Conservación de alimentos.

Desecación; Es un proceso natural a través del cual se pierde el agua contenida en los alimentos, por la acción del calor del sol o del calor del fuego. En algunos casos se añaden a los alimentos sustancias que aceleran el proceso, como la sal, sería el caso de embutidos, pescados, carne seca, etc.

Algunos alimentos que son conservados con este método son los chiles, las hierbas como el epazote, el frijol, el maíz y distintos tipos de semillas.

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Liofilización: se basa en una desecación en donde se produce el paso de sólido a gas sin pasar por la fase líquida, mediante congelación y posterior sublimación del hielo a presión reducida. Es el mejor método para secar compuestos orgánicos o inorgánicos, donde el valor nutricional del alimento apenas se ve afectado. Estos alimentos pueden tener diferentes texturas como: Tiras, cubos, polvos, deshilachados, picados y granulados.

Algunos alimentos liofilizados pueden ser las carnes como pechuga y muslo de pollo, lomo y jamón; frutas como fresas, moras, melones; vegetales o quesos.

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Salado o método de salazón: Se basa en la adición de sal más o menos abundante, de tal forma que la sal capta el agua provocando la deshidratación del alimento, evitando de esta manera el desarrollo de microorganismos. A menudo se suele emplear una mezcla de sal con Nitrato sódico y Nitrito, es muy habitual también acompañar durante las fases finales de sabores tales como el pimentón, canela, semillas de eneldo o mostaza

Existe la posibilidad de salar frutas y vegetales, aunque lo frecuente es aplicar el método en alimentos tales como carnes o pescados.

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