La adhesión al relato ecológico.

La adhesión al relato ecológico

En articulo muestra sondeos donde muestra la incertidumbre en cuanto a los valores medioambientales

Que consiste en medir hasta qué punto los europeos se adhieren al "gran relato ecológico" que aparece en los años 1970, utilizando una serie de preguntas conocida bajo la denominación "paradigma ecológico" de Riley Dunlap.

Los indicadores resultantes en el artículo dados desde 1978 y actualizados en 2000.

Da a conocer un cambio ideológico completo. donde el ser humano es sujeto central de la historia. Más cerca de nosotros, el gran relato industrial definía como héroe, bien al capitán de industria en el caso del liberalismo, bien a la figura del proletario revolucionario en el caso del comunismo. A partir del final de los años 1960, Dunlap y sus colaboradores sugieren que, con el desarrollo del ecologismo, se produce un cambio de paradigma en Europa y en América del Norte.

El Articulo en ese sentido nos muestra que pasamos del relato antropocéntrico al relato ecocéntrico en el cual la vuelta a la naturaleza, o por lo menos al medioambiente, garantizaría mejor calidad de vida.

Ello significa que los valores económicos de las industrias pasarían a un segundo plano al igual que los valores religiosos que ha delegado a los seres humanos el poder divino por lo cual el articulo nos da a conocer que la naturaleza no poseería solamente un valor instrumental, como recurso, sino que convendría fundamentalmente protegerlo.

Hay o etapas principales de este "gran relato":

1) la conciencia de la fragilidad del entorno natural

2) de los límites de la economía

3) el rechazo de la excepcionalidad para llegar a una forma de ecocentrismo

5) la creencia en la posibilidad de una crisis ecológica mayor.

Ahora en el artículo según la propuesta:

Cuando los hombres alteran la naturaleza, generan a menudo consecuencias desastrosa. La inmensa mayoría de los franceses (el 95%) está totalmente de acuerdo con esta idea.

Se carece de comparaciones internacionales, aunque se dispone de las cifras de la encuesta de 1990 para el Estado de Washington en este caso también el resultado es casi unánime, con un 82%

Cuadro ante la Afirmación en cuanto la alteración de la naturaleza con respecto al hombre

[pic 1]

Ahora también se muestra que  EVSconsta consta de un segundo indicador, aunque expresado esta vez de manera negativa con  la siguiente propuesta:

 "El equilibrio de la naturaleza es lo suficientemente sólido como para compensar los daños causados por los países industrializados".

Cuadro de Resultados:

[pic 2]

También el Articulo muestra una segunda dimensión del que sugiere que el planeta sufre de sobrepoblación:

"Alcanzamos el número de seres humanos que la tierra puede soportar". Aunque esto suene favorable para la economía de la industria la inquietud ante la demografía en la ideológia ecologista ha puesto de manifiesto desde el final de los años 1960 con el libro de Paul y Anne Ehrlich (1973) titulado Los límites del crecimiento que viene a ser un riesgo y el enunciado divide a los franceses en dos, el 46% está de acuerdo y el 47% no lo está.

[pic 3]

No obstante, en Francia, estas tesis jamás han seducido a la población, porque no es la sobrepoblación sino la natalidad insuficiente la que constituye el objeto de una preocupación.

Ello explica, sin lugar a dudas, el porcentaje relativamente bajo registrado con respecto al observado en la encuesta Dunlap, la cual encuentra un total de 53% de estadounidenses favorables a esta propuesta a partir de 1990.

Una tercera dimensión del paradigma ecológico consiste en rechazar la excepcionalidad, es decir el hecho de reconocer que los seres humanos están sometidos a los mismos límites naturales que los demás seres vivos. El indicador elegido para averiguar esta dimensión es negativo: mide no tanto la adhesión al ecologismo como a la concepción prometeana: "El genio del hombre permitirá que la tierra siga siendo viable". Los resultados son perfectamente equilibrados entre partidarios y oponentes a esta idea: los primeros, que forman el 48% de los franceses, confían en la ingeniosidad de los seres humanos para mantener el planeta en condiciones aceptables, mientras que una proporción similar pone en duda sus capacidades. Se presiente, detrás de esta actitud negativa, la desconfianza que existe hacia una ciencia y técnica incapaz de compensar los daños causados por el progreso. Estas cifras nos alejan del consenso existente alrededor de la conciencia de la fragilidad de la naturaleza, y atestiguan de una adhesión parcial a este componente pesimista del paradigma. Por último, la comparación con la encuesta americana consolida la escala de Dunlap, puesto que el 47,5% de los estadounidenses encuestados se posicionan en contra de la excepcionalidad.

...