Problema de drogas

Millones de dólares confiscados, más de 400 muertos solo en este año por esta causa, muchos de ellos, adolecentes; el problema de las drogas en estos días se ha vuelto y es, preocupación de muchos, ya que estos delincuentes usan adolecentes para esparcir sus “productos”, siendo este el mayor miedo, tanto del gobierno como de los propios padres de familia, ya que siendo México un país joven, refiriéndome a que ahí más jóvenes que adultos mayores, existen más posibilidades de que este sector de la población caiga en este problema, y que este mismo se agrave de sobremanera.

Algunos se preguntaran, ¿Por qué jóvenes?, ¿Qué tenemos los adolescentes, que estos delincuentes nos usan para su comercio?, esas preguntas son fáciles de contestar, ¿Por qué jóvenes?, por el simple hecho de que nuestra mente aún no está formada al 100% y tomamos cualquier información, muchas de las veces no distinguimos entre si es buena o es mala, solo la tomamos y la asimilamos, ¿Qué tenemos los adolescentes? Justamente el detalle anterior, nuestra mente aún es muy maleable ante cualquier información ya sea buena o mala.

Este problema se ha llevado muchas vidas, desde asesinados por ya no querer hacerlos más, hasta muertes por la sobredosis, causada por los efectos que las drogas causan en el cuerpo humano; este tema no es un juego, cada uno d nosotros es vulnerable ante estas sustancias, ya que pueden llegar a nosotros por muchos lados como por ejemplo de supuestos amigos, y digo supuestos, porque aquellos “amigos” que nos causan daño y buscan hacer algún mal a los demás no se le puede llamar amistad, una amistad es aquella en donde ambas partes se ayudan y se apoyan, no los que dañan o lastiman, también pueden llegar de personas que sol se dedican a vender estas sustancias, las cuales normalmente se ven fuera de las escuelas para incitar a los alumnos a probarlas. Juzguen ustedes mismos su entorno, aprendan a distinguir “amigos” que brindas algo positivo a aquellos que buscan algún mal para nosotros mismos o para los demás.

Como todo en esta vida, nosotros tenemos la última palabra, es nuestra decisión, hacer esto o hacer aquello, pero tomen en cuenta mis palabras, no se dejen llevar por el “porque él lo hace, yo también”, o por aquellos que condicionan su amistad a cambio de algo que en ocasiones es perjudicial para alguien, sean conscientes de quienes los rodean, de quienes influyen en su vida.

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