LA MEDICINA EN MÉXICO”
Enviado por Maria Luisa Rivera Montellano • 13 de Agosto de 2016 • Ensayo • 1.743 Palabras (7 Páginas) • 238 Visitas
UNIVERSIDAD AUTÓNOMA DE TAMAULIPAS[pic 1][pic 2]
FACULTAD DE MEDICINA
“DR. ALBERTO ROMO CABALLERO”
ENSAYO FINAL:
“LA MEDICINA EN MÉXICO”
MATERIA:
HISTORIA Y FILOSOFÍA DE LA MEDICINA
CATEDRÁTICO:
DR. DAVID ALDANA
ALUMNA:
MARÍA LUISA RIVERA MONTELLANO
GRADO Y GRUPO:
7º”A”
LUGAR Y FECHA:
TAMPICO, TAMPS., A 13 DE OCTUBRE DE 2011
La evolución puso al hombre sobre la faz de la tierra, con los miles de años que significaban las variaciones genéticas que aseguraron la sobrevivencia a las variedades de las distintas especies. Aquella variante genética fue capaz de poner en los sitios que requerían necesariamente determinadas uniones y determinadas características resultantes.
Por esto se puede decir que la medicina es una ciencia casi tan antigua como el hombre mismo aunque antes no se le diera ese reconocimiento de ciencia sino simplemente de instinto, de conocimiento empírico, que le permitiera al hombre primitivo sobrevivir en condiciones adversas. Es tan notable el vasto acervo de información sobre la medicina a lo largo de la historia que pareciera imposible que aún en nuestros días, con miles de años transcurridos, pueda haber algo más por descubrir… y lo hay.
Escribiendo esto me parece difícil no mencionar todos los descubrimientos, conocimientos y creencias que el hombre ha tenido acerca de la medicina pero, como dije anteriormente, es tanta la información que este ensayo parecería más un libro o reseña sobre la medicina y no pretendo eso. He decidido enfocarme únicamente en la historia de la medicina en América, más precisamente en México, pues para lograr un buen escrito sobre algo lo mejor es tener un mayor conocimiento sobre ello.
A pesar de que el asentamiento humano en América inicia mucho después del ocurrido en otros continentes, el avance de las culturas americanas fue constante e incluso equiparable al de aquellas. Aunque en el ámbito social y cultural aún existía una enorme brecha entre el continente americano y el europeo, en cuanto a medicina podría decir que el conocimiento médico de los indígenas era superior al de los europeos que llegaron a conquistarlos. La medicina de los indígenas, es decir, la medicina primitiva de América, tenía más de quince siglos de existencia. La de los colonos era la medicina de la Europa del siglo XVII.
Pese al gran conocimiento médico que poseían, los indígenas americanos sufrieron contingencias nuevas, como el caso de las enfermedades infecciosas que, al ser desconocidas para ellos, ocasionaron grandes daños, acabando con gran parte de la población nativa. Estas enfermedades actualmente se consideran leves, como el sarampión, pero en aquella época y por tratarse de pueblos que nunca las habían sufrido, causaban verdaderos desastres porque esas comunidades no habían desarrollado resistencia orgánica natural para enfrentarlas.
En cuanto a la medicina en México, las culturas que tuvieron un mayor avance en cuanto a cultura, organización política y medicina fueron la cultura maya y la azteca. La medicina en estas culturas al igual que en las culturas griega, egipcia, hindú, china, por comentar algunas, estaba vinculada a eventos místicos y religiosos, pues se consideraba a la enfermedad como un castigo por ofender a alguna de las deidades o como un mal que algún enemigo habría enviado por medio de un hechicero; en ambos casos se recurría a la “medicina” para retirar ese daño y recobrar la salud.
Es importante mencionar que el dios principal de la medicina azteca se llamaba Xipe, y era reconocido como el protector de las plantas medicinales y de las personas que las aplicaban. En cuanto a las deidades de la cultura maya, relacionadas con la medicina se encuentran: la diosa Ixchel y los dioses Citbolontun e Itzamá, quienes trabajaron por descubrir las virtudes medicinales de las plantas.
Los aztecas eran doce millones de habitantes según la literatura, sin nociones del contagio humano. Sus médicos conocían el pulso, eran hábiles en el tratamiento de fracturas, en instrucciones prenatales y en expulsión placentaria. En cuanto a la farmacología de la época, los conocimientos eran muy abundantes; conocían la coca con el nombre de "alimento de los dioses". El cacao lo empleaban como moneda; la quina la usaban contra los escalofríos, como los presentes en la malaria.
Por estos hechos, al descubrirse América, los conquistadores se dieron cuenta del avanzado conocimiento del nativo sobre las hierbas. El ordenamiento de éstas en verdaderos jardines botánicos; el almacenamiento y expendio en lugares, saber que con ellas se podía curar específicamente una enfermedad, hizo que la corona española enviara verdaderas empresas para tener estos recursos a su disposición.
Tanto en la cultura maya como en la azteca la sociedad se preocupaba mucho por la salud pública, teniendo ambas jardines botánicos en los cuales investigaban la acción de las plantas medicinales. Se le daba gran importancia al baño, lo mismo que a sus costumbres sexuales y a su alimentación, la cual a pesar de no ser abundante sí era balanceada.
El pueblo maya, como el azteca, era partidario de los sacrificios humanos, de donde se puede deducir que sus conocimientos anatómicos directos los obtenían gracias a los mismos. Para los sacrificios se tenían instrumentos cortantes, para los cueles el material predilecto era la obsidiana. Para la descripción de las diferentes patologías tenían su propia denominación y la patología quirúrgica les fue mejor conocida que la médica.
Dentro de la patología indígena se reconocían los llamados “estados de impureza”, entre los que se hallaban la menstruación, el embarazo y el parto; estos estados debían ser tratados por el Sukia, éste era médico, adivino y asistente del Usékar o sacerdote, como en otras culturas mezclaba los conocimientos médicos con la brujería y hechicería. Todos los conocimientos que poseían se transmitían de generación en generación por medio de relatos, llegando a existir algunos de éstos hoy en día aunque con ligeras variaciones.
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