Transtornos Dismorficos Corporales

INTRODUCCIÓN

El trastorno dismórfico corporal o síndrome de distorsión de la imagen, es un cuadro psicopatológico anteriormente conocido como dismorfobia, y luego reconocido como trastorno dismórfico corporal, consiste, según los especialistas, en una preocupación exagerada por algún defecto inexistente en la apariencia o una valoración desproporcionada de posibles anomalías físicas en una persona aparentemente normal.

De acuerdo a los aspectos históricos de la dismorfofobia se expresa que desde que el ser humano tuvo consciencia de sí mismo ha sufrido temores poco realistas o infundados sobre su propia deformidad o fealdad. De hecho las investigaciones antropológicas y la historia han puesto de manifiesto la importancia estética y simbólica que el ser humano ha dado a su cuerpo desde los tiempos más remotos.

El término dismorfofobia aparece hace más de 100 años en Europa, exactamente en 1886 acuñado por un psiquiatra italiano llamado Morselli en el siglo XIX, acuño el término “Dismorfofobia”, orientándolo desde la raíz “Dismorfia”, la mujer más fea de Esparta; y la definió como “la idea obsesiva y desoladora, de deformidad corporal”,. Este autor describía la dismorfofobia como una idea obsesiva y desoladora de deformidad corporal y la clasificó como una paranoia rudimentaria o monomanía abortiva que afectaba de forma primaria o secundaria la integridad del individuo. Durante los últimos años del siglo XIX y primeros del siglo XX, varios autores abordan el problema de la fealdad y sus consecuencias.

En aquel entonces, la investigación científica en ámbito de la psiquiatría, la psicología y las patologías mentales se encontraban en una etapa de profundas reformulaciones y desarrollos innovadores. Uno de los psiquiatras científicos modernos, el alemán Emil Kraepelin, propuso que las enfermedades psiquiátricas son causadas principalmente por desórdenes biológicos y genéticos. Todas estas teorías dominaron el campo de la psiquiatría a principios del siglo xx.

Esta curiosa enfermedad también fue conocida como El "Complejo de Tersites" relacionado con el mito del hijo de Agrio, Tersites, quien según se cuenta era el griego más feo y el hablador más imprudente de Troya siendo asesinado por tal concepto por Aquiles. En 1962 se utilizaría la terminología "Complejo de Tersites"4 para denominar a aquellas personas que padecían de un real aunque leve defecto físico, pero que al contextualizarse en la búsqueda de la perfección estética impuesta por la sociedad vivían su defecto de una manera traumática.

Durante la historia destacarían las prácticas del neurólogo austriaco Sigmund Freud, padre del psicoanálisis. Quien documentaría el primer caso de dismorfofobia, como uno de sus más recordados casos clínicos. Sería el trastorno del aristócrata ruso Sergéi Pankéyev, llamado “El hombre lobo” (Der Wolfsmann) para proteger su integridad.

El ruso sufría una grave neurosis y pesadillas recurrentes que le impedían valerse por sus propios medios. Pankejeff manifestaba una excesiva preocupación por su nariz a pesar de tener un exceso vello corporal. Pankéyev incluso llegó al punto de evitar exponerse en público.

Freud interpretó los sueños del paciente concluyendo que estaban relacionados a un trauma sexual de su infancia.

Freud dijo que al comunicarle el origen de su problema Pankeyéff se curó completamente.

Sin embargo, hay personas que aseguran que Freud jamás dijo que el llamado "hombre de los lobos" se curó cuando le manifestó las causas de su enfermedad.

Medios manifiestan que el hombre nunca se curó, y siguió siendo tratado hasta su muerte, en la que su problema empeoró. Pankeyév cobraba un sueldo mensual a cargo de la Fundación Sigmund Freud con el propósito de mantenerlo oculto en Viena para que el fraude no se hiciera público.

En el año 1980, la Organización Mundial de la Salud reconoce la dismorfofobia como un cuadro somatomorfo atípico y diez años más tarde en 1990, es incluido en el Manual Diagnostico y Estadístico de los Trastornos Mentales. En la versión revisada del D.S.M IV de 2002 la dismorfofobia se describe como Trastorno Dismórfico Corporal y se lo incluye dentro de los llamados Trastornos Samtomorfos.

PROBLEMÁTICA

El trastorno dismórfico corporal es un trastorno más frecuente de los que nos pensamos, y aunque según los datos afecta al 1% de la población, este porcentaje va en aumento. También es frecuente que haya personas que lo padezcan y que no lo sepan. Suele aparecer en la niñez o en la adolescencia y habitualmente llega hasta la edad adulta. Es importante detectarlo para superarlo, sobre todo en la infancia y en la adolescencia para que no genere un desequilibrio emocional.

Las personas con este trastorno tienen una preocupación en demasía e injustificada por algún defecto físico que afecta a alguna parte de cuerpo por ejemplo a los rasgos fáciles, a la forma de los brazos, las piernas, el tamaño de la cabeza, la forma de la nariz, las orejas…etc.

El trastorno dismórfico corporal (TDC), se presenta como un problema que se desconoce, puesto que no existe la teoría suficiente que brinde una definición de manera clara y exacta de este trastorno, algunos autores lo definen como la distorsión propia de la imagen corporal, consiguiendo una percepción exagerada de algún aspecto físico con el cual no se siente a gusto la persona.

Por otra parte, la sociedad sigue un patrón de belleza, cuyo impacto es cada vez mayor; de tal manera que los resultados que se obtienen son desfavorables, las personas por conseguir una figura esbelta y perfecta se someten a múltiples cirugías estéticas hasta llegar a un punto donde son totalmente adictos al quirófano, pero no lo reconocen. De igual forma observando las estadísticas este trastorno no solo se presenta en mujeres pues los hombres no escapan de él; existe un 40% de población masculina preocupado por su apariencia, en cambio la población femenina representa un 85% exponiendo así que la mujer es más vulnerable en este sentido.

Por tanto, observando el trastorno dismórfico corporal como un problema de gran importancia en todo el mundo, se presenta la necesidad de investigar todo lo referente acerca del mismo pues es vital difundir la Información necesaria por medio de un documental fotográfico que es un género atractivo a través del cual se puede captar la atención del espectador sobre este trastorno.

Comprendemos que el trastorno dismórfico corporal no solo se aplica en las personas que se han sometido a diferentes cirugías plásticas, sino que también

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