ESTADO DEL ARTE

ciudadanía para el siglo XXI

La función de la enseñanza de ciencias en la educación básica es educar a todas las personas y no sólo a quienes en un futuro se dedicarán al estudio de las ciencias.

La ciencia para todos debe proporcionar a los alumnos la experiencia del gozo de comprender y explicar lo que ocurre a su alrededor; es decir, “leerlo” con ojos de científicos.

 Educar en ciencias: para la vida y la ciudadanía.

 Curiosamente, escuchar que un producto ha sido “científicamente probado” vulnera nuestras defensas intelectuales y pocas veces se duda en comprarlo y usarlo.

 Se procura que la enseñanza de las ciencias sea más humanística y mejor conectada con la sociedad en lugar de ser utilizados como elemento motivador o

 “pretexto” para ser abordados en las clases de ciencias con la seriedad y el rigor necesarios.

 Respecto a la formación científica básica o “alfabetización científica”, del mismo modo que en su momento fue necesario alfabetizar a la población para su inserción a la sociedad, ciertos conocimientos científicos hoy en día son indispensables para desenvolverse en un mundo dominado, por las tecno-ciencias y sus consecuencias sociales, económicas y ambientales.

 La educación debe considerarse como una preparación para la vida, no para un posterior aprendizaje supervisado.

 Hay que tener presente que así como enseñamos conceptos en ciencias, también debemos desarrollar valores; los cuales son indispensables para vivir en sociedad, los niños pequeños aprenden a valorar el mundo natural; los niños más grandes empiezan a conocer cómo cuidar su salud, y los adolescentes cuentan con la información científica que les permitirá actuar como ciudadanos informados.

 Educar en ciencias: la ciencia como actividad humana y como cultura

 La educación en ciencias va más allá de la idea tradicional de la enseñanza expositiva de contenidos; así, lo que se pretende es una “formación científica básica” que permita a los estudiantes ver a la ciencia como parte de la cultura.

 No tiene ningún sentido separar ciencia y cultura, puesto que la ciencia se desarrolla en una “cultura particular”.

 El campo de educación en ciencias y los conocimientos escolares

 La importancia de enseñar no sólo es conocer el contenido de un libro de texto, por bueno que éste sea, sino va más allá.

 ¿Desde dónde y con qué perspectiva enseñar ciencias?

 El pensamiento de los alumnos como punto de partida de la enseñanza

 La inteligencia tiene un carácter adaptativo, que se caracteriza “como un equilibrio entre las acciones del organismo sobre el medio [asimilación] y las acciones inversas [acomodación]” Piaget.

 La investigación acerca de ideas previas aporta numerosos ejemplos de cómo el pensamiento genuino de los estudiantes –no la memorización de conceptos, que da pie a los llamados conocimientos previos y supone que los profesores han revisado previamente alguna temática científica con los alumnos– difiere de los conceptos científicos.

 El aprendizaje visto como un proceso de modelización

 La actividad científica se caracteriza por la interacción entre el pensar, el hacer y el hablar.

 Todos los estudiantes construyen ideas alternativas similares, pero unos consiguen hacerlas evolucionar y otros no.

 Desde la infancia cada estudiante construye su propio estilo de aprender y, en especial, las ciencias, generalmente a partir de cómo

...