Feocromocitomas

El documento proporciona una introducción e información general sobre los feocromocitomas. Describen los feocromocitomas como tumores endocrinos originados en las células cromafines de las glándulas suprarrenales, y son los tumores que se encuentran con más frecuencia en la médula suprarrenal de los perros. Estos tumores pueden ser solitarios y pueden aparecer dentro o alrededor de la glándula suprarrenal. Cuando se originan fuera de la glándula, se denominan feocromocitomas extraadrenales o paragangliomas.

Análogamente presenta un caso clínico sobre feocromocitoma en perros, que presenta los resultados del análisis de la literatura sobre este tumor endocrino. Los signos clínicos incluyen polipnea, disnea, debilidad, tos, colapso, pérdida de peso, letargia, vómito, diarrea, ansiedad, poliuria-polidipsia, ataxia, epistaxis, distensión abdominal, convulsiones, tremores y cianosis. El diagnóstico se basa en la combinación de signos clínicos, pruebas de laboratorio y estudios de imagen. El tratamiento recomendado es la extirpación quirúrgica del tumor, seguida de terapia de apoyo. No hay medidas preventivas conocidas para reducir el riesgo de desarrollar feocromocitoma en perros.

El resumen menciona que los feocromocitomas se consideran neoplasias funcionales porque pueden producir y secretar polipéptidos hormonales como adrenalina, noradrenalina y dopamina. Se discuten los retos diagnósticos, incluida la rareza del diagnóstico antemortem debido al patrón de secreción paroxística. El informe subraya la importancia de considerar el feocromocitoma en la lista de diagnósticos diferenciales para los casos con una masa en la región cráneo-dorsal abdominal. El resumen concluye con la mención de la presentación de un caso clínico en el que no se consideró inicialmente el diagnóstico de feocromocitoma, lo que condujo a una baja tasa de diagnóstico.

Se ofrece una revisión de la bibliografía sobre el feocromocitoma en perros. Menciona que no hay predilección por raza o sexo para este tumor y que suele aparecer alrededor de la edad media de 11 años. Los signos clínicos asociados al feocromocitoma son inespecíficos y están relacionados con el aumento de la producción de catecolaminas, en particular adrenalina. Estos signos incluyen polipnea, disnea, debilidad, tos, colapso, pérdida de peso, letargo, vómitos, diarrea, ansiedad, poliuria-polidipsia, ataxia, epistaxis, distensión abdominal, convulsiones, temblores y cianosis. La naturaleza intermitente de estos signos, que se producen en episodios relacionados con estrés, traumatismos, cambios en el flujo sanguíneo dentro del tumor o administración de medicación, hace que el diagnóstico sea difícil.

En la exploración física puede detectarse distensión abdominal debida a masas intraabdominales y derrame peritoneal. También es frecuente el edema periférico en las extremidades pélvicas. Los hallazgos auscultatorios pueden incluir aumento de los ruidos broncovesiculares o alveolares debido a la hipertensión pulmonar que causa congestión y edema. También puede haber taquipnea, taquicardia, arritmias y soplos sistólicos. Los hallazgos oftalmológicos pueden incluir midriasis, hemorragia retiniana o desprendimiento de retina.

Las pruebas de laboratorio y de imagen no son específicas pero pueden apoyar el diagnóstico. Las pruebas de laboratorio rutinarias pueden mostrar anemia no regenerativa, hemoconcentración, leucocitosis neutrofílica, niveles elevados de fosfatasa alcalina y alanina aminotransferasa e hiperglucemia. Las radiografías de tórax pueden revelar cardiomegalia generalizada, congestión pulmonar o edema, mientras que las radiografías abdominales pueden mostrar una masa en el abdomen craneodorsal, región de la glándula suprarrenal, calcificación del tumor, desplazamiento de los riñones caudalmente, hepatomegalia y derrame peritoneal. La ecografía puede identificar tumores mayores de 2 cm y es útil para detectar invasión renal y de la vena cava y trombos tumorales intracavitarios.

...