El empleo para los egresados de educación superior de México.

El empleo para los egresados de educación superior de México.

El alto índice de egresados de México y sus comunidades han generado desempleo para la sociedad así como de empleos informales, en los últimos años la sobre educación, un grave problema para los profesionistas de hoy en día, (burgos, 2011)

Ha sido un grave problema para los profesionistas de hoy en día, puesto que existe mucha demanda laboral y poca capacidad de empleadores, dado esto como resultado un alto índice de desempleados, esto a que no ay congruencia en los planteles educativos con los empleadores, de tal forma que se generen las mismas necesidades y expectativas para una mejor oferta de empleo.

En el campo de la economía podemos decir que en la actualidad, en nuestro país y regiones de cada estado existen altos índices de profesionistas desempleados, por falta de puestos laborales y otros que ocupan un puesto similar a su profesión y con un sueldo muy bajo de lo estipulado en su ramo, según las estadísticas del (INEGI). Creando como consecuencia un impacto fuerte en la economía para las personas y sus familias.

Y argumentando en un campo de derecho, es importante analizar los aspectos principales para generar una congruencia con los derechos laborales y particulares de los egresados, tales como; las estrategias que ofrecen las instituciones educativas para formar  y capacitar a los estudiantes y enfocarlos con las competencias y conocimientos requeridos por el mercado laboral junto con los empleadores, de dar a conocer que es lo que requieren y ofrecen para los mismos, dando esto como finalidad, una buena oportunidad de empleo y salario, el cual ofrezca una mejor calidad de vida del egresado.

Después de conocer cada uno de los argumentos, es importante reconocer que en nuestro país y comunidad existe mucha deficiencia laboral para los profesionistas, el cual nos hace referencia un artículo de noticias (mexico, 2013) teniendo como resultado, la falta de empleo y sobre todo de una economía, la cual es transformada por necesidad, con esto me refiero a que si no existen las bases exactas para una buena relación entre los empleadores e instituciones educativas, el egresado se ve forzado a tomar cualquier  tipo de empleo informal que se le otorgue, y por consecuencia el dejar sus años de estudio en espera de una oportunidad laboral.

Es necesario tomar consciencia ante la problemática de hoy en día, puesto que al paso de unos años más, serán más los profesionistas desempleados por el mal hábito de no estar enterado de los requerimientos laborales en su necesidad de contratar al personal indicado y en el puesto adecuado, según las estadísticas de (mexico, 2013) creo que habría que hacerse un estudio a fondo de que es lo que requieren los empleadores para sus puestos de trabajo y así hacer un llamado a las instituciones educativas, para generar las carreras apropiadas para los futuros egresados y así no caer en la  misma consecuencia de la que hoy se vive en México y en sus comunidades, al igual que prevenir a los estudiantes sobre las necesidades que tienen las empresas y así puedan tomar una buena decisión al elegir su tipo de profesión.

En mi opinión creo que la problemática seguirá siendo la misma, puesto que en la actualidad se sigue con las mismas prácticas de trabajo y estudio, al igual que no dan derecho a los estudiantes de saber que necesidades tienen las empresas para contratar personal capacitado y el hecho de que en los planteles escolares no se tenga en cuenta los requerimientos de un centro laboral para efectuar los planes y estrategias de estudio adecuados para desarrollar al estudiante en base al perfil solicitado, de tal manera que se siguen graduando en cierta especialidad y cayendo en la necesidad de tomar cualquier puesto de trabajo informal afectando su economía y estilo de vida.

“LA LIBERTAD”

¡La libertad!, leyendo una novela, tuve un momento de reflexión sobre la libertad, que cambió completamente el concepto que tenía sobre este tema, por lo que me formulé como pregunta filosófica: 
¿Somos real y totalmente libres? 
Y mi respuesta fue esta: 
Yo pienso que una libertad total no existe, porque uno no puede hacer lo que quiere en este mundo, vivimos acatando leyes y normas, y su incumplimiento contrae un castigo, por ejemplo: decido no trabajar porque “si trabajo para alguien no soy libre, y si tengo hambre o sed, fácil, robo algo, porque yo hago lo que quiero, soy una persona libre”, pero qué pasa, la ley dice que no se puede robar, y por consecuencia voy preso por robo. Es decir, si no cumplo con la ley tengo consecuencias. Entonces, no soy libre, tengo que cumplir reglas y normas que ya están impuestas. 
La libertad que se dice tener, son pequeñas “libertades”: son aquellas cosas que las normas y leyes sí permiten, o sea, no es una libertad real porque se nos es impuesta.  

