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EVALUACION MEDICO LEGAL DE LA ALCOHOLEMIA

Es de suma importancia tener bien claro la terminología a utilizarse y de esta manera aplicar un reglamento que este basado en principios y con lenguaje científico correcto.

La valoración puede hacerse a partir de dos tipos de datos: los clínicos (embriaguez) y los bioquímicos (alcoholemia).

Embriaguez: Estado clínico que se expresa con variantes de la conducta, dicha variable esta relacionada con el consumo en este caso de Alcohol (etanol), aunque existe una correlación entre niveles de alcohol en sangre o alcoholemia y los síntomas clínicos, a la hora de tener una expresión en forma de conducta puede admitir grandes variables o sea que no todos nos comportamos de la misma manera con igual alcoholemia.

Antes de hablar de la alcohol en una matriz biológica es importante saber la medición o nivel de alcohol al que nos referiremos, es vital utilizar unidades de medición universalmente aceptadas, la alcoholemia siempre se medirá en unidades que reflejan el peso del etanol contra un volumen especifico de la matriz biológica (sangre), alcohonuria (orina), etanol alveolar (aire espirado), etc.. De esta manera tenemos las siguientes concentraciones:

Gramos / litro: g/L

miligramos / decilitros: mg/dl

miligramos / en 100 mililitros: mg./100ml = mg%

En toxicología forense se utiliza: mg/dl lo que es igual a miligramos de alcohol en un decilitro de sangre o ALCOHOLEMIA

O sea que 100 mg/dl = 100 mg./100ml = 100 mg% = 1 g/L

En la conducción de vehículos automotores bajo el efecto del etanol se han valorado distintos factores:

Tiempo de reacción

Vigilancia y atención mantenida

Atención dividida

Tiempo de proceso de información

Función visual

Percepción

Destreza psicomotora

Tras valorar estos elementos bajo distintas concentraciones de alcohol en sangre se ha llegado a concluir que la atención dividida se altera con niveles de 20 mg/dl, la modificación de la percepción y alteraciones en la concentración a niveles de 50 mg/dl. En general, los estudios realizados en este campo llegan a la conclusión de que la mayor parte de los componentes psicofísicos que forman parte del acto de la conducción de vehículos sufren considerable alteración a partir de 80 mg/dl.

El incremento del riesgo a padecer accidentes de tráfico en relación con los niveles de alcoholemia fue estudiado con precisión por Jones en 1988 y posteriormente validadas por otros autores e instituciones públicas (U.S. Department of Transportation, Washington, DC) llegando globalmente a conclusiones similares. Con una alcoholemia de 80 mg/dl se multiplica por 4 la posibilidad de causar un accidente de tráfico, con 125 mg/dl es 25 veces tal posibilidad, siempre en relación con un sujeto normal sin alcohol.. es importante destacar que para una misma alcoholemia, el sujeto acostumbrado tiene menor probabilidad de accidente que uno no acostumbrado.

A continuación se presentan dos gráficos

En el gráfico 1 se compara el CAS

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