VIH como el Ébola

Tanto el VIH como el Ébola atacan partes del sistema imunológico, el VIH ataca a los linfocitos Th4; se llama así T porque su maduración se hace en el timo, h porque viene de ayudante en inglés y 4 porque la proteína de reconocimiento de antígenos que tiene en la membrana celular es la CD4. Este importantísimo linfocito es el “general” del sistema de defensa del cuerpo y sin este los soldados no saben cómo hacer las defensas respecto a los enemigos que invaden el cuerpo, lo que produce a largo plazo que cualquier otro virus, bacteria u hongo más “débil” ataque ese cuerpo debilitado en defensa y muera.

El Ébola ataca los macrófagos, monocitos y plaquetas que son las celulas que se llevan a los malhechores (antígenos) a los cuarteles generales (los ganglios linfáticos) y se los presenta a los linfocitos y ellos hacen retratos de los demás malhechores (presentación de antígenos bacterianos, virales, etc) a través de las proteínas de membrana CD4, CD8 (hay como mil) y los distribuyen o comunican a los demás macrófagos, monocitos y demás celulas de defensa para que los atrapen y los descompongan en los lisosomas y sigan presentando los antígenos a todas las celulas de defensa hasta que acaben con el enemigo. El Ebola además ataca el hígado, bazo, páncreas, ganglios linfáticos, ovarios y testículos lo que produce una reacción en cadena lo que produce moléculas que dilatan los vasos sanguíneos para que vayan más macrófagos a apoyar a sus compañeros, lo malo de esto es que esa masiva dilatación de vasos sanguíneos hace que la sangre se salga por las paredes de estos vasos y ante la falta de plaquetas no se pueden reparar eficientemente estas rupturas y la persona se desangra, en su fase final hay un efecto paradójico con coagulaciones vasculares por todo el cuerpo una de ellas puede ir al cerebro, pulmones o corazón y la persona muere.

Las organizaciones de salud mundiales tratan de descubrir una vacuna para este par virus mortales, pero ¿por qué no han podido descubrir una vacuna o un tratamiento efectivo? La respuesta está en los “defectuosos controles” de replicación de la carga viral lo que permite mutaciones a cada momento cuando estos virus “secuestran” las maquinarias celulares de replicación, lo que nivel de evolución una riquísima variabilidad genética y permiten “mutantes” virales diferentes cada vez que se replican y esto a su vez no permite que ni los científicos creadores de vacunas, ni los sistemas inmunológicos que atacan tengan una forma definida y así poder neutralizarlos.

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