Factores que determinan la enfermedad

Factores que determinan la enfermedad.

Una tendencia natural de los seres vivos es procurarse un estado de bienestar, generalmente asociado con la salud, por lo tanto la ausencia de ésta, es sin duda una de las grandes preocupaciones de la humanidad no solo por el malestar que genera, sino también por todo lo que implica recuperarla, tanto en términos económicos, como emocionales, sociales y familiares.

Enfermedad (del latín infirmitas -falto de firmeza) según la Organización Mundial de la Salud, es la alteración o desviación del estadio fisiológico en una o más partes del cuerpo, por causas que generalmente son conocidas, las cuales se manifiestan por signos y síntomas característicos, y cuya evolución es más o menos previsible.

La enfermedad genera para la humanidad, una problemática de alcance mundial, pues no solo afecta la vida de las personas, afecta su desempeño y su economía, generando sufrimiento que de alguna manera también comparte con quienes le rodean. Aunque en los últimos decenios la esperanza de vida ha mejorado, en el mundo persisten enfermedades que se mantienen como las principales causas de muerte, como la cardiopatía, las infecciones de vías respiratorias, los accidentes vasculares cerebrales, el VIH sida, el cáncer y la diabetes entre otras.

Mucho se habla sobre salud, pero quizá pocas veces nos preguntamos porqué estamos enfermos o porqué una enfermedad reincide o inclusive porqué algunas personas enferman y otras no, es por ello resulta importante hacer referencia a los factores que determinan una enfermedad, comprendiendo como factor el elemento o circunstancia que contribuye a producir un resultado.

En términos generales se considera que los factores que determinan la salud y que condicionan la enfermedad incluyen tres aspectos: individual, familiar y comunitario, los cuales están relacionados con la herencia, con el desarrollo (hábitos, la vacunación, la nutrición), con aspectos sociales (educación, ocupación, interacción, seguridad) y psicológicos. Por razones funcionales podrían considerarse tres factores principales:

Factores biológicos: Relacionados con la parte fisiológica del organismo, abarca desde las alteraciones congénitas, los aspectos bioquímicos, el sistema inmunológico, hasta aspectos exógenos como las enfermedades infecciosas y parasitarias.

Factores ambientales: Vinculados con el entorno del ser humano, el cual se ve afectado por aspectos físicos (temperatura, ruido, radiación), químicos (contaminación, plaguicidas, metales pesados), biológicos (bacterias, virus y otros agentes patógenos) y psicológicos, sociales y culturales (estrés, adicciones).

Estilo de vida:  Referente tanto a los hábitos, como a la situación sanitaria de la población y los recursos asignados para su atención.

En una sociedad esmerada por modificar la calidad de vida, promoviendo no solo la utilización de la tecnología para facilitar la interacción del hombre con su medio, sino también para atender su estado de salud, resulta indispensable conocer los factores que condicionan la enfermedad, puesto que aún cuando buena parte de la investigación se avoca a la procuración de la salud o bien a la atención de la enfermedad, muchas de las acciones del hombre actual parecieran ir en sentido contrario con respecto al bienestar de las personas.

Esto resulta casi ilógico, pues por una parte se ha avanzado enormemente en la atención de la enfermedad y la procuración de la salud, con modelos de prevención y recuperación y se han invertido muchos recursos humanos y materiales para determinar nuevas y eficientes formas de atención médica y satisfacción de necesidades básicas como la alimentación, la vivienda, la educación; mientras que por otra parte la comodidad proporcionada por los avances tecnológicos, la despersonalización, la falta de interacción social y los malos hábitos han generado una sociedad con muchos elementos que dañan la salud física y psicológica.

Los factores asociados con la presencia de la enfermedad deben enfrentarse con estrategias que incluyan una mejor calidad de vida, un estilo de vida que implique hábitos nutricionales saludables, prácticas deportivas y acciones de autocuidado y prevención, en donde no se deje de lado el control ambiental, el cuidado del medio ambiente y la investigación a favor de la salud. La tecnología debe aplicarse para el beneficio de las personas, debe constituir un medio de información y no un medio de autodestrucción y aislamiento.

Nuestro estilo de vida, nuestros malos hábitos que excluyen el ejercicio, pero que han incrementado estrés y restado comida saludable y descanso y han agregado sustancias adictivas y prácticas adictivas, nos predisponen a padecer enfermedades que se convierten en los enemigos a vencer del avance científico.

La modernidad ha dotado al hombre de muchas herramientas que permiten comprender mejor al organismo y se ha allegado de muchos recursos para su atención, para su protección y para su curación, sin embargo la modernidad también ha traído para el ser humano un nivel de demanda social y personal que lo ha conducido a la depresión o en caso contrario a la ansiedad, a las adicciones, a la soledad y nos ha hecho olvidar que la presencia de la enfermedad pone de manifiesto que salud-enfermedad constituyen un proceso en donde debe darse atención a la parte emocional de los seres humanos (la cual se ve afectada también por los aspectos sociales), con la finalidad de lograr una vida saludable y de calidad.

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