La Importancia del Cuidado Personal

La Importancia del Cuidado Personal

El cuidado personal es unos de los aspectos esenciales para llevar una vida satisfactoria y equilibrada. No sólo es una cuestión de imagen sino que trata de un conjunto de prácticas que implican también el bienestar físico, el bienestar mental, el bienestar emocional e incluso el bienestar espiritual. Vivimos en un mundo rápido y lleno de exigencias y por lo tanto dedicar tiempo y atención a nuestro propio cuidado se convierte en algo esencial para vivir una vida de salud y para lograra través de ella nuestro propósito.

En primer lugar, el cuidado personal debe ser entendido como tal como un asunto que tiene mucho que ver con la salud pública. La práctica del cuidado personal implica una buena alimentación, la práctica del ejercicio físico, el descanso reparador, la higiene y el cuidado personal, el aseo, el cuidado de la piel, del boca y de los dientes. Estos hábitos no sólo nos permiten prevenir enfermedades como la obesidad, la diabetes o los problemas cardiovasculares sino que, a la vez, nos permiten optimizar la energía acumulada a través de los nutrientes esenciales para nuestra actividad vital cotidiana de modo que podamos afrontar con mayor éxito las demandas cotidianas y los desafíos diarios. Al mismo tiempo la higiene personal como todo el conjunto de hábitos, rutinas y prácticas específicas relacionadas con el aseo, cuidado de la piel, salud bucal, etc. no sólo previenen la aparición de infecciones sino que también ayudan a mejorar nuestro aspecto y nos permiten reforzar la autoestima y la confianza.

Por otro lado el cuidado personal es aquello que también se relaciona con el cuidado de nuestra salud mental y emocional. Este bienestar mental y emocional es igual de importante que el bienestar físico. En una época de estrés, ansiedad y sobrecarga, ser capaz de dedicarse tiempo para la paz mental y el bienestar emocional hace una gran diferencia. Por eso resulta útil leer un buen libro, meditar, disfrutar de un buen baño o simplemente desconectar del mundo digital para poder volver en conexión con nosotros mismos, nuestro centro, permitiéndonos hacer una pausa, mantener nuestra cabeza ocupada, aprovechar los momentos de mayor autonomía mental, aumentar las oportunidades para la creatividad y en general, tomar decisiones más acertadas respecto de nuestra vida cotidiana.

En lo que respecta a la disciplina emocional, dedicarnos un tiempo para nosotros puede resultar en una relación más saludable con nuestras propias emociones. Saber cuándo necesitamos un descanso, cuando podemos necesitar ir a buscar apoyo o cuándo conviene alejarnos de los escenarios que nos perjudican están todas ellas que son maneras de demostrar y expresar inteligencia emocional y amor por uno mismo. Todo esto nos ayudará también a mejorar nuestra relación con los otros, ya que la persona emocionalmente equilibrada es capaz de establecer una mejor comunicación, resolver conflictos de forma constructiva y dar apoyo a los otros.

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