Los homínidos, especie que antecede a las especies humanas, evolucionan por un período entre 5 y 7 millones de años.

Apunte 2

El sentido de lo Humano

Información tomada de Humberto Maturana^[1] 

Hace aproximadamente 15 mil millones de años una serie de explosiones conocida como el Big Bang dio origen a nuestro universo. La historia de nuestro planeta podría entenderse de la manera siguiente^[2]:

[pic 1]

Del cuadro anterior debe destacarse:

• La aparición de los mamíferos es reciente, apenas tendrán 200 millones de años.
• Los primates que intentan la marcha bípeda tienen una antigüedad de 4.5 millones de años.
• Los homínidos, especie que antecede a las especies humanas, evolucionan por un período entre 5 y 7 millones de años.
• Las primeras especies humanas aparecen hará unos 3 millones de años.
• La última especie humana que se extinguió es el homo neandertal, hace aproximadamente 30 mil años. Su existencia fue de alrededor de 300 mil años.
• Nuestra especie es reconocida como homo sapiens, inicia su existencia hace aproximadamente 200 mil años –hay quien señala que tiene 150 mil años-.

El salto cualitativo.

Humberto Maturana considera que en este proceso  evolutivo del ser humano hay algunas dimensiones que deben ser valoradas.

1. Las especies humanas han estado presentes en el planeta desde hace por lo menos tres millones de años.
2. Se conoce como hominización al período que transcurre entre el primate y la primera especie humana, el cual tiene un período aproximado entre cinco y siete millones de años.
3. En el inicio de la evolución del primate al ser humano está una serie de emociones y  sentimientos que surgen de la relación entre la madre y el crío; Maturana considera que se va retrasando paulatinamente la emancipación del crío, hasta generar una relación diferente con el crío.

Precisamente es esta propuesta del surgimiento de las emociones y sentimientos donde Maturana ubicará el origen de nuestra especie, considera que “En esta historia, la emoción fundamental es el amor como dominio de las acciones que constituyen al otro como un legítimo otro en la convivencia^[3].” El amor será la emoción que propiciará un cambio en la conducta que dará lugar a nuestra especie. Por el amor el otro aparece como alguien diferente, distinto. Por el amor, con el otro se inicia una convivencia diferente, lo que hará surgir la necesidad de comunicarse con el otro y entonces aparecerá el lenguaje.

1. El lenguaje es otro elemento fundante de la especie humana. Por el lenguaje se generan inicialmente acciones consensuadas, acuerdos tácitos sobre acciones básicas, pero que van dando lugar a redes de conversaciones entre los miembros de un mismo clan. El lenguaje posibilita operaciones y genera intercambio de ideas, sobre dominios diferentes, entre los cuales sobresale el de las emociones. Amor y lenguaje serán elementos fundantes que darán lugar a la especie humana. Apunta Maturana:

“Los seres humanos nos originamos en la historia de los primates bípedos a que pertenecemos, hace por lo menos tres millones de años atrás con el origen del lenguaje y en el vivir en el entrelazamiento del "lenguajear" y emocionar que llamamos conversar^[4] .”

Cabe destacar que el lenguaje genera operaciones y redes de conversación consensuadas, esto es, que tienen validez al interior del propio clan, lo cual hace que se modifiquen las relaciones, y surjan nuevas alternativas en la vida del propio clan.

El lenguaje tiende a generar acciones recursivas, esto es, no solo da lugar a operaciones y a redes de conversaciones, sino que a su vez las operaciones mismas modificarán la estructura del lenguaje, que entra en un período de evolución producto de la acción misma del lenguaje.

Maturana considera que “en el fluir del coemocionar de los miembros del grupo particular de primates bípedos en que surge, subordina todo el hacer humano al emocionar, incluso la razón.” La tesis de Maturana sostiene que en el origen de la especie humana, todo quedaba sujeto al coemocionar del propio clan, incluso la razón.^[5] El éxito de las acciones racionales estará en que se rigen por el coemocionar del propio clan.

“Ver esto es necesario para la cabal comprensión de lo humano y lo racional porque, aunque parezca extraño, al hacemos cargo de la participación de las emociones como fundamento de cualquier sistema racional en el fluir del conversar, obtenemos el verdadero valor de la razón en la comprensión de lo humano. Y esto es así, porque debemos darnos cuenta de nuestras emociones y conocerlas en su fluir, cuando queremos que nuestra conducta sea en efecto racional desde la comprensión de lo racional y desde la libertad reflexiva que da el conocer los deseos que a uno lo guían.”^[6] 

1. El entrelazamiento entre emocionar y lenguajear da lugar a dos dimensiones humanas adicionales, la responsabilidad y la libertad:

“a) somos responsables en el momento en que nos damos cuenta, en nuestra reflexión, de las consecuencias de nuestras acciones y de si queremos o no queremos esas consecuencias, y si actuamos de acuerdo a ese querer o no querer; y

b) somos libres en el momento en que nos damos cuenta -en nuestras reflexiones sobre nuestro quehacer- de si queremos o no queremos nuestro querer o no querer las consecuencias de nuestras acciones, y desde allí actuamos de acuerdo a nuestro querer o no querer nuestro querer.”^[7]

1. En la generación de la especie humana los valores van a tener un papel central, a partir de la libertad se podrá optar por un tipo específico de relaciones en la convivencia. Aquí el texto de Matura es muy claro, por lo que se hará una larga cita del texto que se viene comentando.

“¿Qué son los valores?^[8] 

Los valores son distinciones de configuraciones relaciónales en la convivencia, que obtienen su legitimidad desde el amor.

Todos los valores referidos en la literatura se fundan en una emoción fundamental: el amor, y el amor es el dominio de las acciones que constituyen al otro como un legítimo otro en la convivencia. Honestidad, cooperación, respeto, lealtad, generosidad, responsabilidad, justicia...

Los valores de la vida cotidiana se fundan en el amor. El respeto se da en la aceptación del otro como un legítimo otro en la convivencia, y donde hay colaboración que se da sólo en el respeto mutuos, desaparecen la arrogancia y la obediencia. Todos los valores tienen que ver con el amor y son expresión de la armonía social, pues lo social se funda en el amor. ¿Cuándo la valentía es valentía y cuándo es locura? El enfrentar un peligro en un contexto que le da a ese enfrentamiento un significado social, es valentía. El enfrentar un peligro sin fundamento social, es locura. En la medida en que tiene un fundamento social, la valentía está fundada en el amor. Pero, ¿los valores se aprenden o se enseñan? Ni lo uno ni lo otro se viven o se niegan, porque cuando se habla de ellos, ya no están o se hace literatura.

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