EL DESEO DE ENSEÑAR Y APRENDER EN LA ESCUELA

INTRODUCCIÓN

El conocimiento se adquiere de las diferentes experiencias y de información que se encuentra a nuestro alrededor, el aprendizaje es algo que nos enseñan, a través de diferentes métodos, de maneras sencillas de aprender, o al menos es así como parece, pero, ¿Quiénes son los que aprenden?

Cada persona conforme pasa el tiempo es autónoma para tomar la decisión de aprender o no, pero cuando apenas se está en una estancia como primaria o secundaria, ¿Quién nos obliga a aprender?, la responsabilidad de adquirir conocimientos queda totalmente en el docente, los padres se deslindan de esa responsabilidad de alguna u otra forma, pero quien estará con los jóvenes a lo largo de su aprendizaje serán distintos docentes, estos caminaran con cada uno de ellos con sus diferentes métodos para aprender.

¿Enseñar a aprender? Es de alguna manera una cuestión que el docente debe tener en cuenta para compartir sus conocimientos de forma que los alumnos adquieran esos conocimientos, pero tomando en cuenta su propia reflexión acerca de su entorno y contexto donde se desarrolla.

El deseo en el hombre es natural en algunas ocasiones, solo falta detonarlo con algo, en esta ocasión el docente tiene la obligación de detonar ese deseo por aprender, sabiendo que este concepto es más complejo de lo que parece, sin complicarlo, es caminar junto a los alumnos conociendo sus pensamientos y ayudarlo a cumplirlos.

EL DESEO DE ENSEÑAR Y APRENDER EN LA ESCUELA

´´No nos podemos contentar con dar de beber a quienes ya tienen sed, También hay que dar sed a quienes no quieren beber´´.

Meirieu (2007: 45)

Menciona Meirieu (2007) “No hay aprendizaje sin deseo; pero el deseo no es espontaneo, este no viene solo, hay que hacerlo nacer” (p.44)

Mencionado lo anterior, me detengo a pensar y a reflexionar acerca de lo que sucede a mi alrededor y me doy cuenta de que hoy en día en nuestro país vivimos con diversas carencias, en especial de aprender, conocer, pero lo que es peor aún carecemos de deseo.

Meirieu menciona que´´ el único responsable de hacer emerger el deseo de aprender es el educador´´ (2007:44), por lo cual, en mi opinión, pienso que en parte no es así, debido a que los únicos que decidimos apasionarnos por alguien o algo, conocer y aprender somos nosotros mismos.

A falta de deseo viene como consecuencia, la falta de interés por la escuela, por querer aprende y conocer, como menciona Meirieu “uno mismo se provoca su propio fracaso.” (2007:41). Y esto ha sido así por mucho tiempo ya que los alumnos al momento de fracasar buscan culpables en especial la familia, la escuela, los docentes, sin antes pensar y darse cuenta que el hecho de triunfar o fracasar depende únicamente de uno mismo.

Hoy en día podemos darnos cuenta de que existe una gran cantidad de niños y niñas con fracaso escolar, pero esto no se ha dado a causa de lo que comúnmente se dice, por culpa del alumno o el profesor. Ya que ´´Para algunos autores el fracaso escolar es un fenómeno educativo tan antiguo como la propia educación menciona´´ (Escudero Muñoz, 2005: 72) y está se manifiesta en el hecho de que un alumno/a o un grupo de alumnos/as no alcanzan el nivel de conocimientos y capacidades exigidos para el logro de determinados objetivos educativos.

En cierta forma justamente en estos casos se debe involucrar la escuela que a falta de atención por parte de la familia ¸esta como menciona (Emilio Tenti, 2001) ´´es la que está en mejores condiciones de actuar cuando la familia está ausente o bien no está equipada para cumplir su tarea socializadora´´. (p: 61)

Meirieu menciona que hoy en día más que simples educadores, se necesitan docentes con un toque de pedagogos, a lo cual menciona:

(Armando Sambrano, 2006)

’’La pedagogía asume el cuidado del otro, está inscrita en el campo de la educación, la pedagogía no se reduce al campo de enseñanza o del aprendizaje, a la construcción de dispositivos, la pedagogía es un espacio y un momento de la educación.

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