Calentamiento Global(parte)

Calentamiento Global: El discurso ambientalista del miedo

Autor: Hernán Traverso

Lic. en Comunicación, Opinión Pública y Publicidad - UBA

traversoher@sanpablo.com.ar

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En la nota anterior se explicaron algunas características que conforman el discurso ambientalista actual. Entre las cuestiones más importantes se destacó el uso del miedo [1] como herramienta destinada a generar reacción y cambio en las conductas humanas actuales. Se señaló, además, que el miedo se constituye, en los textos, a partir de hechos reales. Por ejemplo, un científico explica las condiciones necesarias para la formación de un huracán, luego muestra imágenes del Katrina destruyendo una ciudad entera y, finalmente concluye la exposición diciendo que debido a cambios climáticos que se están produciendo en el planeta, esas tormentas podrían aparecer en otras parte del mundo, incluso donde nunca antes hubo huracanes.

Entonces, el discurso ambientalista actual, que utiliza el miedo como recurso para generar una reacción en los destinatarios, se configura de la siguiente manera: 1) explicación científica de un fenómeno climático extremo; 2) comprobación -tomada a través de imágenes reales en el lugar de los hechos- de la fuerza destructiva del fenómeno explicado; 3) advertencia sobre la posible aparición de ese fenómeno –catastrófico- en lugares que hasta el momento no eran aptos para que se desarrollaran.

No obstante, hay que decir que ese temor al cambio climático produce otra transformación en el discurso científico actual, que ahora supone una división en dos tipos de miedo. El primero se presenta como un miedo explícito que se funda mostrando -y explicando- fenómenos que ocurrieron en otras partes del planeta. Como se mencionó anteriormente, el investigador comenta -y muestra imágenes- de inundaciones, sequías, olas de calor, derretimiento de hielos, etc., en otras partes del mundo. El segundo, en cambio, es un miedo que surge del anterior pero, a diferencia del primero, es un temor mental ya que nace a partir de la previsión del futuro que da el ecologista, y de las imágenes de desastres naturales que muestra. El destinatario observa las imágenes y piensa: si eso sucedió en Estados Unidos podría suceder aquí también.

Hasta aquí se describe el modo en que se presenta el miedo en el discurso ecologista actual. Falta ahora definir a quién se dirige esa clase de configuración textual, y qué tipo de miedo –diferente a los anteriores- propone. A simple vista, se puede decir que el “discurso del miedo” va dirigido directamente a una población masiva, a los habitantes del planeta. Son los ciudadanos -comunes y corrientes- los que se preocupan y se angustian cuando ven imágenes de catástrofes naturales que arrasan ciudades enteras. Pero, y sin embargo, los ecologistas no sólo apuntan a que la población mundial tome conciencia de la situación que se avecina, sino que también buscan encontrar una reacción en las instituciones. Los expertos creen que las consecuencias del Calentamiento Global afectarán, no sólo a los habitantes, sino también a los gobiernos y economías de todo el mundo. Es decir, tanto las inundaciones frecuentes como las sequías extremas, las lluvias permanentes como las olas de calor, no sólo serán costosas en términos sociales, también lo

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