El Discurso del Rey y la Comunicación

EL DISCURSO DEL REY

El habla es el método preferido de comunicación en la mayoría de las poblaciones. El habla tiene un poder inmenso, su impacto depende completamente de cómo lo usamos, y el poder más importante es cómo lo decimos. Podemos suponer que el líder de un reino debe ser perfecto en su habilidad para hablar, para que así las personas puedan inspirarse fácilmente en su discurso, pero esto no siempre es así, como nos muestra la película.

Desde el comienzo de la película, vemos al futuro rey intentando dar su discurso por radio, mientras esta frente a una audiencia, pero no puede pronunciar una sola palabra debido a su problema de tartamudeo y nerviosismo, ese problema se convierte en un obstáculo en su camino. Para deshacerse de este problema, estaba buscando terapeutas, pero no obtuvo el tratamiento que estaba buscando. Finalmente, conoció a Lionel, un excéntrico terapeuta con métodos poco ortodoxos.

Hay varios conceptos de comunicación que Lionel usa para ayudar al rey a superar su miedo. Los primeros conceptos utilizados en la película son la comunicación verbal y no verbal. El rey llega al conocimiento de que la comunicación es ineludible no solo la verbal sino también la no verbal debido al uso de signos y símbolos que expresamos con nuestro cuerpo, conocido como lenguaje corporal. La comunicación verbal y no verbal es fundamental para la forma en que los personajes interactúan entre sí a lo largo de la película.

En el último discurso del rey, podemos notar que, en lugar de comenzar con palabras, comenzó con imágenes. Exploró lo que estaba tratando de decir imaginándolo en su mente. Habló despacio, se tomó su tiempo y dio su discurso. Aquel discurso lo hizo ver como un buen rey delante de todos los pueblos.

Es en ese último discurso donde también podemos ver realizados los tres propósitos de la oratoria, cuando da a conocer la posición de Inglaterra ante la guerra cumple el propósito de informar, con su lenguaje formal y solemne cumple el propósito de deleitar y finalmente con el conocimiento de que es el rey el que esta hablándole a su pueblo, con palabras de prosperidad, cumple el propósito de persuadir, porque les hace saber que el está presente ahí para ellos y que juntos son más fuertes.

Cada oportunidad de hablar es una oportunidad para crecer en liderazgo e influencia. Tener la oportunidad de influir en los pensamientos de las personas nos coloca en una posición para crear un cambio positivo en la vida de las personas. Al volvernos más conscientes del impacto y el poder del lenguaje, podemos tomar decisiones más conscientes y perspicaces sobre cómo nos expresamos y cómo interpretamos a los demás.

El lenguaje, posee un poder de un tipo muy especial, porque, en última instancia, el poder del lenguaje no reside en el hablante, sino en el lenguaje mismo. La capacidad de hablar y el poder están relacionados entre sí. Cuando alguien no puede pronunciar una palabra, no puede tener el poder del lenguaje y cuando no tiene el poder del lenguaje, no tiene el poder del habla. En el caso de un rey carecer del habla puede resultar fatídico porque él tiene que tomar decisiones y hablar por el bien de su gente.

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