Materiales

Katalina, la construcción o reconstrucción de las ciudades españolas, algunas veces, fue sobre los antiguos vestigios de las culturas originales. En el caso de Nueva España, Cortés mandó construir la capital de virreinato sobre las ruinas que la destrucción española había dejado, utilizando materiales autóctonos, a veces las mismas piedras que habían quedado de los edificios prehispánicos. Por ser una zona volcánica, la mayor parte de los edificios construidos entre 1521 y más adelante, se realizaron con piedra volcánicas, muy abundante en la zona, la piedra llamada tezontl , o tezontle (espuma de sangre en nahuatl) que es una hermosa piedra roja muy porosa y adecuada para la construcción. La piedra chiluca de un gris blancuzco también fue muy utilizada en estas construcciones.

Algunas fachadas se adornaban con azulejos fabricados en Puebla; las ventanas se aseguraban con rejas de hierro forjado.

Las grandes edificaciones religiosas casi siempre tuvieron fastuosas fachadas de cantera de la zona donde fueron construidas, como la rosada de Zacatecas, la verde de Guanajuato, la color amarillo sepia de Querétaro y muchas variantes más.

Las casas habitación del común de los habitantes se siguieron construyendo con adobe, tejas rojas de barro y estructuras de madera. Así como los primeros conventos que en su mayoría presentan basamentos de piedra y los muros y bóvedas

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