Profesora de historia. El estudio de la cronología
Enviado por Deboraquiroguin • 8 de Marzo de 2023 • Apuntes • 1.870 Palabras (8 Páginas) • 137 Visitas
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2_ ¿Cuáles son los problemas que se presentan ante cada uno de ellos?
El estudio de la cronología presenta algunos problemas fundamentales, aparentes discrepancias que se da entre unos y otros terrenos de la cronología:
Rómulo probablemente nunca existió, su biografía es una compleja muestra de la leyenda y cuento popular, especulaciones anticuaristas y componentes de propaganda política.
Numa Pompilio, un estereotipo pacífico y devoto.
Tulio Hostilio: un estereotipo belicoso y fiero. Sus reinados aparecen como una mezcla de leyendas y una reconstrucción anticuarista consiente.
Anco Marcio: personaje más histórico que sus procesadores
Tarquino Prisco: más históricos que sus procederos.
Servio Tulio: versiones muy distintas cuentan sobre sus orígenes y educación.
Tarquino el Soberbio: aparecen inconsistencias entre los periodos cronológicos sobre quien fue realmente padre de Tarquino el Soberbio.
3- ¿Por qué es discutible la idea de los 7 reyes? Destaque los principales debates.
La lista de los 7 reyes de Roma tiende a sufrir algún tipo de ajuste, o bien suponer que hubo más de siete reyes o bien tener que reducir la cronología. La tradición dice que el periodo monárquico duro aproximadamente dos siglos y medio, desde la fundación de la ciudad en 754/753 a.C hasta la caída de los Tarquinos. Los testimonios arqueológicos dan a entender que la formación de la ciudad-estado se produjo a finales del siglo VII. Existen dos formas de salvar esta dificultad una es suponer que los monarcas ostentaron el poder durante 120 años, en vez de 240. Otra manera es dividir el periodo monárquico en dos partes: los primeros reyes pertenecerían a la fase preurbana, mientras que la trasformación de la comunidad (siglo VII) habría concedido con la llegada de los Tarquinos.
En realidad, los desarrollos institucionales de los primeros reyes se habrían producido indudablemente antes de que finalice el periodo monárquico. No pueden ser anteriores a la formación de Roma en cuanto a ciudad-estado organizada, de hecho, constituyeron parte integrante de ese proceso formativo. En la medida que sean auténticas, las obras de los primeros reyes pertenecen al periodo histórico de la ciudad-estado, no a la época preurbana.
Una vez que se deja sentado que la formación ciudad-estado surgió durante la década del siglo VII a.C se debe concluir que los primeros reyes, deberían situarse en el periodo comprendido entre los años 625 y 570 a.C.
Otro dilema es la llegada de la dinastía de los tarquinos; se presenta desde distintos puntos de vista (para algunos especialistas)
1_ Constituye el comienzo de la época histórica de Roma relegando el periodo anterior al terreno de la leyenda.
2_ Destacan el carácter primitivo de la fase anterior, y lo contraponen con la prospera y refinada cultura urbana introducida por los tarquinos
3_ Hacen hincapié en el elemento técnico, según esta teoría, la a ascensión al trono de Tarquino Prisco representa el final del periodo <latino sabino> y el comienzo de la fase etrusca.
4_ ¿Qué contradicciones aparecen en relación con la dinastía de los Tarquinos?
Hay especiales motivos para poner en tela de juicio la cronología tradicional de la dinastía de los Tarquinos, en particular el hecho de que el ultimo rey, Tarquino el Soberbio, es presentado como hijo de Tarquino Prisco. Esta circunstancia sería de modo imposible según la cronología tradicional.
Tarquino Prisco era un hombre maduro cuando subió al trono en 616 a.C. Se nos pide, por consiguiente, que creamos que nació unos 150 años antes de la muerte de su hijo en 495. Como el Antiguo murió en 578 a.C, su hijo el Soberbio, habría tenido que contar al menos con 80 años cuando participo en la batalla del lago Regilo.
El analista L. Calpurnio Pisón, sugería que Tarquino el Soberbio era en realidad nieto, no hijo, del Antiguo.
Si aceptamos el árbol genealógico de la dinastía de los Tarquinos basada en la cronología tradicional, por consiguiente, debemos aceptar que los últimos reinados de los últimos tres reyes ocuparon un periodo de 107 años. Cifra que no resulta de algún modo plausible.
Una solución a este rompe cabezas sería afirmar que sus reinados fueron mas breves y que la dinastía alcanzo el poder no ya a finales del siglo VII a.C, si no en el VI (570 y 550 a.C). Pero aquí la contradicción aparece en la tradición; según esta, Tarquino Prisco era hijo de Demarato, aristócrata corintio que emigro a Tarquina para escapar de la tiranía de Cípselo de Corinto (fecha que se traza en 657 a.C) esta fecha dista mucho de ser segura ya que algunos especialistas han propuesto rebajar la fecha de la ascensión del poder de Cípselo y situarla en 620 o 610 a.C. De hecho, si damos por aceptada esta cronología, se podría también retrasar al siglo VI la ascensión al trono de Tarquino el Antiguo.
La mayor ventaja que tiene de situar el comienzo de la dinastía de los Tarquinos entre 570 y 550 a.C es que deja espacio para colocar a los primeros reyes y sus obras en el marco general de desarrollo de la cuidad. Esto ayuda a rever los acontecimientos y las innovaciones relacionadas con los primeros reyes, generando un orden cronológico más real, en donde el sentido común exige situarlos cronológicamente poco después del año 625 a.C.
Estas discrepancias en cuanto Demarato y Tarquino y su relación con el comienzo de la tiranía Cípselida (657 a.C) hicieron que los cronógrafos griegos atribuyeran mas de cien años de duración a la dinastía de los Tarquinos. Por este motivo, y volviendo a lo mencionado; Pisón propuso la tesis de que Tarquino el Soberbio era nieto, no hijo, de Tarquino Prisco. Aun así, debemos señalar que la cronología de los relatos que se han conservado es fruto de manipulaciones artificiales y secundarias. La subida al trono de Tarquino el Antiguo no merece ningún crédito; la forma cacareada que ha tomado la cronología tradicional hace de ella un total espejismo.
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