El SIDA es el Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida.

        El SIDA es el Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida. Es una enfermedad grave que debilita el Sistema Inmunológico del cuerpo y este no puede luchar contra enfermedades. Cada día aumenta más la cifra de personas infectadas ya sea por falta de orientación o por no cuidarse. Ya que tu sistema está debilitado, está expuesto a enfermedades. Las enfermedades incluyen cáncer, neumonía, meningitis, infecciones inusuales graves y enfermedades debilitantes, lo que conlleva a pérdida de peso severa, desgaste físico y enfermedades que afectan el cerebro y al Sistema Nervioso Central. Actualmente no hay cura ni vacunas para prevenir la infección. Sin embargo, hay nuevos medicamentos que no solo retrasan la progresión, sino que también suprimen el virus, restaurando la función inmune del cuerpo y permite que personas infectadas lleven una vida normal y libre de enfermedades.

        El VIH ataca y destruye los linfocitos CD4, que son un tipo de células que forman parte del Sistema Inmune y que se encargan de la fabricación de anticuerpos para combatir las bacterias, virus e infecciones causadas por estos agentes externos. Este virus se dirige a la célula diana CD4, se fija a la membrana y fusiona de modo que puede introducir su material genético para multiplicarse. Una vez multiplicado se va a la sangre y se riega por todo el cuerpo infectando otras células que también las usará para seguir multiplicándose. Este infectara células nuevas para poder repetir el ciclo de multiplicación una y otra vez. Cuando se lleva a cabo la multiplicación, hay millones de copias en la sangre y se reducen las CD4  del organismo lo que produce una deficiencia inmunitaria. Aunque el cuerpo diariamente produce CD4 no son suficientes para acabar con el virus ya que este se multiplica, lo que hace difícil combatirlo. Se habla de inmunodeficiencia cuando el Sistema Inmunitario ya no puede combatir infecciones u otras enfermedades.

        Las causas de este son: tener contacto sexual sin protección, a través de la sangre, ya sea por transfusión o por compartir agujas, compartir fluidos corporales como: sangre, semen, líquido preseminal o secreciones vaginales, las agujas sin esterilizar que son utilizadas para realizar tatuajes, hacer perforaciones o compartiendo agujas (para drogarse). De la madre al niño se transmite durante la gestación, en el parto o por medio de la lactancia materna.

        Los métodos de prevención son: no tenga sexo con una persona que tenga relaciones con otras personas, utilice preservativos, asegurarse que las agujas para realizarse tatuajes y perforaciones estén esterilizadas o sean nuevas, si está embarazada y sospecha de tener VIH hable con su médico para proteger al bebe, acuda a lugares seguros al momento de transfundirse sangre, realice la abstinencia sexual, evite compartir agujas y jeringas, tenga una pareja que sea fiel y solo se acueste con usted y utilice guantes siempre que vaya a bregar con sangre y  fluidos corporales.

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