ESTADO DE DERECHO Y CULTURA JURÍDICA

Este ensayo tiene como objetivo determinar el claro sentido de la metodología analítica, la consideración axiológica (valoración), el valor social de la norma en la impartición de justicia y la humanización de todo el conjunto jurídico en la consideración valorativa (axiológica) del derecho, tomando como base los trabajos en equipo realizados en la materia de Derecho Filosófico.

INTRODUCCIÓN

Durante el estudio de esta materia y como parte de los trabajos en equipo, se elaboraron diversas tareas que abarcaron los temas Estado de Derecho y Cultura Jurídica, aciertos y debilidades del pensamiento jurídico, y el papel del abogado en el mundo actual. En el desarrollo de los mismos se detallaron los temas comprendidos mediante la investigación en diversas fuentes, encontrando una relación entre ellos a partir de las raíces filosóficas del Derecho y su influencia en lo que hoy se conoce como normas jurídicas vigentes.

En el desarrollo del presente ensayo se pretende dilucidar los cuatro puntos señalados en el objetivo del mismo, por lo que en torno a ellos se basa la integración de los trabajos anteriores.

Esto resulta tan interesante como importante ya que la Filosofía es una de las ciencias más antiguas que encierra las respuestas a muchas de las interrogantes que el hombre se ha planteado a lo largo de su evolución, y aunque surgen diversas corrientes filosóficas, todas ellas se encaminan a un mismo objetivo.

CONSIDERACIONES DEL DERECHO FILOSÓFICO

Se ha definido en primera instancia que la Filosofía del Derecho es una rama de la filosofía que estudia los fundamentos filosóficos que rigen la creación y aplicación del Derecho, siendo toda aproximación al hecho jurídico, el acercamiento a un fenómeno que acompaña a la humanidad desde que ésta apareció, constituyendo tanto la ley y el derecho, una constante histórica que incide de manera general e inminente en las personas y en todo modelo social.

Del mismo modo, se estableció que las corrientes modernas del pensamiento filosófico surgen en el ámbito de la razón, la cual se encuentra dentro de un conjunto racional y orgánico dado que comprende las convicciones y teorías que establecen precisamente el entendimiento de la realidad por medio de la razón y por ello se supone un actuar razonable. De este actuar el Derecho provee de la perspectiva para entender la ciencia jurídica. Por otra parte, el Estado de Derecho se crea cuando el accionar estatal y social se sustenta en la norma jurídica y se aplica a través de los órganos gubernamentales para lograr mantener un clima social de paz y orden. Todo esto da al Estado un sentido formal, ya que la ley es el instrumento para guiar el obrar de los ciudadanos; y un sentido material que es el que complementa a la norma escrita mediante la adopción de otras normas que protegen los derechos fundamentales.

El sentido de la metodología analítica queda manifiesto a partir de que, para poder establecer el análisis que se pretenda es necesario considerar las cuestiones ideológicas que se observan, en este caso, en las distintas corrientes mencionadas; tales cuestiones responden las condiciones reales, concretas del terreno donde se implante. Y en ese terreno se involucra la existencia del estado y sus instituciones, los intereses de clases y sus interpretaciones, valoraciones, su ideología etc.), así como las condiciones del mundo real que da origen al establecimiento y surgimiento de tales corrientes. Es claro cómo la lógica interviene, por ejemplo en el caso del Estado, ya que éste surge a partir de las condiciones humanas y de las necesidades manifiestas de seguridad y de orden; no puede crearse una norma si no existe aquello que se va a reglamentar, o sea que primero se observa el fenómeno y después nace el instrumento jurídico con el que se pretenda normar.

Otro aspecto tocado dentro de los temas previamente desarrollados fueron los aciertos y debilidades del pensamiento jurídico. Aquí se determinó que la conciencia humana expresa la necesidad de contar con ideales de carácter universal que a la vez se conectan a la esencia de lo humano, y esta conciencia tiene un carácter filosófico que sin duda lleva al hombre a razonar sobre las condiciones que deben estar presentes en cada situación. Entonces, la historia es un saber científico, de carácter cognitivo que a fin de cuentas está demostrado y no sólo se entiende como un cúmulo de hechos. Dicho sea de paso, estos hechos son los que dan origen y vida a la historia, pues se van vinculando entre sí por relación de causalidad.

Dentro del Iusnaturalismo se sabe que hubo distintos procesos, dando paso a la idea de un derecho de la naturaleza humana cuyos principios se obtienen por métodos racionales, dejando atrás la idea de un derecho derivado de la divinidad. Aquí se consideran como principios de justicia con validez universal y que pueden deducirse de forma racional. El Iusnaturalismo es considerado como un conjunto de doctrinas muy variadas, pero que tiene como denominador común la creencia de que el Derecho "positivo" debe ser objeto de una valoración con arreglo a un sistema superior de normas o principios que se denominan precisamente: Derecho natural. De este modo, se afirma la supremacía y preexistencia del derecho natural ante el positivo, y éste debe ser reflejo de aquél. Aristóteles creía que lo justo natural emana de una justicia objetiva, por lo que es inalterable y permanente; en cambio, lo justo legal es la justicia que brota de aquello que el hombre estableció de tal forma en sus leyes, por lo que es una justicia circunstancial.

El positivismo jurídico es un conjunto de normas dictadas por la autoridad competente, siguiendo los procedimientos establecidos para la creación y validación de las normas jurídicas en una nación y momento determinado; constituye el objeto de la ciencia jurídica y se caracteriza atendiendo a su valor formal sin considerar lo justo o lo injusto de su contenido. Aquí existen reglas producidas según los procedimientos determinados por la autoridad competente, según un tiempo y lugar determinados. Supone para el orden jurídico una autonomía plena respecto del orden moral ya que sus normas se establecen por el poder público de una nación con el único objeto de regular la conducta del hombre en sociedad. En resumen, el derecho positivo rechaza todo aquello que no se apoya en certezas científicas y acepta solamente la experiencia obtenida por la observación de los fenómenos.

Por otra parte, el estatismo jurídico alude a una importante función del estado que es la abolición de la justicia privada. Esta corriente refiere la existencia de una ley divina, una ley natural que se representa por la fuerza ética

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