EL CONDUCTISMO: John Broadus Watson (1878-1958)

EL CONDUCTISMO: John Broadus Watson (1878-1958)

El conductismo se opone a toda psicología que se refiera a la conciencia. Desestima el concepto de conciencia por inútil e imperfecto; es mero resabio de una supersticiosa creencia medieval en el alma; lo considera como algo decididamente indigno de estudio científico. Su propuesta es que la psicología rompa con el pasado y construya una nueva ciencia.

La existencia de la conciencia es una “manifiesta suposición”; ningún experiemnto científico puede probarla, pues la conciencia no se puede ver, ni tocar, ni exhibir en un tubo de ensayo. Por lo demás, aunque existiese, escapa al estudio científico.

Fundamentalmente propugna la norma positiva y constructiva de extender los modelos y métodos de la psicología animal a la psicología humana; y en 1913 cuando el conductismo es inaugurado oficialmente, la psicología animal había alcanzado un rango que imponía respeto.

Sin embargo, los orígenes de la psicología animal no están exentos de crítica. Se apoyan casi exclusivament en los informes de los primeros darwinianos, quienes, en su afán de mostrar que no hay ruptura entre las especies animales y humana, sin mayor crítica atribuyeron a los animales procesos psíquicos complejos,

Las principales influencias sobre el conductismo son los trabajos de Thorndike (Asociacionismo) y de Pavlov (reflexología).

En 1898, cuando contaba 24 años, Thorndike publicó su clásica monografía Animal intelligence. Este trabajo es importante porque representó el primer estudio sistemático de la inteligencia animal mediante experimentos de laboratorio, y en parte porque condujo a una teoría del aprendizaje que desempeñó un papel muy importante en investigaciones ulteriores. Thorndike interpreta el comportamiento animal no en función de ideas sino en función del establecimiento o la supresión de conexiones neurales entre el estímulo y la respuesta –el fortalecimiento y la fijación d algunos enlaces y el debilitamiento y la eliminación de otros hasta que se forma un esquema de conducta que conviene a la situación. Fortalecimiento y debilitamiento se explican en función de la ley del ejercicio y la ley del efecto. De acuerdo con la ley del ejercicio, cuanto más y con más vigor se ejerita una conexión, cuanto menos tiempo haya transcurrido y cuanto más reciente sea, más efectivamente se fija. De acuerdo con la ley del efecto, existe la tendencia a retener las respuestas que provocan estados de satisfacción y a eliminar las que causan estados molestos. El propósito del asociacionismo consiste en explicar el aprendizaje en forma mecánica. Luego se aplicarán directamente los resultados obtenidos en el campo de la psicología animal a la psicología humana; así la inteligencia humana y el aprendizaje serán entendidos en función de vínculos específicos de conexión entre estímulos y respuestas.

Por otro lado, en los años 1899-1900 se inició en Rusia un estudio objetivo de la actividad nerviosa superior en los laboratorios de Pavlov trabajando sobre perros. Su sistema psicológico se conocerá como “Reflexología”. El mismo propone la existencia de “reflejos absolutos o innatos”, que se caracterizan por ser infracorticales, es decir: involuntarios. Tales reflejos consisten en una reacción estabilizada, fija, hereditaria (innata), propia de todos los individuos de una misma especie, desencadenada automática y estereotipadamente, según un molde bien definido. Lo que Pavlov descubrió fue la forma en que esos mismos reflejos podían condicionarse al asociarse al estímulo original otro estímulo que provocara la misma respuesta o bien la inhibiera. Estos nuevos reflejos tienen un carácter aprendido y son denominados reflejos condicionados, asociativos, adquiridos o conectivos; se producen a nivel de la corteza cerebral y serían respuestas voluntarias.

Volviendo al conductismo, gran parte de su carácter diferencial se lo debe a las conclusiones de la psicología animal. La psicología animal es por fuerza objetiva, ya que el observador permanece por fuera del material estudiado. Lo que fundamentalmente constituye la originalidad del conductismo es su intento de estudiar al animal humano en la misma forma en que se estudia a los otros animales. Esto significa que se debe estudiar al humano como a una especie animal más y que se lo debe ver como a un organismo de reacción y todas sus actividades pueden ser consideradas por quien las explique como una máquina que responde a estímulos.

El conductismo (1) responde a todas las exigencias de la ciencia positivista:

1) Niega toda realidad a la conciencia o, si acepta su existencia, le rehusa todo valor causal en la conducta;

2) Rechaza la introspección (observación y análisis de la conciencia);

3) Niega la existencia de las imágenes mentales, de las ideas;

4) Afirma que la única realidad es material, y que no existe más que la causalidad mecánica;

5) Considera toda conducta humana como la elaboración de un reflejo condicionado, y sobre esta base pretende explicar toda acción humana pura y simplemente como una respuesta del organismo a una estimulación.

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