La diferencia entre ciencia y pseudociencia
Enviado por Laura Hernández • 11 de Noviembre de 2018 • Resumen • 1.472 Palabras (6 Páginas) • 120 Visitas
LO MÁS PRECIADO.[1]
Cuando en la ciencia hay algunas cosas que todavía no encontramos una explicación razonable para explicarlas, la pseudociencia se apresura a darle una explicación aunque no sea científica. La pseudociencia surge como una respuesta para dar explicación a los fenómenos que ocurren día con día.
La lectura empieza, cuando los organizadores de una conferencia de científicos mandan a un chofer a recoger a uno de los científicos que iban a participar en la conferencia. Buckley es el chofer que irá a recogerlo. Durante el camino, Buckley le hace una serie de preguntas al científico sobre temas que le interesaban; de los extraterrestres congelados que languidecían en una base de las Fuerzas Aéreas cerca de San Antonio, de “canalización”, de cristales, de las profecías de Nostradamus, de astrología, del sudario de Turín, la Atlántida, etc. A pesar de que el chofer era un hombre con mucho conocimiento en lecturas de temas de éste tipo, ignoraba muchas cosas excitantes y misteriosas de la ciencia real y no había oído prácticamente nada de la ciencia moderna. Tenía un interés en las maravillas del universo, quería saber de ciencia, pero toda había sido expurgada antes de llegar a él. Se limitaba con saber lo que la mayoría de las fuentes disponibles y accesibles decían que era verdad. Tenía que aprender a ser más escéptico con lo que la cultura popular le ofrece.
La pseudociencia lleva a la existencia de analfabetas científicos; el mismo Platón dio una definición al analfabetismo científico en el libro VII de Las Leyes. Las consecuencias de éste analfabetismo son más peligrosas en nuestra época que en cualquier otra.
La pseudociencia puede ser también peligrosa. Por ejemplo, se está llevando a la extinción a los rinocerontes asiáticos porque dicen que sus cuernos, previenen la impotencia. Por eso la ciencia debe imponerse a la pseudociencia, para terminar con este tipo de mitos que no benefician en lo absoluto a la humanidad. Es peligroso mantener una ignorancia ante los temas que afectan actualmente; el calentamiento global, la contaminación, los residuos tóxicos, la lluvia ácida, etc. Los sueldos y trabajos dependen de la ciencia y la tecnología.
La diferencia entre ciencia y pseudociencia, es que la primera entiende los errores humanos. La ciencia está en busca de la verdad, quiere explicar los fenómenos de una forma científica. Mientras que la otra solo quiere dar una explicación sencilla al fenómeno, sin importar que sea cierta. No acepta que puede estar equivocada, sino que sustenta que sus teorías son correctas con pruebas que son insuficientes.
Hipócrates de Cos es el padre de la medicina. Se le recuerda por sus esfuerzos por retirar el manto de superstición de la medicina para llevarla a la luz de la ciencia. En el diagnóstico de la enfermedad, indujo el método científico. Exhortaba a la observación atenta y meticulosa. Antes d la invención del termómetro, hizo graficas de curvas de muchas enfermedades. Recomendó a los médicos que, a partir de los síntomas del momento, intentaran predecir el pasado y probable curso futuro de cada enfermedad. Sus opciones eran imitadas debido e la existencia de pocos fármacos. En los tiempos clásicos se hicieron avances considerables hasta la caída de Roma.
Mientras que en el mundo islámico florecía la medicina, en Europa se entró a una edad oscura. Se perdió la mayor parte de conocimiento de anatomía y cirugía. Abundaba la confianza en la oración y curaciones milagrosas. Se restringieron las disecciones de cadáveres. La investigación médica llegó a un punto muerto.
Las enfermedades se han ido reduciendo progresivamente y se curan gracias a la ciencia. Al menos en el mundo desarrollado, se tienen más posibilidades de alcanzar la madurez de los hijos que las que tenía la heredera al trono. La viruela ha desaparecido. Los mosquitos transmisores de la malaria se han reducido. La esperanza de vida de un niño con leucemia ha aumentado. Pero todavía existen quienes confían plenamente en la oración, prefieren ver a sus hijos muertos antes que darles un antibiótico. Los tratamientos científicos son mucho más eficientes que los alternativos.
En la época preagrícola la expectativa de vida era de 20 a 30 años. Llegó a 50 en 1915, a 60 en 1930, 70 en 1955 y hoy se acerca a 80.
La ciencia y la tecnología no son simples cornucopias que vierten dones al mundo. Los peligros tecnológicos que plantea la ciencia, su desafío implícito al saber tradicional y la dificultad que se percibe en ella son razones para que alguna gente desconfíe de la ciencia y la evite. Hay una razón para que la gente se ponga nerviosa ante la ciencia y la tecnología. Pero no nos podemos limitar a concluir que la ciencia pone demasiado poder en manos de tecnológicos moralmente débiles o políticos corruptos locos por el poder y decidir prescindir de ella. Su temible poder nos impone a todos una nueva responsabilidad: más atención a las consecuencias de largo plazo, una perspectiva global y transgeneracional, etc.
...