Además. Si viviéramos en un mundo donde fuésemos libres de hacer lo que queremos, sería un mundo de caos: si cada uno hace lo que se le da la gana sería todo un desastre, porque viviríamos en un desacuerdo constante entre todos, pues tenemos un concepto diferente de lo que es la libertad. 
Por eso, me parece que está bien que existan las leyes y normas porque ayudan a que convivamos de la mejor forma posible, que haya cierta organización de las cosas para un bienestar social. 
A la libertad la puedo relacionar con materias como: 
Historia (países que luchaban en la búsqueda de la libertad). 
Literatura (poemas, novelas que se basan en la libertad). 
Dibujo (el arte como medio de expresión de la libertad). 

"La libertad”, en su nivel más elevado, emerge cuando la persona, sujeto de derechos inviolables, es reconocida como tal. Los derechos del otro se convierten así en deberes del sujeto y recíprocamente, los derechos del sujeto constituyen deberes para el otro. En esta situación la libertad, como simple libre albedrío se convierte en responsabilidad.  
Decimos que el hombre se transforma en el ejercicio de la libertad. En la actualidad el hombre tiene sed de autorrealización, se siente más oprimido y alienado por el trabajo, que en épocas anteriores; ya que todas las actividades que realiza tienden al desarrollo socioeconómico más que al logro personal. 

Para mí hay dos puntos de vista desde los cuales se puede analizar la libertad: 
La libertad positiva, consiste en estar en armonía con la naturaleza pero sin abandonar lo que hace al individuo independiente. 
La libertad negativa, en la cual el individuo abandona su libertad y utiliza mecanismos que le ayudan a sentirse seguro y confiado, pero que le roban la libertad. Estos mecanismos son el fascismo y la democracia moderna. 

La libertad hasta en los principios del hombre ha existido, como dice  uno de los padres más destacados de la Iglesia Latina Agustín de Hipona, más conocido como San Agustín. Dice que a lo largo de la historia Dios le ha concedido al ser humano dos dones: 
El libre albedrío: al contrario que el resto de los animales, que tienen una función determinada, al principio de los tiempos, Dios le concedió al ser humano una “voluntad indeterminada” que le permitió elegir entre dos caminos: el bien (lo que quiere Dios) o el mal (un querer propio). El primer hombre que pudo elegir fue Adán, y escogió mal. Por lo tanto, su alma la heredamos todos, por lo que estamos condenados a no poder “no pecar”; y 
La libertad: es el segundo don que Dios concede a algunos hombres tras haber desaprovechado el primero. Éste les permite “no pecar”. Los hombres dotados son influenciados por Dios para que escojan bien, a pesar de que ellos piensen que es su propia voluntad la que les permite elegir, y es algo en lo que estoy muy de acuerdo. Siendo el libre albedrío una posibilidad de elección por parte del hombre, está admitido que la acción voluntaria pueda inclinarse hacia el pecado (cuando se actúa sin la ayuda de Dios), mientras que la libertad consiste en determinar de qué forma puede utilizar el hombre su libre albedrío para realmente ser libre, es decir, para elegir el bien. 
Por lo que podemos decir que, para San Agustín la libertad es un atributo natural, ya que se nos fue otorgado por Dios, y se necesita de Él para que el libre albedrío del ser humano sea utilizado para el bien, en otras palabras, para ejercer la libertad, o sea, sin la guía de Dios no podemos alcanzar la libertad, porque por nuestra propia voluntad no podemos elegir siempre el bien, pero Dios nos guiará a ello, y nos ayudará a conseguir ese don que se nos fue otorgado por Él. 

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