Contabilidad
Enviado por katherine2012 • 28 de Mayo de 2013 • 2.194 Palabras (9 Páginas) • 257 Visitas
I. CONTABILIDAD FINANCIERA
I.1. La contabilidad: Una presentación de información monetaria
La Contabilidad es la parte del sistema de información sobre la situación de la
empresa que a) registra, b) clasifica y c) resume sucesos traducibles a unidades
monetarias (ya ocurridos o que se estima que ocurrirán en el futuro).
Aunque es la única fuente de información en numerosas empresas, hay que
advertir una grave limitación en la aportada por la contabilidad: atiende solo a
acontecimientos expresables en unidades monetarias; y es evidente que éstos
pueden no ser, y de hecho no son, los más importantes de los que ocurren en las
organizaciones. No obstante, la dirección ha de estar pendiente de la información
contable. Es decir, la situación contable de la empresa debe ser una prioridad para
la persona de vértice en la empresa.
La traducción de sucesos a unidades monetarias se realiza aplicando un conjunto
de reglas que suelen denominarse principios contables generalmente aceptados,
que se expondrán más adelante y que van evolucionando en función del entorno de
los negocios. El empleo del adverbio “generalmente” indica que la aplicación de esos
principios no es siempre la más adecuada. En este caso, el contable debe explicar
las razones que ha tenido para abandonar la praxis habitual, que nunca debieran ser
la presentación de unos resultados menos malos de los obtenidos con dicha praxis.
Información contable para la dirección
La información contable debería tener dos características: objetividad y utilidad.
La objetividad se conseguiría si los principios contables utilizados condujeran, al
aplicarlos a una situación dada, a datos idénticos, con independencia de quien los
elaborara y de sus opiniones o deseos personales.
La utilidad se conseguiría si los principios contables empleados condujeran a la
elaboración de estados contables que proporcionen una ayuda eficaz para el trabajo
de la dirección.
A veces, las dos características se contraponen, así cuando los estados contables
se dirigen al exterior (accionistas, bancos, administración fiscal, etc.), es deseable
que estén elaborados con la máxima objetividad, pero pueden resultar poco útiles al
gerente. Por ejemplo, las empresas que cotizan en bolsa presentan los estados
contables del último ejercicio, y al seguir los criterios contables generalmente
admitidos, no se prestan a mucha manipulación (veremos que incluso en este caso
pueden “maquillarse”). En cambio el gerente puede estar más interesado en los
estados previstos para el ejercicio próximo, que estimarán las consecuencias de la
gestión aplicada en él, aunque ningún inversor en bolsa concederá mucho crédito a
lo presentado en unos estados contables previstos. También es probable que el GÚIA DE APOYO AL EMPRENDEDOR
“CONTABILIDAD DE GESTIÓN PARA DIRECTIVOS NO FINANCIEROS” Pag. 6 de 111
gerente esté interesado en otros datos que le ayuden en su trabajo pero sin
relevancia para las personas del exterior.
Una contabilidad destinada a informar al exterior se centra en la explicación del
pasado, debido a su énfasis en la objetividad (obsérvese que su función principal es
la de “rendir cuentas”, es decir, supervisar la gestión del negocio). Por ello, recibe el
nombre de contabilidad histórica o contabilidad financiera.
Para que la contabilidad sea además de un elemento de supervisión del gerente,
una ayuda para su trabajo, necesita lo siguiente (ver “contenido del trabajo de
gobierno de la empresa” en el Curso Básico de Dirección de empresas para
emprendedores):
1. Analizar el presente. Para ello le servirán los estados contables
pasados.
2. Diseñar el futuro, para lo cual ha de definir a que estados contables
quiere que llegue la empresa.
3. Prever las consecuencias que las acciones en que se concreta la
Gestión del Cambio tendrán en los futuros estados contables.
Así, el presupuesto (objetivo) de cobros y pagos del próximo ejercicio es mucho
menos aséptico que el del pasado, pero de mucha mayor utilidad.
Una contabilidad al servicio de la dirección se centra en la estimación del
futuro. Recibe diferentes nombres: Contabilidad de dirección, de gestión, analítica...
Como consecuencia de lo expuesto, la contabilidad financiera admite pocas
excepciones a los principios contables generalmente aceptados (piense el lector en
un inspector fiscal o un accionista como sus destinatarios). La contabilidad de
dirección puede tomarse muchas más libertades con dichos principios, pues al ser
de uso interno, se cumplirán o no en función de su utilidad para la gestión. Los
datos contables (denominados estados contables) sólo son conocidos por los
gestores y no sirven para su supervisión, sino para su autocontrol, como
ayuda en su trabajo.
Contabilidad financiera:
Explicación del pasado. Su objetivo es medir y supervisar resultados
pasados del negocio
Contabilidad de Gestión:
Estimación del futuro. Su objetivo es ayudar en la gestión del negocioGÚIA DE APOYO AL EMPRENDEDOR
“CONTABILIDAD DE GESTIÓN PARA DIRECTIVOS NO FINANCIEROS” Pag. 7 de 111
Principios contables del Plan General de Contabilidad Español
A continuación se muestran algunos de los principios generalmente aceptados
que recoge el PGC.
Principio de prudencia: Únicamente se contabilizarán los beneficios realizados a
la fecha de cierre del ejercicio. Por el contrario, los riesgos previsibles y las pérdidas
eventuales con origen en el ejercicio o en otro anterior, deberán contabilizarse tan
pronto sean conocidas. Por ejemplo, no pueden contabilizarse como ingresos del
ejercicio los que se prevean de la firma de un contrato realizado pero no ejecutado
en el mismo.
Principio de la empresa en funcionamiento: Se considerará que la empresa tiene
prácticamente duración ilimitada. En consecuencia el valor de la misma no se
establecerá como el de liquidación o enajenación.
Principio del precio de adquisición: Los bienes y derechos se contabilizarán por el
precio de adquisición o coste de producción.
Principio del devengo: La imputación de ingresos y gastos se hará
...