EL PRINCIPE (análisis)
Enviado por feda-orjim • 26 de Mayo de 2017 • Ensayo • 2.404 Palabras (10 Páginas) • 216 Visitas
[pic 2]
EL PRÍNCIPE
Nicolás Maquiavelo
ENSAYO
FÉLIX DANIEL OROPEZA JIMÉNEZ
Licenciatura en Derecho
Cuarto cuatrimestre Gpo. ”B”
Semi-escolarizado Sabatino
Universidad del Sur
Septiembre /2015
ÍNDICE
Contenido
INDICE 1
INTRODUCCIÓN 2
DESARROLLO 3
CONCLUSION 8
BIBLIOGRAFIA 9
INTRODUCCIÓN
Nicolás Maquiavelo, como gran estadista, queriendo congraciarse con el príncipe, al no ser poseedor de joyas, oro, tierras, u otras cosas de valor material, pero si, poseedor de un cúmulo de conocimientos, adquiridos a lo largo toda su carrera dentro de los cargos públicos ocupados, tuvo la ocurrencia de escribir un volumen que diera al príncipe, las estrategias de gobernar, adquirir, conservar y conquistar territorios.
Comienza su obra hablando de los tipos de estado y principados, la manera de la obtención y creación de estos. Una obra en verdad compleja de entender por los razonamientos de cierta manera quisquillosos, invita a hacer política de una manera tal, que genera un involucramiento hasta cierto punto tiránico y genocida. Algunos otros escritores de la época, consideraban la obra del príncipe como una obra satánica llegando a considerar a Nicolás Maquiavelo como “El sanguinario”. Por otro lado, los maquiavelistas, aquellos que coinciden con su forma de pensar, como Benito Mussolini, comentó que su obra el príncipe como el “Tratado teórico del Estado totalitario”.
En mi particular opinión, ya trasladada la obra El Príncipe, a la actualidad podría definirla como: tratado de los principios de la política actual de los Estados, porque la política misma es tendenciosa, es cambiante y si en los tiempos de Maquiavelo este era el modelo ideal de surgir o resurgir, en la actualidad es algo similar lo que hacen los Estados poderosos ante los países pobres, presumiendo por ambas partes la utópica soberanía de los Estados; por un lado el respeto a esta y por el otro la conservación de la misma.
DESARROLLO
Nicolás Maquiavelo, Comenta, el príncipe, para gobernar bien su Estado deberá conquistarlo y hacerlo suyo, si conquista un territorio que habla su mismo idioma es más fácil adquirir el control, sin embargo, de hablar otro idioma, Maquiavelo aconseja que lo más práctico es irse a radicar al territorio conquistado para estar cerca del pueblo para que, en caso de problemas estar cerca de su gente al momento que se le requiera. Este consejo es para ambas circunstancias.
Comenta igual que, al conquistar un territorio hay que parecerse poderoso, aunque no se sea con los principados más pequeños que lo más seguro es que se arremolinarán prestando apoyo en señal de amistad, aunque no sea así, de igual manera hacerlo sentir con los más o igual de poderosos vecinos del territorio conquistado.
Indica que para tener control del territorio conquistado de debe de poner colonias de control en por lo menos dos lugares estratégicos no desplazar ejércitos pues estos debilitarían la economía, pues un ejército requiere de manutención.
Dice que es más difícil conservar o que sea perdurable un príncipe con un principado nuevo que uno heredado o proveniente de un estado o principado, la razón que Maquiavelo da, es que el principado nuevo promulgará nuevas leyes y reglamentos que quizá a la gente que estaba acostumbrada a la libertad no le parezca, sin embargo, un principado heredado quizá hará modificaciones pero será más continuo con ellas. Igual menciona en este caso los únicos rebeldes serán aquellos que con las leyes antiguas estuvieron siempre beneficiados, recomienda en ese caso extinguir esa descendencia.
Comenta además que aquellos príncipes que nacen de la noche a la mañana nada más por la compra u otorgados por la sola gracia del favor, no son duraderos pues al primer obstáculo encontrado se derrumban y es fácil caer. Pues no son principados con vida propia, vigorosos sino con el solo respaldo de la fortuna.
Por igual dice que los hay aquellos que fueron creados por la fortuna y el valor, los ejemplifica con el duque de Milán, Francisco Sforza, quien por su valor obtuvo y conservó su ducado de Milán y el otro Cesar Borgia (Duque de Velentinois). Quien por la fortuna de su padre obtuvo su ducado, aunque después lo pedió.
Comenta igual que existen otros que por las circunstancias obtienen su poderío, en este caso su reinado o principado como Hierón de Siracusano, era buen líder y solo le faltaba el reino para reinar, tuvo su momento, lo aprovecho gracias a su buen liderazgo, sus amigos y aclamadores lo llevaron al cetro y lo consiguió, eliminó las tropas existentes y armó las suyas propias y se quitó de los amigos lambiscones y se hizo de otros; de esta forma se hizo de lo propio.
Dice Maquiavelo, deben valerse de todos los medios para obtener el principado y preparar terreno para el futuro, aun a sabiendas que de momento se está favoreciendo a otros, es decir, colocar gentes en lugares estratégicos que al final redundarán en beneficio de uno, hacer fraudes, eliminar o hacer amigos, hacer o eliminar tropas, aumentar o disminuir leyes, mantener amistades con reyes y príncipes, severo y agradable, magnánimo y liberal…, en fin, sigue comentando que este tipo de argucias, llamémosle en nuestros tiempos, políticas, de adquisiciones y permanencia de principados son el ejemplo vivo del Duque Cesar Borgia, quien solo aprovecho la fortuna del padre para obtener su poderío a lo menos, hasta la muerte de este.
Describe Maquiavelo, de otros que obtuvieron sus principados a costa de engaños, traiciones, matanzas, falta de humanidad; dice que, si bien adquirieron el principado, este fue sin gloria plena, por la estrategia sucia de su obtención, pues fue apegado al valor y a su estrategia militar sanguinaria.
Comenta que sin embargo muchos de estos príncipes que obtuvieron sus principados de esta manera tan sanguinaria no tuvieron problemas con sus gobernados, debiéndose esto tanto al buen o al mal manejo o uso de la maldad, de la crueldad. Dice que para evitar sublevaciones de civiles es necesario hacer uso de la crueldad, la necesaria solamente sin sobrepasarlos, acabar con los males de tajo en una sola acción y con prontitud, sin darles tiempo a la reflexión, no repetir lo mismo todos los días; quedar como un gobernante estricto no sanguinario. En el caso de los beneficios, decía que es conveniente dárselos al pueblo como paliativos, poco a poco, a manera de que ellos lo saboreen, le tomen sabor y les sea más prolongado. Tener seguridad al dirigirse con su gente, su pueblo o tropa y de equivocarse, procurar obtener provecho de esta equivocación.
...