2009) la capacidad de un sistema de producción es la máxima tasa de flujo (producción) que puede experimentar el sistema bajo sus condiciones de operación. Krajewski, Ritzman y Malhotra (2013) indica que la capacidad es la tasa máxima de salida de un proceso o sistema. Como se puede ver existen diversas definiciones para la capacidad pero de todas estas se puede inferir una idea en común, capacidad como tasa máxima de salida de un proceso.

Establecer la capacidad de un proceso o sistema es muy importante ya que esta influye sobre todas las áreas de la empresa, (a) marketing, proporciona pronósticos de la demanda, necesarios para identificar las brechas de capacidad; (b) contabilidad, prepara la información sobre costos de contabilidad que se requiere para evaluar las decisiones referentes a la expansión de la capacidad; (c) finanzas, realiza el análisis financiero de las inversiones propuestas para la expansión de la capacidad y recauda fondos para patrocinar dicha expansión; (d) recursos humanos, debe contratar y capacitar empleados que sustenten los planes referentes a capacidad; (e) sistemas de información para la administración, que diseña las bases de datos que se usan para determinar las normas de trabajo que ayudan en el cálculo de brechas en materia de capacidad; (f) operaciones, debe seleccionar las estrategias de capacidad que provean los niveles de capacidad adecuados para atender con mayor eficiencia la demanda futura y (g) compras, se encarga de obtener la capacidad exterior necesaria, procedente de fuentes externas (Krajewski & Ritzman, 2000).

En la mayoría de los casos la incertidumbre está presente al momento de realizar pronósticos sobre la demanda de diversos productos, lo cual influye directamente al momento de tomar una decisión sobre la capacidad que debe tener nuestra empresa o una expansión de la misma. Collier y Evans (2009) señalan que la capacidad a largo plazo debe estar estrechamente vinculada con la dirección estratégica de la organización, con los bienes y servicios que ofrece. Además indican que muchos productos y servicios son de temperada por lo que es muy importante considerar bienes y servicios complementarios, con patrones de demanda distintos a los anteriores, que puedan ser producidos utilizando los mismos recursos de la empresa para evitar tener capacidad no utilizada fuera de temporada.

No hay que dejar de lado que un aumento en la capacidad a largo plazo implica una inversión en instalaciones y equipos, variara dependiendo de la magnitud de la empresa, que es irreversible por lo cual debe ser aprobada por la gerencia. Adicionalmente hay que considerar que el tiempo necesario para un aumento de capacidad es de varios años, desde el diseño hasta la puesta en marcha.

La correcta planeación de la capacidad a largo plazo es fundamental para el éxito de una organización, demasiada capacidad generaría capacidad ociosa y ello implicaría un alto costo financiero para la organización ya que las instalaciones no utilizadas se deterioran, requiere mantenimiento y podrían quedar obsoletas antes de generar algún beneficio a la empresa (http://www.gerencie.com). Sin embargo tiene como punto a favor que la empresa responda rápidamente ante un aumento en la demanda. En el caso contrario, una capacidad insuficiente genera perdida de oportunidad debido a las ventas no realizadas, las cuales son difíciles de cuantificar, y en la mayor parte de los casos también se genera una disminución en la participación en el mercado (Collier & Evans, 2009) por que el consumidor al no encontrar nuestro producto optara por escoger uno de la competencia.

A partir de estos pro y contras del aumento de capacidad, nace la duda sobre dos aspectos, cuanto y cuando debe aumentar la capacidad una organización? Hay dos puntos importantes que se deben tener en consideración al momento de determinar la capacidad, el primero son los pronósticos de demanda y el segundo la economía de escala.

Para la determinación del pronóstico de la demanda se puede utilizar uno o más de los métodos que nos menciona Anderson, Sweeney, y Williams (2011), por ejemplo series de tiempo, métodos de suavización, proyección de tendencia, análisis de regresión, juicio experto, entre otros. Mientras más cercana sea la demanda real a nuestro pronóstico la eficiencia de la organización será mayor.

En el caso de la economía de escala, Krajewski y Ritzman (2000)

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