Los bosques como salvación o tragedia mundial

Los bosques como salvación o tragedia mundial

“Cuando uno arranca una sola cosa de la naturaleza, se encuentra que está agarrada del resto del mundo”

John Mui

Quiero empezar con una comparación, imagínense la naturaleza en épocas de la conquista y ahora imagínensela la época actual, una vez que lo analizaron quiero que sepan que la visión del México prehispánico hacia la naturaleza era con un cuidado y una valoración excesivos hacia la misma, ya que era, es y seguirá siendo, la principal fuente de recursos de todo el mundo. Ahora, sin más que debatir, nuestro interés monetario y “crecimiento eficiente”, nos han segado tango que hemos sido capaces de destruir poco a poco nuestro único hogar sustentable, pegando en donde más repercute mundialmente, los bosques.

Un bosque es un ecosistema consideradamente complejo, está formado por plantas, animales, hongos, etc. Es uno de los recursos naturales más importantes, ya que son receptores de dióxido de carbono (CO2), estos lo absorben y lo expulsando como oxígeno (O2), dicho esto podemos entender  que una de sus funciones es purificar el aire, además que nos brindan recursos ecosistemáticos necesarios para nuestra supervivencia, como lo son la captura y filtración de agua, formación abundante de materia orgánica o materia prima, conservación de especies endémicas (tanto en animales como en plantas), nivelación del cambio climático, entre muchas más, pero, ¿son eternos?

Deberíamos de preguntárno7slo más seguido, ver esta realidad cuando sin pensarlo, incendiamos “por accidente” unas hectáreas de bosque para el crecimiento de infraestructura, cuando deforestamos más hectáreas para hacer monocultivos de aceite de palma porque la oferta y demanda aumentó. Retomando la introducción, que dirían los ancestros si ven el mundo hoy en día, se decepcionarían sin duda, porque con trabajos vemos áreas verdes en la ciudad, cada vez van reduciéndose más estas áreas.

Estipuladamente para el 2050 ya no habrá planeta en donde vivir, ya no habrá bosques que purifiquen el aire, ya no habrá animales ni plantas que son necesarios para completar un ciclo de vida necesario, ya no habrá agua en perfecto estado corriendo entre la tierra, pero que raro que hoy en día más de la mitad de los países del mundo ya se están poniendo “la verde”, donde cada vez vemos más cosas biodegradables, menos contaminantes.

Me atrevo a decir que gracias a las evidentes consecuencias, hemos tomado consciencia a la mala, no nos queda de otra más que adaptarnos al nuevo mundo ecológico propuesto por la sociedad a su conveniencia, al igual que las empresas, que ya es costumbre manejarnos, venden más y más, hasta cierto punto que no sabemos si lo que en verdad compramos es ecológico.

No dejemos que nuestros prejuicios sean contradichos ante una utopía falsamente propuesta, investiguemos en más de una fuente informativa, no nos dejemos influenciar por los influensers de pacotilla, dejémonos guiar por la razón, por nuestra motivación de querer un verdadero cambio, construir una utopía comunitaria buscando el bien común, y en este bien común, entra nuestro hogar, la madre tierra.

...