La práctica educativa
Enviado por adrianca • 12 de Mayo de 2013 • Ensayo • 1.641 Palabras (7 Páginas) • 232 Visitas
“La práctica educativa. Cómo enseñar” 1er. capitulo
Antoni Zabala Vidiella
El libro “La práctica educativa. Cómo enseñar” de Antoni Zabala Vidiella inicia con un prólogo en el que nos dice que su libro no intenta decir la última palabra en lo que a ello respecta sino solo desea contribuir a una práctica reflexiva y coherente; el habla de los docentes, sea cual sea el nivel en el que se encuentren, deben ser profesionales que se convenzan de la dificultad que tiene su tarea, en esto concuerdo con ello, ya que el quehacer docente es muy complejo y requiere muchos años de práctica e investigación. También nos dice que el no se quiere enfocar en tema central o específico ya que dejaría de lado todo un contexto, que es necesario para entender ese algo específico.
1. La práctica educativa.
Unidades de análisis
Objetivo: mejorar la práctica educativa
Para mejorar la práctica educativa, el autor nos señala que es necesaria la experiencia y el conocimiento; dentro de la experiencia, se ubica nuestra experiencia, la experiencia de otros maestros, y el conocimiento consiste en lo que proviene de la investigación, de las experiencias de otros, de modelos, etcétera; a veces, nosotros valoramos esas experiencias a través de los resultados de los alumnos, pero el autor nos dice que eso no es suficiente ya que siempre son grupos diferentes y pasan diferentes cosas dentro de la práctica; además, en ocasiones nosotros no sabemos distinguir objetivamente lo que es correcto de nuestra práctica y lo que no y ni la comparación con las práctica de otro compañero será suficiente porque también habrá subjetividad. Para mejorar nuestra práctica necesitamos analizarla, utilizando criterios, ó yo le llamaría teoría, para fundamentar y argumentar la práctica y hacer un análisis objetivo.
El autor nos menciona que en la práctica suceden demasiadas cosas a la vez y no podemos percibirlas o darnos cuenta de ellas y no podemos controlar lo que hacemos de forma consciente, ni racionalizar la práctica educativa.
Antoni Zabala, cita a Elliot que nos dice las formas en que los maestros intentamos racionalizar la práctica, en una nos dice que el docente investiga sobre un problema práctico y con base en su investigación hace los cambios pertinentes en su práctica; la otra forma, que es la que creo que utilizamos la mayoría, es el cambiar la práctica porque hay un problema y si funciona, decide adoptar una estrategia de cambio, pero no se basa en la teoría. En la primera, se ve la práctica de una forma más objetiva y en la segunda se sigue la lógica natural del pensamiento práctico.
Zabala, dice que el que el proceso de enseñanza – aprendizaje sea muy complejo, no debe impedir sino que hace más necesario que usemos referentes teóricos que nos permitan interpretar lo que sucede en nuestra práctica. Si tenemos conocimientos y referentes teóricos, los utilizaremos, primero para planear y luego para evaluar lo que sucedió en la práctica.
Los procesos de enseñanza – aprendizaje, las variables que intervienen en ellos y su interrelación siempre son diferentes en los grupos así que los efectos educativos también lo son; por ello, necesitamos de medios teóricos para hacer un análisis reflexivo de nuestra práctica y fundamentar el por qué de los cambios que en ella queramos realizar.
El autor nos da dos referentes teóricos que nos permitirán entender mejor la práctica: la función social de la enseñanza y el conocimiento de cómo se aprende.
La estructura de la práctica la determinan muchas cosas, numerosas variables, no puede reducirse a lo que pasa en el aula.
La planeación, la aplicación y la evaluación de los procesos educativos, so muy importantes para poder intervenir pedagógicamente y no podemos analizar la práctica sin tener en cuenta esos elementos.
En el libro, se plantea a las actividades que se llevan a cabo dentro del aula como una unidad fundamental en la práctica, pero estas actividades deben estar secuenciadas y organizadas de tal manera que nos lleven a cumplir un propósito determinado y que se incluyan en ellas las fases de planificación, aplicación y evaluación, si no de nada sirve hacer muchas actividades.
Las secuencias didácticas y las otras variables metodológicas
Una secuencia didáctica, según Antoni Zabala, son un conjunto de actividades ordenadas, estructuradas y articuladas para la consecución de unos objetivos educativos, que tienen un principio y un final conocidos por el profesorado y el alumnado, éstas permiten recoger todo lo complejo de la práctica y permita incluir los momentos de toda intervención reflexiva: planificación, aplicación y evaluación; sin dejar de lado todas las variables que se presentan, analizándolas por separado y tomándolas en cuenta como globalidad.
Las variables metodológicas de la intervención en el aula
En esta parte, se hace mención a varios autores con referente a lo que señalan de las variables que configuran la práctica.
Joyce y Weil utilizan 4 dimensiones: la sintaxis, el sistema social , principios de reacción y sistema de apoyo ( las actividades secuenciadas, el papel del maestro y los alumnos, las relaciones, las normas, las reglas y las condiciones físicas y personales para la intervención).
Tann identifica las siguientes
...