Furberos

INTRODUCCIÓN

Actualmente existe un campo petrolero llamado Furbero que lo encontramos ubicado en la llanura costeña de México, casi a 14 millas de la localidad de Papantla. Hablamos de un campo con múltiples intereses ya que ha se representado como un campo petrolífero con una gran importancia para el comercio, que hasta ahora se desconoce la naturaleza ígnea que contiene (la llamada “arena”) que se hallaron en las perforaciones , y esta no dio una lectura conocida hasta en estos últimos tiempos y las relaciones que tiene con los lacolites que dieron el origen al hidrocarburo, pero  en parte a este desarrollo de hidrocarburos se le da a los descubrimientos del anticlinal como resultado de las intrusiones ígneas.

Las características  de esta intrusión son los resultados que se han obtenido por los cortes de las perforaciones y muestras ejemplares de las rocas obtenidas. Furbero era conocido como zona petrolífera desde hace tiempo, pero era más conocido como “Congas” puesto así por los Totonacas que lo describían como Cera o Aceite Negro, luego esta palabra fue renovada en “Cubas”.

La zona de Furbero estudiada es algo singular por su topografía detalla que es una cuenca limitada por el Norte, Poniente, y Sur por las masas cubiertas de lava que se localizan al pie de la Mesa Central Mexicana, al Oriente, por montañas edad Terciaria.

EL CAMPO PETROLÍFERO DE FURBERO

Conocemos que Furbero está envuelta por una densa vegetación, que conlleva como consecuencia a que tenga una capa superficial de humos, que son el resultado de la putrefacción de bastantes cantidades de materias orgánicas vegetales que poco a poco se han ido acumulando en un lapso de muchos siglos.

En el campo de Furbero podemos hablar de las rocas sedimentarias marinas del Terciario y de las rocas ígneas que son actuales, pero se puede hallar una peculiar caliza llamada caliza Cretácica que al estudiarla podemos ver como se relaciona el campo de Furbero con los demás campos petrolíferos.

 Existe una roca que es la más antigua y conocida en todos sus alrededores, que está conformada por una serie de calizas, que es llamada Caliza de Tamasopo. Se da como el producto de estratos conformados por menos de un  pie de grosor de calizas puras parecidas a la porcelana, con un color gris, son compactas, presentando nódulos de pedernal color negro o gris obscuro en su parte superior. Hablando económicamente es de mucha ayuda para contener  horizontes petrolíferos. La formaciones de Tamasopo son consideradas como el criadero en donde se ha formado el hidrocarburo de la parte Norte de México, y de donde proviene todo el aceite, que por emigraciones las podemos hallar en otras formaciones.

La caliza de Tamasopo descansa sobre un estratificación discordante, y sobre de esta hay una serie de calizas impuras, en capas delgadas y margas esquistosas. En toda la formación podemos hallar una capa de arena, lechos de tobas de colores abigarrados, con mica descompuesta, estas formaciones son finalmente porosas, que fueron encontrados en dos de las perforaciones  conteniendo estas; aceites y gas pero no en grandes cantidades.

No es de gran importancia económica estas formaciones, pero en el campo de Furbero; una parte de estos esquistos delgados impermeables han sido cocidos y metamorfoseados en una roca dura negra, formando juntamente con la roca ígnea los receptáculos petrolíferos del campo, se piensa que las acciones de metamorfismo fueron por parte de las elevaciones de temperatura de las aguas termales y a la temperatura que tuvo la roca ígnea después de su intrusión.

Se conoce que las rocas ígneas de esta región, son primordialmente de basaltos, doleritas, basaltos-gabbros y varios productos de la actividad volcánica. Los relieves superficiales de lava que fueron degradados por la erosión, quieren decir que anteriormente estos cubrían la mayor parte de esta región, la lava proviene evidentemente de algún punto de la Sierra Madre, probablemente de las cercanías de Necaxa.

Sabemos que la característica más resaltante de los campos petroleros mexicanos, el que hay una gran cantidad y magnitud de las intrusiones volcánicas, los restos de las cuales se encuentran actualmente representados por diques, lechos interestratificados y por los conos basálticos aisladas, rompiendo la monotonía de las llanuras costeñas.

La actividad volcánica ha sido más fuerte en la zona Sur del área, alcanzando su mayor desarrollo en la Sierra de Otontepec, que es una masa irregular de cerca de tres mil quinientos “ft” de altura sobre el nivel del mar. La localización de la mayoría de las intrusiones fue probablemente liderada por una serie de fallas, o por la menor resistencia en ciertas direcciones de los estratos.

Es de suma importancia destacar la influencia de los lacolites en intrusiones potentes ya que son los que han dado lugar a la acumulación de hidrocarburos en  Furbero. La intrusión surgió evidentemente por una inyección de magma que siguió los planos de la estratificación, estando las rocas sedimentarias previamente plegadas bajo la forma de un anticlinal, la intrusión  al engruesarse cerca de la cresta de anticlinal, levantó capas sedimentarias adyacentes, reafirmando aún más el pliegue existente.

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