ISLAS VERDES DENTRO DE MARES GRISES

ISLAS VERDES DENTRO DE MARES GRISES.

Hemos llegado a un punto de no retorno, un punto donde se a vuelto una necesidad el maximizar el espacio que ocupamos pues ya no tenemos a donde expandirnos.

Nuestro planeta se encuentra en una de las mayores crisis ambientales, miles de seres se desvanecen a cada instante, seres que nos han acompañado en este viaje tan largo y a la vez tan corto que pareciera un sueño y, a momentos, un tormento.

Ya no podemos seguir talando bosques por tener espacio donde cultivar. No somos los únicos que habitamos este lugar. Necesitamos incrementar la eficiencia del espacio que ya ocupamos. Por esto la agricultura local es una necesidad que debemos implementar. Tenemos la obligación de reducir nuestro impacto ecológico, y una forma es a través de producir parte de

lo que comemos. Debemos dejar nuestro egoísmo a un lado y concentrarnos en nuestra capacidad de cambio.

A través de la hidroponía y huertos urbanos podemos producir una parte de los alimentos que tanto necesitamos. Podemos implementar estos sistemas en una pared, en una azotea o en un mueble dentro de casa, solo necesitamos luz y agua. El simple hecho de producir un 10% de lo que consumimos puede liberar una gran presión a las campos que tanto necesitamos y al transporte que tanto impacta.

Es nuestra obligación tomar consciencia sobre la presión que ejercemos en el ecosistema, sobre los daños que hemos ocasionado y seguimos causando, es momento de utilizar sabiamente nuestros recursos para permitir la persistencia de lo que llamamos vida, de no ser así solo viviremos para verla morir. Es cierto, individualmente no somos eternos, pero colectivamente nos mantenemos siendo. Tenemos la capacidad de comprenderlo, por tanto, tenemos la obligación de actuar, de motivar a nuestros pares a cambiar el rumbo de nuestro crecimiento, de conservar y permitir florecer aquello a lo que pertenecemos. No lo sabíamos, pero ahora lo entendemos, es momento de pensar y actuar hacia un bienestar global.

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