RIONEGRO Y SUS CARACTERISTICAS
Enviado por andre070_111 • 12 de Agosto de 2012 • 2.602 Palabras (11 Páginas) • 671 Visitas
RIONEGRO – SANTANDER
Andrea Ximena Ramírez
Frank Roberto Zúñiga
MARCO REFERENCIAL
El Valle de los Cañaverales de Santa Bárbara fue descubierto por Antonio Lebrija en una de sus travesías por el río que lleva su nombre, cuando por curiosidad decidió buscar el origen de una vertiente que mostraba aguas de color oscuro pero con gran transparencia, así fue como encontró un extenso valle cubierto de cañaduzales y habitados por alguna de las tribus Guanes.
Años después, comenzó a ser poblado por viajeros que enseñaron a los aborígenes a adecuar la tierra para la actividad agrícola que siglos después los llevó a convertirse en productores de tabaco, caña panelera, cacao y café, obteniendo el título de Capital Cafetera del Departamento de Santander.
Rionegro fue fundado el 5 de Mayo de 1805, por José Gutiérrez Calderón, Enrique Puyana, Juan Andrés Ortiz y los hermanos José y Facundo Mutis. Recibiendo el nombre de Santa Bárbara de Rionegro.
De ser una pequeña población de 2165 habitantes en 1843, este distrito parroquial experimentó un ascenso demográfico extraordinario durante la segunda mitad del siglo XIX, de sus 4013 habitantes en 1851, saltó a 17608 en 1896, convirtiéndose en el segundo municipio más poblado en el Departamento de Santander, solo superado por Bucaramanga.
Al poco tiempo por influencia de la iglesia católica es llamado Rionegro de la Inmaculada Concepción y años más tarde se le conocería con el nombre de Municipio de Rionegro.
RESEÑA HISTORICA
La historia del municipio de Rionegro (S) se desprende en la época primitiva habitada por tribus relevantes, que colaboraron en el desarrollo agropecuario del municipio como fueron los indígenas Yariguies y al pasar el tiempo, llegaron los españoles, quienes civilizadamente ocuparon estas tierras rionegranas extensas, cubiertas de espesa selva, con peligrosas fieras y habitantes muy fuertes.
En el siglo XVIII, empieza la conquista del nuevo nombre al municipio de Rionegro, a través del señor José Lozano Mantilla, quien adquirió tierras, que fueron trabajadas y le daban el límite más cercano, para desprenderse de la parroquia del municipio de Girón.
El 27 de marzo de 1.805 el Virrey Antonio Amar y Borbón dio su consentimiento positivo, declarando que el feligresado de Rionegro se separaba de la jurisdicción de Bucaramanga y se constituía en parroquia independiente posesionada por el bachiller Manuel de Sierra Quintana.
En 1.822 se construyó la primera escuela y se estableció el cementerio.
El 27 de mayo de 1.828 el Libertador Simón Bolívar visita a Rionegro, acompañado del General Oleary, el Comandante Wilson, el Teniente Andrés Ibarra y el Doctor Moor, celebrándose una gran fiesta el 28 de mayo del mismo año.
De 1.863 a 1.870 el padre Francisco Juan Nepomuceno Antonio Ramos, empezó y terminó la parroquia, a la cual la cambiaron de nombre, es decir, ya no se llamará Santa Bárbara de Rionegro, sino Rionegro de la Inmaculada Concepción que a nombre de la Santísima Virgen se encabezaron todos sus escritos y partidas de nacimiento, matrimonios y defunciones.
En el siglo XIX el territorio de Rionegro fue aumentando, con la anexión del feligresado del Valle de Cañaverales, que al estar fundada la Villa se posesionó como párroco el padre jesuita Mateo de Villalobos, y actuando como teniente de Gobernador el Capitán Castillo y Quijano nombró a los miembros del primer cabildo a Juan de Villalobos y José Fernández como alcaldes ordinarios y Alonso Ruiz de Villamizar como alguacil mayor.
En el año de 1.898, el vecindario había solicitado y obtenido del obispo de Pamplona la licencia para edificar otra capilla, debido a la fuerte inmigración de comunidades hacia Rionegro partiendo por el camino de Puerto Wilches, originado por los negocios de las quinas, el café y el transporte. Antes de finalizar el siglo, Rionegro se convirtió en el mayor productor nacional de café, motivados por el padre Ramos, los rionegranos llenaron sus haciendas en la siembra de tan importante producto agrícola.
Ya en julio de 1.825 el párroco había reseñado en su Libro de Bautismos la llegada a la población de don Pedro Narciso García y sus seis hijos, fundadores de una familia que a finales del siglo se destacaría no sólo entre el conjunto de los hacendados cafeteros sino en la política regional. Uno de ellos, don Gabriel García Ordóñez, administró la hacienda Garcilvania después de contraer matrimonio con la pastusa Eudoxia Burbano.
Su hijo Fernando García Burbano expandió los cafetales de su familia a las haciendas La Virginia, El Edén, Los Vados, Piedras, Porvenir, El Diamante y Hayamonte; llevando un diario personal (aún inédito) que es una fuente importante para la historia política del municipio. Sus hijos, y los de su hermano Sinforoso, formaron las dos familias García Cadena que tanto brillo tuvieron en los cuerpos gubernamentales de Santander y del país. Don Tirso García Burbano fundó las haciendas La Carolina y El Líbano, así como la familia García Peña.
La inversión alemana produjo la hacienda Berlín, cuya extensión la hizo legendaria. De ser pequeña población de 2.165 habitantes en 1.843, este distrito parroquial experimentó un ascenso demográfico extraordinario durante la segunda mitad del siglo XIX, de sus 4.013 habitantes en 1.851 saltó a 17.608 en 1.896, convirtiéndose en el segundo municipio más poblado del departamento de Santander, sólo superado por Bucaramanga. Este vertiginoso crecimiento está ligado a la vigorosa expansión de los cultivos de café que convirtieron a Rionegro en uno de los mayores productores del país pues incluso en 1.927, cuando Santander ya había sido desplazado por Antioquia y Cundinamarca como primer productor nacional, seguía siendo el segundo municipio mayor productor del país después de Fredonia, con 6’321.900 matas sembradas. El censo de 1.896 mostró no sólo el crecimiento intercensal de Rionegro del 352% respecto al año 1.870, sino además la fuerte participación de los jornaleros en la inmigración; quitando a los menores de 16 años, los jornaleros constituían el 52% de la mano de obra de los cuales la quinta parte eran mujeres. Este hecho produjo dramática crisis social en Rionegro con ocasión de los precios del café que se inició en 1.896 y se convirtió en desastre en 1.899, justo cuando se inició la Guerra de los Mil Días, lo cual puede contribuir a explicar el
...