Suelos cohesivos y no cohesivos

Cuadro Comparativo de Suelos Cohesivos y No Cohesivos

Suelos Cohesivos

Suelos No Cohesivos

Contiene pequeñas partículas y suficiente arcilla para que el suelo se adhiera a sí mismo.

Están formados por partículas gruesas como la arena o la grava.

Presenta menos probabilidades de que se produzca un derrumbe.

Se necesita llevar adelante mayores medidas para prevenir un derrumbe, utilizando un sistema de medición llamado “fuerza de compresión” para clasificar cada tipo de suelo. Esta es la cantidad de presión necesaria para que el suelo colapse.

Soporta una compresión de hasta 1.5 toneladas por pie cuadrado o más.

Su compresión se define hasta los 0.5 toneladas por pie cuadrado o menos.

En cuanto a la compactación, se produce por la reorientación y por la distorsión de los granos y sus capas absorbidas.

Se compacta mediante la vibración, teniendo en cuenta la granulometría del suelo. La eficiencia de la compactación de logra aumentando la presión a medida que el peso específico y la resistencia aumentan.

Su composición influye mucho en las propiedades y estructuras del mismo.

La composición del suelo de grano grueso, influye relativamente poco en sus propiedades geotécnicas.

La estructura que se forma es debida, principalmente, a las fuerzas iónicas actuantes entre las partículas del suelo.

Su estructura se forma debido a las fuerzas gravitatorias actuantes en una estructura granular simple.

El tamaño de las partículas de este tipo de suelo hace que las fuerzas interparticulares actuantes superen las fuerzas gravitatorias actuantes sobre cada partícula.

Cada partícula toca a otra  formando un esqueleto granular estable aunque no haya fuerzas de adherencia entre ellas.