La Planificación Educativa
Enviado por I1r2m3a4 • 20 de Marzo de 2013 • 1.491 Palabras (6 Páginas) • 255 Visitas
Planificación Educativa
LA PLANIFICACIÓN EDUCATIVA
1) El sentido de la planificación: por qué y para qué planificar.
Llamamos planificación al instrumento con el que los docentes organizan su práctica educativa, articulando el conjunto de contenidos, opciones metodológicas, estrategias educativas, textos y materiales para secuenciar las actividades que han de realizar[1].
Toda situación de enseñanza está condicionada por la inmediatez y la imprevisibilidad[2], por lo que la planificación permite: por un lado, reducir el nivel de incertidumbre y, por otro, anticipar lo que sucederá en el desarrollo de la clase, otorgando rigurosidad y coherencia a la tarea pedagógica en el marco de un programa.
Habitualmente, la planificación funciona como una exigencia formal. En este sentido se la reduce a un mero instrumento burocrático, y se la despoja de su función primordial, que es la de guía organizadora y estructuradora de la práctica.
2) Componentes de una planificación.
Cuando un docente diseña una clase necesita reflexionar y tomar decisiones sobre aspectos que le permitan estructurar y organizar su propuesta: fundamentos, objetivos, contendidos, materiales, metodología, evaluación y bibliografía.
La fundamentación:
Justifica la selección de contenidos y objetivos y explica brevemente el sentido de lo que se hará. En ella se definen claramente los alcances del curso, se delimitan los contenidos y su nivel de profundidad y se explicita la posible articulación con otros cursos.
La fundamentación de una propuesta explicita su marco de referencia organizador[3].
Los objetivos:
Explicitan la intencionalidad de las acciones que se proponen; las guían, las orientan y expresan los logros que se pretenden. Son las aspiraciones concretas y puntuales de la tarea cotidiana del docente.
En su hacer diario el profesor propone situaciones de enseñanza que el estudiante deberá resolver con los contenidos que se han desarrollado. El objetivo de una clase indica claramente el problema que se quiere plantear al alumno[4].
Hay diferentes formas de enunciar los objetivos y diferentes niveles de generalidad de los mismos.
¿Cómo es conveniente formular los objetivos?
· Expresar con claridad los aprendizajes que se pretende alcanzar.
· Dar cuenta de el/los temas que se van a estudiar y de las competencias que debe desarrollar el alumno.
· Utilizar verbos en infinitivo en su elaboración, que designen las acciones esperadas.
· Diferenciar los objetivos orientados hacia el alumno de los objetivos que el docente platea para su clase.
Por ejemplo, se pueden formular objetivos de la siguiente manera:
Que el alumno sea capaz de:
-Integrar los conocimientos desarrollados en el curso para la resolución de problemas planteados
-Reconocer las características de un preparado
-Describir la morfología de un hueso
-Profundizar en la importancia de un tema en el marco de la asignatura
Objetivos de clase:
-Profundizar en la importancia de un tema en el marco de la asignatura
-Promover el trabajo en equipo a partir del uso de estrategias de trabajo grupal
-Proporcionar materiales para la indagación sobre el tema desde distintas fuentes de información.
Cabe aclarar que, durante una clase, siempre se persiguen y logran objetivos, aunque no se los haya formulado. Lo importante de su explicitación es dar coherencia y seriedad a la propuesta y su puesta en práctica.
Lo central de un objetivo es que dé claridad sobre lo que se hará como también lo que será posible de resolver con el desarrollo de la práctica.
Los contenidos:
Son un conjunto de saberes, un recorte arbitrario de conocimientos de un campo disciplinar, que se considera esencial para la formación del alumno.
Los contenidos se seleccionan en función de la propuesta formativa en la que se insertan, ya que la misma orienta su desarrollo y articulación con otros contenidos (de cursos correlativos y posteriores, por ejemplo).
La organización y distribución de contenidos en el tiempo debería tener en cuanta el peso de los mismos, su importancia y prioridad en el aprendizaje del alumno.
En el nivel universitario lo más frecuente es que los contenidos se organicen por disciplinas[5], y se ordenen priorizando las articulaciones y la lógica interna de los conocimientos de un campo específico.
Existen varias formas posibles de organizar y secuenciar los contenidos en el marco de un programa: en unidades didácticas, en bolillas por temas, en ejes temáticos más generales o alrededor de problemas, entre otros.
Es importante recordar que los contenidos de la enseñanza representan una selección intencionada que se hace a la luz de un proceso de formación que se desea para el alumno. Su adecuada presentación requiere organizarlos, distribuirlos y secuenciarlos en función de los objetivos planteados y de los tiempos disponibles.
Los materiales:
Como materiales o recursos didácticos se entiende la selección de textos para los estudiantes, la elaboración de fichas o guías de trabajo, la presentación de diapositivas o filminas con esquemas, dibujos o
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