COLOMBIA UN PROYECTO INCONCLUSO
Enviado por soyyo2014 • 6 de Mayo de 2014 • 2.502 Palabras (11 Páginas) • 240 Visitas
COLOMBIA UN PROYECTO
INCONCLUSO
Colombia un país por construir
Colombia un Proyecto Inconcluso: valores, instituciones y capital
social
, de María Mercedes Cuéllar, Bogotá, Universidad
Externado de Colombia, 2000.
Fernando Gaitán Daza
*
En su libro Colombia:
un proyecto inconcluso
, María Mercedes
Cuéllar afirma que la pobreza o riqueza de una nación se explica
por el tipo de instituciones que reflejan los valores de la sociedad, la
disponibilidad de capital social y la firmeza del Estado para disminuir
los costos de transacción y defender los derechos de propiedad.
Lo importante, decía Aristóteles, es hacerse las preguntas correctas.
Y aquí, desde la primera frase de su libro, María Mercedes Cuéllar
nos muestra que su objetivo es hacerse las preguntas correctas: “¿Por
qué Colombia es un país pobre?” A la que habría que agregar el otro
cuestionamiento esencial de la economía política: ¿por qué hay pobres
y ricos?
Las respuestas que brinda la economía de la corriente principal a
estas dos preguntas son risibles. Al interrogante de la existencia de
pobres y ricos nos responden que en algún punto del tiempo pasado
Juan trabajaba y trabajaba y ahorraba y ahorraba, y Pedro entre tanto
era vago y vago. Y así se creó una casta de ricos felices y ahorrativos y
otra de vagos mentirosos y pobres.
Y a la pregunta de por qué hay países pobres y ricos contestan con
una serie de fórmulas, un conjunto nunca cerrado de indicadores,
algo sobre la transferencia de tecnología, algún comentario
tendencioso en torno a la calidad de las personas de uno y otro país.
Y antes que uno alcance a preguntar qué están diciendo, comienzan a
borrar del tablero las ecuaciones y farfullan que tienen una cita urgente.
*
Profesor de la Universidad Externado de Colombia.
Fernando Gaitán Daza
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En realidad, preguntarse sobre la riqueza relativa de las naciones y
la existencia de pobres y ricos es hoy un tema menor para la economía
de la corriente principal. Pero no lo es, como recalca María Mercedes
Cuéllar, para la economía política, que es en realidad la única economía
que existe, donde el Estado no es una variable más, muchas veces
exógena al modelo, y donde las actitudes, valores y el ordenamiento
político son parte intrínseca de la reflexión.
El estudio de María Mercedes Cuéllar se basa en una encuesta
nacional realizada a 3.000 personas mayores de 18 años, realizada en
junio de 1997. La encuesta incluye una submuestra representativa y
estratificada de la sociedad colombiana de 2.250 personas y
submuestras adicionales de 250 personas en tres sectores especiales.
La submuestra principal cubrió 500 entrevistados en ciudades grandes,
500 en ciudades intermedias, 500 en ciudades pequeñas, 500 en áreas
rurales y 250 en áreas de violencia.
Los temas que cubrió la encuesta, en 313 preguntas, fueron
interacción social y estado personal, familia, mujer y educación,
participación cívica, trabajo, empleo, inseguridad, violencia,
corrupción, eficiencia de la justicia y papel de la política.
La encuesta tiene como base la metodología de la World Values
Survey, aplicada en 61 países. Los resultados de estos estudios
permiten predecir cambios culturales, diferencias entre hombres y
mujeres y diferencias intergeneracionales.
El objetivo principal del estudio es
obtener elementos de juicio que contribuyan al diseño de políticas públicas
sobre la base de la identificación de los valores predominantes en la sociedad
colombiana. Para el efecto se indaga sobre la legitimidad de las instituciones
en los frentes político, social y económico, así como sobre los costos de
transacción, teniendo en mente el marco teórico que sirve de referencia para
el trabajo y que se centra en la relación entre crecimiento económico y las
libertades civiles y políticas de la población.
Es de anotar que este trabajo es el primero que aporta datos para
medir la legitimidad de nuestras instituciones. Infinidad de trabajos
anteriores dan por descontado, casi como una premisa, que el Estado
colombiano es ilegítimo, sin aportar evidencia alguna y sin medir en
qué aspectos es ilegítimo. El estudio que comentamos cierra, como
veremos, muchos caminos para esas ligeras aproximaciones y también
abre otros muy enriquecedores.
El estudio está organizado en tres bloques: “El primero se ocupa
de las instituciones formales, su legitimidad y eficiencia. El segundo
se refiere a las motivaciones individuales en el ámbito familiar, social
y productivo. El tercero evalúa las características de la justicia, la
violencia y el capital social”.
Las conclusiones del estudio son múltiples. Casi podría decirse
que cada pregunta ofrece la posibilidad de reflexiones intensas y
minuciosas. De ahí que las 900 páginas de las que consta el trabajo a
duras penas sean suficientes para someter a la crítica, el análisis y el
contraste cada una de las preguntas.
En lo que se refiere a la legitimidad que se asume como una premisa
del Estado colombiano, el estudio encontró que: “La gran mayoría
desconfía de las instituciones y organizaciones que sirven de soporte
al régimen político. La desconfianza respecto de los partidos políticos
es tan elevada que sólo se equipara con la que se manifiesta tener con
la guerrilla y los paramilitares”. Pero, sorprendentemente: “dentro de
este panorama poco alentador surge como algo destacado la elevada
confianza en el ejército y la policía” y, además: “la opinión favorable
hacia el sistema democrático como tal es aún mayor”.
Estas conclusiones, datos en mano, no permiten generalizar que
el Estado colombiano es ilegítimo aunque algunas de sus instituciones
sí lo sean. De esta manera se reorienta el debate sobre la legitimidad
o ilegitimidad del Estado o sobre la desconfianza en los aparatos
armados legales del país. Igualmente se prefiere al ejército y a la policía
más, mucho más, que a la guerrilla o a los grupos paramilitares. Así
es bueno estar hablando, con los datos en la mano, y no inventando
afirmaciones
...