La Biodiversidad

La “biodiversidad” es un término popularizado por E.O. Wilson en los años ochenta (1980s), donde lo utilizó para referir a la diversidad biológica de un ecosistema. En términos simplificados, se refieres que tan heterogéneo es un ecosistema.

La diversidad de especies por unidad de área; incluye el nombre de especies presentes y su abundancia relativa. Mientras más diversidad de especies haya, más complejo es dicho ambiente. Además, como humanos tendemos a respetar más los ambientes donde hay mucha diversidad de especies. Por ejemplo, los bosques tropicales.

La diversidad de hábitat se refiere al rango de los distintos hábitats en un ecosistema. Depende de los nichos en el ecosistema, habrá más o menos diversidad de hábitat. Por ejemplo, en un bosque hay muchas especies y por ende hay muchos nichos, lo que hace que haya muchos hábitats (árboles, lagos, etc.). Pero en un desierto, donde casi no hay tantos nichos, no hay muchos hábitats (la mayoría de las veces sólo hay arena y vegetación casual)

La diversidad genética se refiere a la diversidad del material genético presente en el “pool genético” del ecosistema. Sí es un “pool grande”, hay más diversidad genética, y si es un “pool chico”, es una diversidad genética pobre. Por diversidad genética es intra especie: diferentes tamaños, diferentes pigmentos, etc. Sin embargo, también se puede referir a la diversidad genética total de un ecosistema.

Todas las diversidad están ligadas. Por ejemplo, un incremento en la diversidad de hábitat lleva a un incremento en las otras dos. Esto se debe a que los diferentes hábitats tienden a tener diferentes especies, y por ende, más hábitats harían que hubiese más especies. Igualmente, especies diferentes tienden a tener genes diferentes, lo cual provocaría un incremento en la diversidad genética de dicho ecosistema. Se concluye diciendo que al conservar la diversidad de hábitat, también se está conservando la diversidad de especie y la diversidad genética.

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