Covid- 19: cuando menos estábamos preparados

Covid- 19: cuando menos estábamos preparados

“Los pueblos que no luchan no tienen porvenir”

Himno del departamento de Córdoba.

Con la declaración del Covid-19 como pandemia enfrentamos un asunto de salud pública que está afectando a todos los sectores de la sociedad en todos los lugares del mundo. Los colombianos no somos ajenos a esta problemática que en menos de un mes ha puesto en vilo a todo el territorio nacional a partir de la detección del primer caso en el país.

En estos momentos, las personas pueden entrar en pánico y exigir al Gobierno Nacional que se tomen medidas desesperadas para evitar la propagación del virus; sin embargo, en un país como el nuestro, las medidas por más urgentes que parezcan traerán consecuencias drásticas que afectarán el futuro de los colombianos.

El pánico nunca ha sido un buen consejero, pero la indiferencia tampoco. Muchos consideran que las medidas tomadas hasta el momento han sido insuficientes, que se deben cerrar todas las fronteras y aislar al país; mientras que otros consideran que se debe esperar que no hay que tomar acciones tan innecesarias que perjudicarán al comercio.

Lo cierto es que Colombia tiene un sistema de salud que precario, al que cualquier emergencia sanitaria pondría a temblar y tomando en consideración lo que se ha desatado en el continente europeo, el miedo se multiplica.

¿Cuánto tiempo durará esta crisis?, ¿estamos preparados para enfrentarla?, ¿qué tan devastadoras serán las consecuencias en todos los ámbitos? Muchas son las preguntas y pocas las respuestas. El país se encuentra paralizado, el mundo entero ha sido golpeado, las potencias más grandes caen al suelo y parece no haber salida; la vulnerabilidad del ser humano y su ego en el piso se hacen cada vez más visibles, el hombre recurre a Dios en busca de ayuda.

Dentro de los muchos problemas que ha permitido ver esta crisis, se destaca la precariedad del sistema de salud y la falta de digitalización que existe en Colombia.

Las modalidades de teletrabajo o estudio remoto son ideas maravillosas para permanecer en casa e incrementar la productividad y el autoliderazgo, sin embargo, nos encontramos en una región donde la tecnología es el lujo que solo unos pocos se pueden costear y el analfabetismo tecnológico es más común de lo que cualquiera podría imaginarse.

Hace unos años, cuando surgió el tema de los libros y plataformas digitales como complemento a la educación, fueron muchos los opositores; por supuesto, frente a un cambio siempre va a existir la resistencia, pero este es un debate que aun se mantiene en el país y solo aquellas escuelas privadas que le apostaron al cambio, decidieron darle la oportunidad a la era digital. Para aquellas otras escuelas que decidieron no hacerlo, la crisis solo acaba de comenzar.

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