UNA NOCHE INIMAGINABLE

UNA NOCHE INIMAGINABLE
La noche siguiente de celebrar con mis compañeros de trabajo, amigos y pocos familiares mi cumpleaños número veinticinco, llegue de un largo día de trabajo a mi apartamento, cansada con la intención de irme  a dormir lo más pronto posible. Me sumergí en el jacuzzi para darme un largo baño y despejar mi mente de la pasada noche de copas y los temas laborales de hoy. Sin darme cuenta llevaba un largo rato sumergida en la tina cuando escuché una voz susurrando mi nombre “Jean”, salí de la tina en busca de aquello que me llamaba, me levante cogí una toalla y me cubrí con ella; observe detalladamente el baño y me dispuse a salir a revisar todos los rincones del apartamento. Luego de asegurarme que no había nadie más que yo despejé mi mente de esos tontos pensamientos. Mientras tendía la cama aparte un breve momento la vista al pasillo cuando la luz se apago, me recorrió un cosquilleo escalofriante que mi hizo erizar los vellos de todo el cuerpo. Me quede de pie mirando fijamente la puerta y caí inconsciente por unos pocos segundos. Finalmente desperté, estaba tendida en el piso me preguntaba que me ocurría, mientras me examinaba rápidamente toda la extensión de todo mi cuerpo para ver si no me había ocurrido nada. Finalmente me fui a dormir después de un rato dicidiendo dejar de lado lo que había ocurrido.

  Me desperté a las 2 de la madrugada con un destello de luz fuerte, la bombilla de mi habitación estaba encendida. Mire aterrada todo el cuarto y no vi señales de algún intruso, decidí llamar a “Ethan” el era un amigo y compañero y compañero de trabajo que había conocido desde la universidad. Adormecido me respondió el teléfono y le dije que estában sucediendo cosas extrañas en mi casa, le rogué que viniera, me pregunto si podía ir con un amigo que era un conocido y se iba a quedar la noche con él, en un principio me quería negar pero recordé lo sucedido y accedí; media hora más tarde escuche sonar el timbre y salí corriendo a abrir pero me detuvo por unos segundos el hecho de que la luz del pasillo estuviera encendida de nuevo, voy hasta la puerta y me dispuse a mirar por el ojo mágico de la puerta cuando vi a Ethan y su amigo, le abrí y le abrace agradeciéndole que viniera me concentre tanto en lo que había pasado que se me olvido por completo presentarme a su amigo. Le conté los hechos y me consoló, le pedí que se quedara en mi casa esa noche y el accedió.  Horas después, cuando pude conciliar el sueño, sentí un frio aterrador en la habitación e invadió mi cuerpo, la ventana estaba abierta, me desperté y vi que ethan no estaba. Cerré la ventana sintiéndome de nuevo con miedo, insegura, sin nadie a quien recurrir. Empiece a llamar a mi amigo y el no respondió.

Salí de la habitación, recorrí el pasillo y llegué a la puerta del baño que estaba a mitad de este, abrí la puerta, lo que vi fue lo más horrible y asqueroso que había visto en toda mi vida, había sangre por todas partes, un brazo estaba en el piso y el otro colgaba de la pared, habían viseras por todo el baño; trate de calmarme pero fue muy sorpresivo camine de espacio hasta la bañera para identificar de quien era el cuerpo y allí estaba el cuello ethan degollado, no pude aguantar más y grite lo más fuerte que pude y arranque a correr cuando iba saliendo del baño vi al amigo de ethan, su ropa estaba estaban ensangrentadas y su ropa llena de algo que parecían como pelos de un animal, observe en su mano un cuchillo y corrí hasta mi cuarto, donde nerviosamente cerré la puerta con seguro y empecé a llorar agachada en posición fetal, bloqueando la puerta deseando que esto fuera un sueño. Escuche esa voz que me llamaba por mi nombre cada vez más fuerte “jean ¡jean!” mientras el pateaba y golpeaba con todas sus fuerzas la puerta. Me tape los oídos, cerré mis ojos y grite “¡Déjenme en paz!”, cuando repentinamente detalle unos pies con uñas largas, peludos y ensangrentados en vez de los míos, trate de alzar la mirada pero caí inconsciente por segunda vez, lo último que recuerdo de esa noche es al chico arrinconado en una esquina y amenazándome usando un cuchillo, con lagrimas en sus ojos y en ese instante todo se volvió negro…

Cuentan los vecinos que al momento en que llego la policía llamados por ellos cuando escucharon unos gritos dentro del departamento, encontraron la escena del crimen, entraron al baño y el cuarto pero no encontraron las victimas y nunca descubrieron quien fue el agresor…

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