Biología General Micrófilas

2.Biología General

Todas las plantas vasculares inferiores que viven hoy día, son herbáceas y de pequeño tamaño. Han dominado la vegetación terrestre hace más de 300 millones de años. Hubo periodos en que llegaron a tener varios metros de altura. Estas formas arborescentes se han extinguido con los cambios de clima por un lado y la evolución de plantas con semillas que resultaron mejor adaptadas a la vida en la tierra. Los depósitos de carbono que se extraen en varios lugares del mundo, han sido formados por estos especímenes.

Se encuentran distribuidas en casi todos los continentes. Sin contar los helechos, se calcula que hay aproximadamente  unas 1300 especies, algunas de ellas tienen distribución cosmopolita, otras son exclusivamente tropicales.

En estas plantas hay alternancia de dos generaciones y que la generación esporofítica  es dominante y conspiscua. Esta generación sólo depende del gametófito en sus fases iniciales. Así que, en la madurez ambas generaciones son independiente entre sí.

Los gametófitos en estas plantas son llamados también protalos, Son muy reducidos al punto que, no es fácil su observación en la naturaleza. Esto es particularmente difícil en especies cuyos gametófitos se desarrollan debajo de la superficie del suelo. En todas las plantas vasculares inferiores los gametófitos son talosos, estos dependen del agua para la fertilización del gameto femenino por un anterozoide flagelado.  En plantas más desarrolladas se observa diferenciación sexual entre gametófitos.

Los esporofitos alcanzan tamaños visibles y están diferenciados por sus hojas y raíces. En los cortes de sus órganos se pueden apreciar diversos tejidos pero sobre todo, ya tienen tejidos vasculares más desarrollados (xilema y floema).

Entre las plantas vasculares inferiores se distinguen plantas homospóricas y heterospóricas. En las homospóricas, todas las esporas son morfológicamente y genéticamente iguales. Cada espora germinará produciendo un gametofito bisexual.

En las Heterospóricas hay dos tipos de esporas: micrósporas y megásporas según su tamaño. Las micrósporas son producidas en gran número y son mucho más pequeñas que las megásporas, cada una de ellas germinará produciendo el gametofito masculino. Las megásporas son producidas en número reducido y dan como resultado el gametofito femenino, cada esporangio origina sólo cuatro de ellas. De modo que estas plantas los gametofitos son unisexuales.

En estas especies la separación sexual de los gametofitos aumenta la probabilidad de fecundación cruzada, lo que garantiza aumento de variabilidad genética entre las plantas descendientes. También esto podría aumentar las posibilidades de adaptación a nuevos ambientes así como mayor desarrollo de especies.

Micrófilas:

Este concepto se refiere al tipo evolutivo de las hojas que tienen las plantas vasculares inferiores. Las hojas de estas plantas son muy sencillas anatómicamente y morfológicamente. Básicamente son hojas muy pequeñas, usualmente son densamente dispuestas sobre los tallos y son sésiles. Esto quiere decir que no están unidas al tallo mediante ninguna estructura peciolada como en muchas plantas con flores. Estas hojas además, presentan una nervadura media que corresponde al único cordón de tejidos vasculares que la recorre a lo largo. Este tejido vascular está unido al tejido vascular del tallo directamente sin que por encima de esta unión, exista la llamada laguna foliar.

Desde el punto de vista evolutivo estas hojas son más primitivas y se han originado a partir del tallo a modo de cortas extensiones.

Lycopodophyta:

A esta división pertenecen 5 géneros y cerca de 1200 especies.

Las licofitinas es un grupo de pteridófitos que han tenido su máximo esplendor durante el Carbonífero, pero que en la actualidad quedan un menor número de especies vivientes.

Entre sus características tienen un tallo variable según la especie, y poseen una ramificación (del tallo y raices) que puede ser dicotómica o monopódica. En los grupos actuales las hojas son microfilas y su disposición es variable; verticiliadas, opuestas o helicoidales. Hay especies isospóricas o heterospóricas, y los gametofitos son también monoicos o dioicos.

En este grupo encontramos dos clases:

La Clase Lycopodiopsida, comprende a los helechos isospóreos, cuenta con un único orden, los Lycopodiales.

La Clase Isoetopsida, comprende a los heterospóreos, y tiene dos órdenes, los Selaginellales y los Isoetales.

Selaginellales:

       Orden selaginellales: Se incluyen unas 800 especies vivientes, cosmopolitas, que se reúnen en un género, Selaginella; algunos autores lo desmembran en tres. También son conocidos cierto número de fósiles, como el género Selaginellites, desde el carbónico. Las especies vivientes son todas micrófilas, heterospóreas, liguladas, con tallos herbáceos, y tienen cierta tendencia a formar óvulos, es decir, a que quede la macrospora fija en el esporofito una vez germinada y que esté más o menos protegida por el esporangio. Ciertos autores incluyen dentro de este orden algunos fósiles como los Lepidocarpon del carbonífero, precisamente por mostrar la tendencia a formar óvulos. La estructura del esporofito del género Selaginella es también bastante evolucionada. Los macro y microsporangios se forman en la parte superior o terminal del tallo, y están protegidos por esporófilos más o menos densamente agrupados, que tienen tendencia a formar conos, y habitualmente de aspecto similar el de los trofófilos (hojas asimiladoras del alimento). Los esporangios nacen del eje del tallo o inflorescencia; los femeninos contienen pocas macrosporas, gruesas y tetraédricas, mientras que los masculinos muestran numerosas macrosporas. En España viven dos especies: S. denticulata, en la zona mediterránea templada, y S. selaginoides, en los prados higroturbosos eutróficos (ricos en materia nutritiva) de las altas montañas centrales y septentrionales.

Distribución y diversidad:

Las Selaginellas son heterospóricas y son más diversas en número de especies que los licopodios. Estas casi duplican, en cuanto a la cantidad de especies. Se calcula que en todo el mundo, hay alrededor de 700 especies.

Entre ellas, más de un centenar corresponde a especies que crecen solamente en el continente americano. La mayoría de las especies, tiene una gran distribución tropical porque prefieren climas tanto húmedos como cálidos. No obstante de esta preferencia, algunas pocas especies crecen en zonas desérticas y subárticas.

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