Juntos Hasta La Muerte

Juntos hasta la muerte

Jalisco, año de 1800 Valle de Guadalupe. Fue un año normal comenzado en miércoles, el frío azotaba con fuerza gran parte de los cultivos de esa pequeña región de Jalisco. En la punta del cerro más alto de aquella región vivía una familia humilde dedicada a la agricultura, Don Lupe cabeza y sostén de la familia junto con su esposa Doña María José y sus cuatro hijas. Ayudados con las cosechas del maíz y sus vacas todos ellos levantaban un puesto de antojitos los domingos por las tardes, junto a la pequeña iglesia ubicada en el corazón del pueblo.

Mientras Febrero finalizaba y el frío iba terminando, mucha gente sufrió perdidas con sus sembradíos de maíz pues el frio de los meses pasados termino con gran parte de la milpas, la familia de Don Lupe tuvo gran suerte pues el frio de ese año no pudo con las grandes y hermosas milpas que crecieron llenas de maíz gordo y sabroso. Todo era perfecto por esos tiempos las ventas en el pueblo crecían, el panadero era feliz su pan era riquísimo gracias al riquísimo trigo, el pescado y las mojarras eran deliciosas, pero una desgracia estaba a punto de suceder, mientras Don Lupe junto con sus hijas cortaban los olotes de maíz para vender una parte a la tortillería, dos jóvenes olotes enamorados estaban a punto de ser separados, su sufrimiento era tan grande, no sabían que hacer, crecieron durante el Otoño-Invierno, estaban totalmente e incondicionalmente enamorados. Durante la cosecha “Chayo” el olote macho y “Amparo” la hembra fueron separados para ser procesados y así convertirlos en unas grandes tortillas riquísimas.

Una tarde de domingo después de salir de misa de 7 de la noche el señor Jorge que venía con su familia desde la ciudad de Guanajuato pasaron a cenar con Doña María José unas deliciosas dobladillas de huitlacoche, mientras Juana la hija mayor de Don Lupe preparaba una tortilla unió a Chayo y a Amparo en un taco de doble tortilla y así estos dos murieron juntos.

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