Análisis “El príncipe feliz” de Oscar Wilde

Análisis “El príncipe feliz” de Oscar Wilde

“El príncipe feliz” es un cuento el cual abarca un universo maravilloso, donde los personajes no son humanos, pero que a pesar de no serlo tienen sentimientos correspondientes a estos, como el egoísmo, el amor, el sacrificio de la generosidad o la empatía.

Los sentimientos melancólicos de la estatua se agudizan por el juicio de la mirada ajena que se fija únicamente en la apariencia - “¿Por qué no puedes ser como el Príncipe Feliz?” -Decía una madre razonable a su pequeño que lloraba por alcanzar la luna- “Al Príncipe Feliz nunca se le ocurre llorar por nada”

La estatua que está parada en un pilar alto el que está cubierto de oro y piedras, destroza al espectador que la admira y es un símbolo de la perfección e admiración a la cual es inservible aspirar ya que es imposible alcanzarla: “-Me alegra que haya alguien en el mundo que sea tan feliz” -mascullaba un pobre hombre frustrado, contemplando la estatua maravillosa. Aun así, en esta historia se muestra que todas las apariencias están ocultas para que si alguien o algo entra en contacto con la realidad, no sufra dolor, incluido el Príncipe Feliz.

 Algo que yo encontré que destaca mucho en la personalidad del príncipe feliz es que el tiene una percepción de la realidad, me refiero a que el protagonista del relato tiene una visión total de la vida de las personas de la ciudad, y por primera vez fue capaz de presenciar la verdadera realidad del sufrimiento del habitantes en esta

La felicidad y la tristeza se muestran como cuestiones de perspectiva, porque si se logra  cambiar el punto de vista y se logra ampliar la visión acerca del mundo, el sentimiento es capaz de transformarse. Las cosas, situaciones y las personas se pueden mirar, analizar y también se puede elegir ignorarlas dependiendo si se elige ver las cosas con empatía, en este caso las diferencias de las clases sociales y la pobreza, por ejemplo.

Un tema presente y central en la obra es el de la diferencia de clases,  la que favorece a algunos pero al mismo tiempo perjudica a otros. La tristeza del Príncipe se produce debido al hecho de que él tuvo que contemplar la injusticia, pero al mismo tiempo se debe a la angustia propia por no poder ser capaz de hacer algo al  respecto. La relación entre el Príncipe y la Golondrina se forma debido a que ellos son capaces de complementarse, la estatua del príncipe era quien tenía la compasión que le generaba la necesidad de ayudar a los necesitados, pero solo puede hacerlo a través de la Golondrina, la cual puede ser la  mensajera de la redistribución de la riqueza que la estatua le propone.

El príncipe hace una reflexión acerca del desinterés e ignorancia que mantuvo durante su vida, así como la injusticia y la opresión social que se muestran en el libro.

El  Príncipe expone  la tristeza que se muestra  en la  ciudad, la estatua está condenada a estar inmóvil y con sus relatos acerca de las diferencias de las clases sociales y el dolor que le generaba esto a la gente, la golondrina logró  tener compasión, compartir la sensibilidad y la estatua logró convencerla de que lo ayude. A pesar de esto, la golondrina no decide ayudarlo inmediatamente. “Me esperan en Egipto”, respondió la golondrina al príncipe, Egipto representa un escenario de esperanza hacia una promesa que contrasta con las condiciones de la ciudad en la cual se encuentra el príncipe .

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