La dislexia de maría

UN PEQUEÑO CUENTO SOBRE LA DISLEXÍA DE MARÍA

Por:  Rubén Torres Osorio.

María es una niña alegre y vivaz quien comenzó su pasantía en la escuela primaria. el tiempo con los niños ha terminado y está feliz de contarles a sus seres queridos que se fue a una escuela para adultos.

Pero a los pocos días, María cambió y en casa, toda su curiosidad por los libros parecía haber desaparecido. Continuó pidiéndole a sus padres que le leyeran cuentos todas las noches, pero ya no lo encontraban en casa con sus cuentos favoritos.

Alicia, preocupada por el cambio repentino que ha sufrido su hija, decide ir al colegio a hablar con el tutor de María para saber si está teniendo problemas en clase con sus compañeros o con sus asignaturas o no.

Cuando llegó a la escuela, la maestra de María la estaba esperando en la puerta del salón. Alicia se da cuenta de que no es la única que nota este cambio en María y se prepara para venir a hablar de lo que está pasando.

- Hola soy Maite – se presenta la tutora de María. - Me gustaría hablarte sobre el comienzo del curso de  tu hija. Pero veo que también te has dado cuenta de que algo anda mal.

Bueno, últimamente no está tan interesada en los libros como antes.-explicó Alicia nerviosa.-Además, lleva unos días cometiendo errores al nombrar o escribir palabras y eso está provocando que hable menos. como antes. Al principio pensé que era por la ansiedad de ir a la escuela primaria, pero me empezó a preocupar mucho.

Mientras María jugaba en el patio con algunos de sus amigos, ignoró la conversación de los adultos. Uno de las niñas de su clase se acercó y le dijo a otra que estaba sentada:

 -Mira, la seño ha llamado a la madre de María porque no sabe leer.

las dos miraron a María y se rieron, pero ella fingió no escucharlas. Eso no quiere decir que no le doliera, y con la cabeza baja, volvió a clase a esperar a su madre.-Te has pasado con María – le dice una de las niñas que jugaba con ella.

-¿Por qué? ¿Por decir la verdad?- contesta desafiante la niña.- No sabe leer y punto.

- ¡Sí, sabe! Solo necesita un poco más de ayuda que los demás. - La amiga de María estaba enojada y frustrada. - Verás al final del curso como lee mejor que tú.

-Si, si… lo que tú digas. - le contesta el niño mientras recoge sus cosas y se marcha. - Ya lo veremos.

Mientras tanto, en la clase Alicia y Maite siguen hablando sobre el pequeño problema que ha surgido con el comienzo de curso.

Maite se da cuenta de que María le está escuchando y le invita a pasar para explicarle que tienen que averiguar y solucionar, con ayuda, ese pequeño problema que tiene con la lectura.

-¿También piensa que no se leer? – pregunta triste la pequeña.

-No cariño, no es eso. Claro que sabes leer- Le contesta su madre con dulzura.

– Solo es, que te cuesta un poco más que a los demás. – le explica su maestra. - Pero eso tiene solución. Verás como con un poco de ayuda terminarás leyendo igual que los demás.

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