Diegoyeremi

Vivimos en un planeta "muy mal utilizado".

La superficie del Globo se reparte en un 71 por cien de mar y un 29 por cien solamente de tierra; a primera vista, pues, tan sólo las tres décimas partes del Globo terráqueo son explotables desde el punto de vista agrícola.

Las tierras efectivamente arables sólo alcanza el 8,5 por 100 de las emergidas. Si a éstas se añaden las tierras de pastoreo y los bosques, se puede elevar la superficie total utilizada al 50 por 100 de las tierras emergidas o al 12 por 100 del total del planeta.

La tierra es inutilizable sin el agua, que constituye la segunda riqueza natural que nos ofrece el planeta. El agua pasa a través de un ciclo que se alimenta principalmente de la evaporación de las aguas oceánicas. Estas producen diariamente unos 1.000 kilómetros cúbicos de vapor, de los cuales 900 retornan al mar y 100 caen sobre tierra firme.

Esta última, por su parte, produce 200 kilómetros cúbicos diarios, por lo que recibe diariamente 300 kilómetros cúbicos de agua en total. Sin embargo, de esta cantidad, 80 kilómetros cúbicos recaen en los ríos y retornan al mar.

En un kilómetro cúbico de agua hay 1.000 millones de metros cúbicos, y de los 300.000 millones de metros cúbicos que recibe diariamente la tierra, a cada habitante le tocan cien.

Pero el agua además de otros menesteres, se utiliza como factor de producción y, desde ese punto de vista, teniendo en cuenta el incremento continuo de las necesidades industriales llega a plantearse el gran problema de escasez de agua.

Otro bien "económico" que nos ofrece la naturaleza y que forma parte del factor de producción llamado genéricamente "tierra", es la energía: el viento, el movimiento del agua, que por mucho que algunos países digan utilizar, ni de lejos , es de lo que se debería aprovechar.

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