Desarrollo Embrionario
Enviado por ferninando • 6 de Abril de 2014 • 3.138 Palabras (13 Páginas) • 169 Visitas
FELONÍA HISPANA
Esas victima empero serán vengadas,
y los verdugos serán exterminados.
La vindicta nuestra será igual a la ferocidad.
Simón Bolívar 1813
Francisco Javier Yanes, como referíamos anterior-
mente, concebía la Historia como arma de difusión de ideas
a favor de la Independencia , en contra de los terribles
sucesos generado por los españoles. Siempre verá la Gue-
rra a Muerte proclamada en el Cuartel General de Trujillo,
el 15 de Junio de 1813, como una respuesta obligada ante
los desmanes de los invasores dada por el Libertador en
representación de la gran causa.
Las líneas de este segundo capítulo tienen como
objetivo específico puntualizar la justificación de dicho
conflicto, como derecho legítimo por parte de los patriotas
ante la felonía hispana.
La conducta atroz que Domingo Monteverde ob-
servaba y había permitido a sus subalternos en Baragua,
San Juan de los Morros, Calabozo y, otras partes fue ante-
cedente más inmediato, en 1813 de la Guerra a Muerte,
siguiendo apuntes de Yanes.
Yanes, sostiene que los españoles y canarios furio-
sos enemigos de los patriotas y americanos fueron lo que
motivaron tal decreto. En Abril de año 1813, Antonio Ni-
colás Briceño, en San Cristóbal, dio el germen de la pro-
clama de la Guerra a Muerte, antes de sucumbir en Junio,
frente un Consejo de Guerra comandado por el General
Antonio Tíscar. Pese a las campañas militares y las des-
avenencias entre Castillo y Bolívar, el Libertador para Ju-
nio ocupaba Mérida y reforzaba a Trujillo. A tal respecto,
Yanes asevera:
“En Mérida publicó Bolívar una proclama
manifestando que los verdugos, que se ti-
tulaban nuestros enemigos, habían viola-
do el sagrado dicho de las naciones en
Quito, La Paz, Méjico, Caracas y reciente-
mente, en Popayán sacrificando en las
mazmorras, a nuestros virtuosos hermanos
y degollando a los prisioneros, como aca-
baba de hacerse en Barinas, cuyas atroci-
dades debían vengarse con el exterminio
de sus autores, y que debiendo ser nuestro
odio a esos monstruos tan justo como im-
placable; la guerra que se haría en adelan-
te sería a muerte”.
Así, pone Yanes en la boca de Bolívar la génesis de
la Guerra a Muerte, por las atrocidades que debían ven-
garse con el exterminio de los españoles, los bandidos que
infestaban a Venezuela. El 15 de Junio Bolívar hizo públi-
co en Trujillo el decreto de Guerra a Muerte ratificando lo
dicho en Mérida, contra todos los españoles y canarios que
se encontrasen con las armas en mano, como también con-
tra los que no tomasen parte activa en la libertad.
Yanes, después de remitir el documento de dicha
proclama con un asterisco (nótase que el autor no enume-
ra la cita, sino el documento. En este caso es el N° 11),
arroja un juicio que deja percibir su primera apología, dice:
“Más delante, después que se hayan refe-
ridos los hechos, habrá ocasión más opor-
tuna para hablar de este duro derecho de
la Guerra”
¿Cuáles hechos? ¿Quiénes inician la Guerra a Muer-
te? ¿Cuándo comienza la Guerra a Muerte? ¿“Duro dere-
cho de la Guerra”?
El saqueo de Tíscar en Nutrias y las tropelías ejecu-
tadas por orden de Monteverde en Oriente hablan por sí
solas. El agobio, las presiones, las multas y exacciones que
sufrieron los que con ímpetu lucharon por la libertad, dan
respuesta según Yanes.
La violación del Convenio de Trinidad, Mr.
Williams Monro así lo evidencia
¿Qué decir de la actua-
ción de Zuazola? El teniente “más inhumano que Cerveris”
y discípulo de Antoñanzas, fue destinado por Monteverde,
a reforzar a Cumaná con 300 hombres, contra los patriotas
que se habían situado en Maturín, y desde su salida de
Cumaná empezó a saquear y quemar las casas y graneros
de los habitantes pacíficos.
Yanes, categoriza que los españoles iniciaron la
Guerra a Muerte.
“Es necesario aquí hacer un breve recuer-
do de los hechos atroces de Zuazola, por-
que este monstruo fue el que descarada-
mente comenzó en Oriente la Guerra a
Muerte que Monteverde y Antoñanzas en
San Juan de los Morros y Calabozo habían
practicado en rebozo”.
Zuazola, soldado distinguido del batallón veterano
de Caracas, a pesar de toda su crueldad lo renombraron
“valeroso y buen español”.
Este oficial de Monteverde realizaba promesas a los
patriotas perseguidos y luego violaba las capitulaciones
acordadas. Zuazola después de hacerle befa y escarnio a
los republicanos, cortabas sus orejas, desmembraba al cau-
tivo con el hacha y el machete, otros eran puestos en el
cepo y mutilados ... no escaparon las mujeres y los niños
de furor del bárbaro .
Las mujeres embarazadas decapitadas, el azote, el
saqueo de las casas, el hombre, la tala del campo, etc., fue-
ron según el autor de la
Relación documentada, la verda-
dera “Guerra a
...